Nostradamus fue un médico, astrólogo y escritor francés del Renacimiento, cuyo nombre real era Michel de Nostredame. Nació en 1503 en Saint-Rémy-de-Provence y murió en 1566. Principalmente por su libro Les Prophéties (1555), una colección de 942 cuartetas (poemas de cuatro versos) que muchos interpretan como profecías sobre eventos históricos y futuros.
Características de sus “profecías”, fueron escritas en lenguaje simbólico y ambiguo, mezclando francés antiguo, latín y referencias astrológicas, no siguen un orden cronológico claro. Permiten múltiples interpretaciones, especialmente después de que ocurren hechos históricos.
Predicciones que se le atribuyen (de forma popular), aunque debatidas, se le han vinculado con:
La Revolución Francesa.
El ascenso de Napoleón Bonaparte.
Adolf Hitler y la Segunda Guerra Mundial.
Atentados modernos y crisis globales.
Importante no existe consenso académico de que Nostradamus haya predicho estos eventos de manera literal; la mayoría de las interpretaciones son retrospectivas.
Además de profeta, fue un médico respetado, conocido por sus tratamientos durante brotes de peste bubónica, escribió sobre farmacología, cosmética y astrología médica y fue astrólogo de la corte de Catalina de Médici, reina de Francia.
¿Visionario o mito?
Para algunos, un visionario adelantado a su tiempo; para historiadores y científicos, un autor enigmático cuyo éxito se debe a la ambigüedad de sus textos y a la tendencia humana a buscar patrones. Otros profetas religiosos que dejaron amplia influencia en la humanidad fueron Moisés, profeta del judaísmo; Isaías, quien denunció la corrupción del poder; Jeremías, que advirtió la caída de Jerusalén por la decadencia moral; Mahoma, profeta del Islam, quien unificó la fe, la ley y la política. Entre los profetas cristianos, Juan el Bautista anunció el cambio radical del orden moral; Joaquín de Fiore creó la teoría de las “tres edades” de la historia; Hildegarda de Bingen tuvo visiones sobre la decadencia espiritual y política; y Juan de Patmos escribió su texto sobre el Apocalipsis. En la modernidad encontramos al famoso Rasputín, quien influyó en la corte del zar Nicolás II.
Y los filósofos que nos tienen en la lucha o que han sido excusa de dictaduras crueles y engaños a los pueblos como Karl Marx anticipó la crisis del capitalismo industrial y todavía nos tiene en intensas discusiones; Alexis de Tocqueville vio los riesgos de la democracia de masas; Oswald Spengler teorizó el declive de Occidente; George Orwell alertó sobre el totalitarismo y la vigilancia. Aunque todos estos grandes personajes de la historia tienen sus teorías, es claro que lo que complica las consecuencias de sus actos son quienes los interpretan o quienes toman sus teorías y las usan para controlar masas a su favor.
Para 2026, las perspectivas en América apuntan a un año de reacomodo político, presión económica y mayor polarización, con efectos desiguales por subregión.
Panorama general 2026
Las democracias bajo estrés: elecciones competidas, judicialización de la política y tensiones entre poderes la región seguira girando a la derecha por los pesimos gobiernos populistas de izquierda que han hecho sufrir a la población en los últimos años.
Economía contenida: crecimiento moderado, inflación más controlada pero con desigualdad persistente. Hasta que no se establezcan planes serios educativos, tratados de libre comercio, sistemas judiciales eficientes, ayuda a las PYMES, simplificación de trámites, créditos, medidas ambientales y de ayuda al campo, estímulos para invertir formalmente y bajen los niveles de corrupción, no tendremos un crecimiento sostenible en la región. Los países que crecerán serán Estados Unidos, Canadá, Colombia, Guyana, República Dominicana, Panamá, Argentina, El Salvador, Chile, Paraguay, Guatemala y Venezuela. México tendrá menor crecimiento que la media regional/global, a pesar del Mundial de Futbol 2026. La reforma judicial, los incentivos al trabajo informal, las millonarias ayudas económicas del bienestar, la inseguridad, la necesidad de mayor desarrollo eléctrico,el cuidado y tratamientos de agua, la falta de organismos reguladores autónomos e independientes y la falta de competencia económica, además del apoyo a monopolios públicos y privados, son su talón de Aquiles. También genera expectativas qué pasará con los aranceles que impondrá México a China, ya que México tiene actualmente un gran parque automotor de coches chinos y también una dependencia en miles de productos que no se producen en el país. No tendrán tiempo de suplantarlos; es evidente que esto puede generar un empuje a la obligación de China de fabricar en México, pero también, mientras se reacomoda el mercado, sufrirán más inflación.
Se espera en 2026 la firma de libre comercio entre la Unión Europea y los países del Mercosur (Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay) reduciendo aranceles y ampliando cuotas de productos, aunque esta estancado por el proceso de aprobación interna de la UE, este tratado da un salvavidas a ambas regiones creando un enorme mercado de 780 millones de personas.
El T-MEC en 2026 debe ser mantenido e incluso modernizarlo para hacerlo más competitivo ante Asia y la UE, podrian incluirse temas nuevos como tecnología, cadenas de suministro, energías, y normas digitales, creo que a esta altura México, Estados Unidos y Canadá aunque con diferencias saben que no pueden sobrevivir a un mundo menos globalizado y más de bloques de comercio por separado.
