El Gobierno federal, que termina su sexenio este año, logró estabilizar la producción petrolera, pero de forma endeble, por lo que la siguiente Administración federal se enfrentará a este reto.
«De entrada, el Gobierno siempre fue muy optimista al estimar 2 millones de barriles diarios a inicios del sexenio; sin embargo, estamos muy lejos de alcanzarlos», comentó Diego Díaz, coordinador de Finanzas Públicas del Instituto Mexicano para la Competitividad (Imco).
Sin embargo, sí logró la estabilización que venía cayendo de manera sistemática desde finales de 2003 y principios de 2004.
«Pero algo que es preocupante es que la inversión de Pemex se plantea que se reduzca y se ha planteado así en el último Presupuesto de Egresos de la Federación, sobre todo en exploración y producción.
«Esto podría tener implicaciones en el mediano plazo en términos de la producción y de la restitución de reservas, entonces, creo que hay un riesgo latente de que se empiece a ver una caída en la producción petrolera y ni siquiera se cumpla con esta meta de estabilizar la producción», advirtió el experto.
- De acuerdo con México Evalúa, la inversión física promedio para Pemex ha sido 29 por ciento menor a la observada con el Gobierno del ex mandatario Enrique Peña Nieto y 10 por ciento menor a la registrada en el sexenio del ex Presidente Felipe Calderón.
- Para este último año del sexenio también se plantea una menor inversión ante su complicada situación financiera.
- Aclaró que el riesgo de una caída en la producción petrolera es un problema latente en la medida en la que la paraestatal deje de invertir lo que inyectaba de recursos anteriormente en exploración y producción.
«No creo que se pueda reflejar tan cerca, como en este año, pero sí relativamente pronto», dijo.
Díaz recordó que para este año 2024, se espera que cierre en un millón 852 mil barriles de crudo diarios.
Mientras que para el 2025, se espera un aumento marginal, ya que cerrará en 1 millón 863 mil de barriles cada día.
«Vemos un poco lo que ha hecho el Gobierno federal actual de estabilizar la plataforma de producción, pero no que se vaya a incrementar de forma importante, lo que a su vez se traduce en menores ingresos en buena medida por una plataforma estable y caída en el precio del crudo a 71.3 a 58.4 dólares por barril», mencionó el experto.
Consideró que será significativo ver en qué medida estas estimaciones de producción y el precio de la mezcla podrían afectará a Pemex y a la Administración federal, ya que habría también daño a las finanzas públicas del País.
Producción petrolera de México caerá 25% al 2028
La producción petrolera de México descenderá en los próximos cinco años tanto por la reducción de inversiones del Estado como por la escasa actividad de privados que se reduce a la dependencia de los campos en desarrollo que se han logrado adjudicar en el país, pronosticó la Agencia Internacional de Energía (IEA, por su sigla en inglés).
Así, con una caída de 500,000 barriles diarios o 33% menos a su extracción de todos los líquidos hidrocarburos (crudo, condensados y líquidos del gas), México se convertirá en el país con la reducción porcentual más grande entre los que forman el bloque de no afiliados a la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP+).
- De enero a julio, la producción nacional de crudo reportada por la Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH) más la producción de condensados reportada por Petróleos Mexicanos (Pemex) promedia 1.944 millones de barriles diarios.
- En términos absolutos, México registrará la mayor declinación en su producción petrolera después de Rusia entre los productores de la OPEP+, para situarse en algo menos que 1.5 millones de barriles por día en 2028, según el último Outlook de la Agencia Internacional de Energía.
La producción de Rusia, por su parte, caerá desde los actuales 9.6 millones de barriles por día a 9 millones de barriles diarios en cinco años, una reducción de 5.5% o 600,000 barriles diarios en un lustro.
El organismo internacional planteó en su documento “Oil 2023, Analysis and Forecast to 2028”, que la disminución de la producción de México a largo plazo en la producción de petróleo muestra un breve respiro en 2022-23 a medida que el campo Quesqui se intensifica. “El sector ha tenido altibajos desde la pandemia, cuando Pemex restringió severamente las inversiones planificadas”, estimaron.
- Por otra parte, el proyecto Ichalkil-Pokoch de Fleetwood Energy ha estado funcionando continuamente desde su inicio y el Área 1 de Eni ha mostrado aumentos constantes en los volúmenes desde que el barco plataforma FPSO Miamte se puso en servicio en 2022. Además, los grandes descubrimientos recientes de Eni y Wintershall Dea se han sumado a esos éxitos.
