MÉXICO LIDERA hasta las MUERTES por BALAS PERDIDAS

Estudio señala que el fenómeno se da por violencia social o interpersonal, delincuencia o festejos

México es el segundo país en América Latina con más casos de violencia armada por balas perdidas, reportó el Centro Regional de las Naciones Unidas para la Paz, el Desarme y el Desarrollo en América Latina y el Caribe (UNLIREC).

  • De acuerdo con el organismo, el mayor número de víctimas por los también llamados “tiros alegres” son producto de violencia social, comunitaria o interpersonal, acciones del crimen organizado o festejos.
  • “Abraham”, un hombre que durante diez años disparó su escopeta al aire en diferentes ocasiones en la alcaldía de Iztacalco, asegura que este tipo de acciones le significa “hacer sentir el poder… ¡un reinado!”.
  • Entrevistado por Excélsior, el exintegrante de una banda delictiva afirma que cada 10 de mayo, 15 de septiembre, Navidad, Año Nuevo y “mi cumpleaños”, eran fechas ideales para accionar sus armas, junto con un grupo de colegas.

“A mí lo que más me gustaba era escopetear”, describe.

  • En el informe del UNLIREC, presentado en 2016, México aparece con 116 casos y 132 víctimas.
  • Francisco Rivas, director del Observatorio Nacional Ciudadano, dijo que el problema con este fenómeno que ha dejado 55 víctimas mortales, radica en la falta de una política de control de armas.
  • Los motivos y actores de los casos de balas perdidas son desconocidos, esto implica que muchos nunca sean investigados.

“Abraham” comentó que todas las veces que disparó al aire lo hizo sin pensar en que podía lastimar a alguien. No sabe si alguna de las miles de balas que lanzó en la Ciudad de México lastimó a alguien, aunque afirmó “no me arrepiento”.

Niños, blanco de 41% de balas perdidas

  • “¡Vamos a echar cacahuate!”, frase para disparar al aire; tirar es “hacer sentir el poder… ¡un reinado!”, dice a Excélsior
  • un hombre que durante 10 años puso en el aire de la Ciudad de México miles de proyectiles de armas de fuego
  • El cielo de México es el segundo de América Latina donde más balas perdidas vuelan, según el Centro Regional de las Naciones Unidas para la Paz, el Desarme y el Desarrollo en América Latina y el Caribe (UNLIREC).
  • Excélsior obtuvo el testimonio de un hombre que durante diez años, en determinadas fechas, puso en el aire de la Ciudad de México miles de proyectiles, específicamente de la colonia Gabriel Ramos Millán en Iztacalco. Aunque da su nombre y apellidos, prefiere ser identificado como “Abraham”.
  • “¡Vamos a echar cacahuate!”, es la expresión análoga (cuando uno parte un cacahuate truena) que usaba “Abraham” para disparar al aire desde una esquina en la calle y a plena luz del día. La idea con este tipo de acciones es “hacer sentir el poder… ¡un reinado!”, afirma mientras frunce el ceño, aprieta los dientes y cierra los puños.
  • Los hechos en los que el UNLIREC tiene documentados el mayor número de víctimas (muertos o heridos) en México por balas perdidas o, como los denomina este centro, “tiros alegres”, son producto de violencia social, comunitaria o interpersonal, de acciones de la delincuencia organizada y por la celebración de fiestas.
  • Esta última tesis del UNLIREC la confirmó “Abraham”. Puntualmente, cada 10 de mayo, 15 de septiembre, Navidad, Año Nuevo y “mi cumpleaños”, este hombre, exintegrante de una banda delictiva y un grupo de sus colegas, cargaban enormes bolsas llenas de municiones para metralletas cortas calibre 9 milímetros, AK-47, distintas armas cortas y cartuchos para escopeta en cajas de zapatos. “A mí lo que más me gustaba era escopetear”, dijo, al tiempo que simula cómo accionar ese tipo de armas, ya sea calibre 12 o 18, ayudado con el empeine del pie derecho para recargar el arma y disparar al aire una y otra vez.
  • El informe completo de 182 páginas que el UNLIREC proporcionó a Excélsior, a través de uno de sus autores, Julián Bustamante, se titula Balas Perdidas II: Análisis de Casos de Balas Perdidas Reportados en Medios de Comunicación en América Latina y el Caribe. El centro, con sede en Lima, Perú, presentó en mayo de 2016 la investigación de 741 casos de violencia armada por bala perdida, con 826 víctimas, en 25 países de la región.
  • En esa lista, México aparece con 116 casos y 132 víctimas, debajo de Brasil que tiene 197 casos, y por encima de Colombia, que tiene 101 hechos en el periodo entre 1 de enero de 2014 al 31 de diciembre de 2015.
  • De las 132 víctimas mexicanas de las que da cuenta el UNLIREC en su reporte más reciente de este tema, 55 resultaron en muertes y las otras 77 son heridos.
  • Del total de los incidentes reportados en México, 19 están relacionados con violencia social/comunal/interpersonal, lo que convierte a este país, según la ONU, en el que presenta el mayor número absoluto de casos de balas perdidas por esa causa, 16% de todos los casos documentados en México.
  • Adicionalmente, México presentó el mayor número absoluto (16) de casos de balas perdidas como consecuencia de tiros al aire/disparos alegres, correspondiendo al 14% de los incidentes documentados en el país.
  • En el documento del UNLIREC se estableció que de las 132 víctimas por balas perdidas en México, 84 fueron hombres, representando así el país con el mayor número absoluto de hombres víctimas de balas perdidas. 39 fueron mujeres y en nueve casos no se reportó sexo.
  • En la estadística de UNLIREC, 41% de las víctimas en México durante el periodo analizado, es decir 51 personas, son niños; el 18%, 24 sujetos, adultos jóvenes; 24%, 32 individuos, adultos y el 17%, 22, de edad desconocida.

Un médico forense de larga experiencia en la Procuraduría de Justicia de la Ciudad de México y también en el servicio pericial federal afirmó que en los últimos 18 años, en los que trabajó en la zona de Iztapalapa, le tocó atender más de una decena de casos. “Es la zona donde más muertos por balas perdidas se registran en la Ciudad de México, sobre todo niños”, dijo el especialista.

“Me acuerdo de algunos, como un niño que asomaba la cabeza por una ventana, mientras veía que su mamá iba a la tienda y fue impactado por una bala; otro que iba caminando en la calle con su abuelita, brincando de la banqueta a la calle y ahí le cayó la bala; otro que estaba en un puesto de quesadillas, la bala atravesó una lona y ahí murió”, dijo el forense.

De acuerdo con las declaraciones de este médico forense, en los festejos en Santa Cruz Meyehualco y Santa María Aztahuacán es donde se originan mayores incidentes por balas perdidas. San Cruz tiene siete festejos en el año, mientras que Santa María tiene 16. /EXCELSIOR-PUNTOporPUNTO

Recibe nuestro boletín informativo, suscríbete usando el formulario