Este año ha continuado la recuperación de los ingresos por gasolinas iniciada en 2024, de tal manera que los datos a septiembre muestran el segundo mejor registro para un mismo periodo.
- Datos de la Secretaría de Hacienda muestran que el Impuesto Especial sobre Producción y Servicios aplicado a gasolinas registró recursos por 320 mil 554 millones de pesos, un incremento de 10.7 por ciento anual en términos reales.
- El dato representó la segunda cifra más alta que Hacienda tenga en sus registros, sólo por debajo de los 340 mil millones de pesos a precios actuales que se observaron durante enero-septiembre de 2016.
Detrás de los resultados de la recaudación por gasolinas está las estabilidad en los precios del petróleo este año, que al no incrementarse de forma abrupta este año, ha permitido al gobierno no otorgar estímulos fiscales a las cuotas que cobra a los automovilistas, de tal forma que ha podido cobrar en casi la totalidad del año las cuotas máximas de 6.45 pesos por litro en el caso de la gasolina Magna, 5.45 pesos por litro para el caso de la Premium, y de 7.09 pesos por litro para el caso del diésel.
Esta situación ha permitido compensar la dinámica de consumo de combustibles este año, pues a septiembre, las ventas de la gasolina Magna han caído 4.0 por ciento anual, las del diésel han retrocedido 6.8 por ciento, pero las del diésel han aumentado 11.3 por ciento.
El funcionamiento
Las cifras de Hacienda muestran que, entre 1990 y 2005, los ingresos del IEPS por gasolinas (antes llamado IEPS petrolero) fueron positivos, es decir, representaron recaudación neta para el gobierno federal.
Sin embargo, entre 2006 y 2014, dicho gravamen fue negativo, es decir, dejó de ser recaudatorio para convertirse en un subsidio neto que el gobierno federal decidió otorgar a los automovilistas, con el fin de que no enfrentaran los incrementos en el precio de la gasolina, situación que se terminó en 2015 con la aprobación de la reforma energética del sexenio anterior.
- Además, desde 2017, el gobierno ha usado la cuota del IEPS de combustibles como un “amortiguador” del precio internacional de los combustibles para que éstos no se vean reflejados en las estaciones de servicio.
- Lo anterior debido a que la mayor parte de los combustibles que se consumen en el país provienen del exterior, por lo que los precios internos están sujetos a los movimientos de los precios en los mercados internacionales.
El mecanismo de la cuota del IEPS funciona de la siguiente forma: cuando los precios internacionales del petróleo suben, también lo hacen los costos internos de las gasolinas por la razón descrita, de que la mayoría del combustible consumido en el país es importada.
- En ese momento el gobierno aumenta el estímulo fiscal a las gasolinas, con el fin de que los precios al público suban lentamente. Esto se traduce en la práctica en un menor cobro de la cuota del IEPS al público, lo que ocasiona que se reduzcan los ingresos del gobierno federal.
- Sin embargo, para 2022, se decidió que el cobro de la cuota sea cero, convirtiéndose en un subsidio neto.
Situación contraria ocurre cuando el precio internacional del petróleo baja: dado que los costos internos de las gasolinas disminuyen, esto da margen al gobierno a reducir los estímulos fiscales, lo que se traduce en mayor cobro de la cuota del IEPS a los consumidores, con el fin de aprovechar ese margen que dejan los menores costos de las gasolinas, y a la vez para que el gobierno obtenga mayores ingresos.
Esto es lo que ha ocurrido este año, razón por la cual el cobro de la cuota del IEPS es total, lo que significa subsidio cero para los consumidores.
El gobierno siempre ha aclarado que el mecanismo de estímulos al IEPS no tiene como objetivo evitar el alza de precios al público, sino que, por el contrario, su fin es que el incremento no sea abrupto, para que éste se presente de forma ordenada y suavizada./Agencias-PUNTOporPUNTO
