Para frenar el declive en años posteriores, será crucial poner en funcionamiento los campos Zama y Trion”, expuso la AIE, “la salida de Equinor del país y la serie de agujeros secos de Shell han generado dudas sobre las perspectivas de crecimiento a largo plazo de México”.
Escasean los recursos y medios para invertir
El país no contará con nuevos desarrollos petroleros en tanto no se reanuden las rondas de adjudicación de nuevas áreas, puesto que el Estado tiene recursos limitados para mantener todas sus actividades de exploración y ya ha iniciado la producción acelerada de nuevos campos, con lo que tomará tiempo arrancar con otros.
- A la vez, los yacimientos gigantes con que ha contado el país llevan una trayectoria de declinación natural que no se podrá frenar y no se observan alternativas para sustituir la producción que aportan al total nacional.
- Por ejemplo, la producción del activo compuesto por los campos Ku, Maloob y Zap en la Sonda de Campeche bajará desde los pocos más de 700,000 barriles por día que aporta hoy, a poco menos de 500,000 barriles diarios en cinco años, siendo uno de los principales factores que aportarán a la caída nacional de producción de hidrocarburos líquidos.
El otro yacimiento gigante en aguas someras mexicanas, Cantarell (descubierto en los años setenta del siglo pasado), reducirá a la mitad su producción, que ya es menor de 400,000 barriles diarios luego de la extracción acelerada se los últimos 15 años, cuando este yacimiento llegó a producir casi 2 millones de barriles diarios por cuenta propia.
El documento de la EIA calcula que los campos prioritarios que ha arrancado Pemex para su producción acelerada llegarán a su pico de poco más de 450,000 barriles diarios el próximo año y luego comenzarán a declinar, mientras que los operados por contratistas privados como Tecoalli, Miztón, Amoca y Hokchi también iniciarán su descenso a finales de 2024.
Hacienda prevé una producción de crudo de 1.8 millones de barriles para 2025
La Secretaría de Hacienda ha dejado de lado las altas expectativas en cuanto a la producción y los ingresos de la industria petrolera. La dependencia ha planteado para el año próximo –el primero del siguiente sexenio– una plataforma de producción de apenas 1.863 millones de barriles diarios, una cifra apenas por encima de los niveles actuales.
Con el planteamiento de Hacienda, publicado esta mañana en el documento de Pre-Criterios para el año próximo, también han quedado descartadas las altas metas de producción de petróleo dibujadas por la administración obradorista. Según las previsiones, la estatal Pemex y los privados concluirán el año con una producción de 1.852 millones de barriles al día.
- Las metas dibujadas por el actual gobierno federal incluían una producción por encima de los 2 millones de barriles diarios. Los analistas habían descartado desde los primeros años del sexenio que se lograrían estos objetivos.
- Pemex no logró alcanzar esta meta porque, entre otras cosas, ha decidido priorizar la actividad en pozos maduros –con bajas cantidades de crudo–, porque no tiene en su portafolio nuevos activos productores y sus grandes campos ya están en fase de declinación.
La Secretaría de Hacienda también ha planteado un escenario poco optimista respecto a los ingresos petroleros que obtendrá la próxima administración federal, al menos durante el primer año. La dependencia ha situado el precio de la mezcla mexicana de petróleo para 2025 en alrededor de 58 dólares por barril, un escenario muy por debajo del actual, cuando se estima que éste promedie 71 dólares por barril.
Este bajo precio impactaría las aportaciones de Pemex a las arcas públicas, pese a que la dinámica de exportaciones continuará sin grandes modificaciones. Hacienda ha planteado que alrededor del 50% de la producción de crudo se comercializará en el extranjero.
Autosuficiencia en gasolina premium, a años luz
- Si el país quiere alcanzar la autosuficiencia energética, Pemex debe comenzar por subir la producción de gasolina premium, ya que en la actualidad importa casi la totalidad.
- La empresa produjo apenas 4 mil 400 barriles diarios del petrolífero en enero, pero los mexicanos consumieron 121 mil 800 barriles diarios, es decir, se tuvo que traer del extranjero 96% de la gasolina roja, de acuerdo con cifras de la Secretaría de Energía y Pemex.
- Antes de la reforma energética de 2013, la petrolera importaba 83% del combustible de alto octanaje.
La refinación de premium se relaciona con los métodos de producción y la materia prima, ya que, entre otros procesos que la diferencian de la regular o magna, la roja proviene de petróleos más ligeros.
Sin embargo, Pemex extrae mayormente crudos pesados y cada vez menos ligeros, lo que vuelve al país más dependiente de Estados Unidos, de donde proviene la mayoría de los combustibles.
Analistas coinciden en que la empresa productiva del Estado debe incrementar el procesamiento de crudos ligeros en el Sistema Nacional de Refinación (SNR) o adaptar las refinerías y sus dietas.
- A pesar de que el sistema recibió una fuerte suma de inversión pública para rehabilitar sus instalaciones, la capacidad utilizada se estancó en 55%. Las refinerías diseñadas para procesar crudos ligeros generan menos premium y más combustóleo, un derivado con mayor contaminación.
- El director de Petróleos Mexicanos, Octavio Romero Oropeza, dio a conocer que el déficit total de gasolinas será de 77 mil barriles diarios al cierre de esta administración, aunque confía en que la refinería de Dos Bocas, Tabasco, mejore la situación, así como las coquizadoras de Tula, Hidalgo, y Salina Cruz, Oaxaca, que van a procesar más combustóleo para convertirlo en gasolinas.
No obstante, las proyecciones de la petrolera aún siguen sin aclarar qué tipo de gasolinas se obtendrán de estos procesos.
El director de Proyectos de Energía en Akza Advisors, Arturo Carranza, explica que el deterioro de las seis refinerías llegó a tal punto en que ya no logran operar más allá de 50% de sus capacidades, cuya contaminación cada vez es mayor.
“Este porcentaje está lejos de lo que planteó la Secretaría de Energía al empezar esta administración, cuando dijo que se iba a terminar en 70% u 80% de la capacidad. Incluso, sólo para ejemplificar dicho rezago y daño en las instalaciones, está el paro técnico en el último trimestre del año pasado en la refinería de Madero”, comenta a EL UNIVERSAL.
- Mientras el SNR continúe operando por debajo de 70%, el objetivo de la autosuficiencia no se va a alcanzar, opina Carranza. En la conmemoración del 86 aniversario de la Expropiación Petrolera, el presidente Andrés Manuel López Obrador señaló que al cierre de su administración México va a quedarse a 6% de alcanzar el objetivo de la autosuficiencia, por lo que este porcentaje será traído del extranjero.
“Se rehabilitó y amplió todo el sistema de refinación y hemos pasado de importar 80% de las gasolinas que consumimos en el país a sólo 30%, y en septiembre próximo únicamente importaremos 6%, casi seremos autosuficientes”, dijo el Mandatario en la Torre de Pemex el pasado 18 de marzo.
Aunque en julio de 2022 se llevó a cabo una ceremonia de inauguración, la refinería de Dos Bocas sigue sin producir petrolíferos comerciales y Carranza ve poco probable que comience a operar en septiembre próximo, dada la cantidad de veces en que se ha retrasado la puesta en marcha del complejo tabasqueño.
- Dos Bocas y las coquizadoras que se construyen en las refinerías de Tula y Salina Cruz pueden ayudar no solamente a reducir la compra de gasolina de alto octanaje del extranjero, sino a dejar de importar petrolíferos en general.
“Pero es imposible saber con certeza cuánta premium se va a elaborar en Dos Bocas porque no se han hecho las pruebas de las plantas”, señala Gonzalo Monroy, especialista en materia energética.
Desde su perspectiva, la refinería de Dos Bocas va a operar a 100% entre 2025 y 2026. El año pasado, la Agencia Internacional de Energía (IEA, por sus siglas en inglés) estimó que Dos Bocas operará a 100% en 2025.
- En respuesta, la entonces secretaria de Energía, Rocío Nahle, aseguró que Dos Bocas estaría refinando a finales de 2023 y que desconocía de dónde la IEA había obtenido esas proyecciones, dado que no visitó la construcción del proyecto.
- Además de la refinación, la oferta de gasolina roja depende de la plataforma de extracción de petróleo ligero. Los datos más recientes de Pemex señalan que 37% del crudo que extrajo en enero fue del tipo ligero y superligero, mientras el resto correspondió a petróleo pesado.
La producción de crudos ligeros y superligeros se redujo 31% al compararlo con 2018 y cayó 49% frente a 2010, indican las cifras de la Secretaría de Energía./Agencias-PUNTOporPUNTO