Migración como eje: la forma en que se trata la migración en América sigue siendo errónea, ya que puede ser un polo de desarrollo para tener mano de obra calificada y está demostrado que impulsa las economías. Sigue siendo tema central en México, Centroamérica, el Caribe y Sudamérica. Continuará la migración a la inversa por las políticas del gobierno de EE. UU.; los países tendrán que activar planes de recepción de migrantes de sus propios países, mejorar políticas de refugio y asilo, y agilizar trámites para la inserción laboral. Se prevé, por la caída de Nicolás Maduro, una fuerte re-migración hacia Venezuela: millones de personas volverán al país para su reconstrucción.
Geopolítica activa:
EE. UU.–China, sanciones, nearshoring y BRICS influyen en agendas internas. El BRICS seguirá siendo percibido como un contrapoder emergente al dominio global tradicional, con Brasil, India y China como motores de crecimiento significativo; es posible que entren nuevos miembros como Egipto y Emiratos Árabes.
En Estados Unidos, las elecciones legislativas (midterms), el Congreso puede redefinir el margen del Ejecutivo. El 3 de noviembre de 2026 se renovarán 435 escaños de la Cámara de Representantes y 35 de los 100 escaños del Senado; también se elegirán gobernadores, legislaturas estatales y otros cargos. Esta será la prueba de fuego para Donald Trump: internacionalmente pesará su éxito en derrocar al régimen de Maduro y la paz en Ucrania; internamente, controlar la inflación y el crecimiento económico. Todo pinta que puede lograrlo.
En Honduras, las elecciones presidenciales de 2025 serán acatadas, ya que el ejército apoya al CNE, aunque exista polarización y desgaste institucional.
Principales elecciones nacionales en América 2026:
1 de febrero 2026 – Costa Rica
Elecciones generales (presidente, vicepresidentes y Asamblea Legislativa), hay 12 candidatos a la presidencia, las elecciones se centraran en la disputa entre Fabricio Alvarado Muñoz Partido Nueva República (PNR) candidato de derecha y Laura Fernández Delgado vinculada al gobierno actual del (Partido Pueblo Soberano PPSO).
12 de abril 2026 – Perú
Elecciones generales, (presidente, vicepresidentes, Congreso y retorno del Senado dentro de un sistema bicameral). Los candidatos que suenan para la presidencia del Perú son Rafael López Aliaga (Renovación Popular) y Keiko Fujimori (Fuerza Popular).
31 de mayo 2026 – Colombia
Elección presidencial con posible segunda vuelta en junio si ningún candidato obtiene mayoría en primera ronda. En Colombia para la presidencia hay dos posibles candidatos que logren el triunfo, Avelardo de la Espriella conservador y populista. Sergio Fajardo ex alcalde de Medellin de centro y el candidato de Gustavo Petro de Pacto Histórico Iván Cepeda quien tendra que luchar en contra de las malas decisiones del gobierno y la desastroza postura de apoyo al dictado Nicolás Maduro y el conflicto con el gobierno de Estados Unidos entre otras políticas herradas.
4 de octubre 2026 – Brasil
Elecciones generales: presidente, vicepresidente, Congreso (bicameral), gobernadores y legislaturas estatales; con posible segunda vuelta el 25 de octubre.
En 2026, la inteligencia artificial (IA) dejará de ser “promesa” para convertirse en infraestructura crítica de gobiernos, empresas y sociedad civil. Estas son las tendencias más probables (con implicaciones claras para derecho, migración, economía y gobernanza). Lula da Silva va por su insolito cuarto mandato lo que seria solo posible en Latinoamerica y en nuestro realismo magico, yo estoy convencido que la alternancia es pilar fundamental de la democracia pero los brasileños no comparten mi posición. Por otro lado aunque atrás en las encuestas esta el hijo de Jair Bolsonaro el conservador Flavio Bolsonaro quien quiere girar el timón de Brasil hacia la derecha, faltan meses a ver que pasa.
Es importante señalar que en Costa Rica, Perú, Colombia y Brasil contemplan segunda vuelta (balotaje) es sus elecciones presidenciales, aunque con distintas reglas en cada país.
México se prepara para las elecciones de 2027 y el gobierno de Sheinbaum tendrá grandes presiones en 2026 para entregar a las autoridades a miembros de su partido, MORENA, ligados a cárteles, huachicol y corrupción, lo que podría provocar una ruptura del partido, así como las candidaturas de familiares de gobernadores que van contra las normas que prohíben postular a familiares directos como gobernadores o presidentes municipales. Continúan los escándalos de corrupción; el desgaste del gobierno por errores del sexenio anterior se hará sentir más que nunca. La falta de disciplina partidista, donde la presidenta da una orden y los dirigentes no la cumplen, pasará factura. El mayor daño es la falta de separación del gobierno con su partido: el mexicano siente que se gobierna solo para un grupo. La pérdida de votos en la clase media es inminente y el surgimiento de una nueva oposición de cara al 2027 busca nivelar el poder en el Congreso de la Unión.
La IA se vuelve cotidiana y transversal: el trabajo de IA en oficinas, juzgados, hospitales y aulas. En los servicios públicos, la atención ciudadana automatizada, la gestión de expedientes y la agilización de casos tienen como resultado mayor productividad y menos tareas repetitivas. El reentrenamiento será obligatorio; las compañías que no utilicen, desarrollen o adapten la IA a sus industrias estarán obsoletas a corto plazo y tendrán que cerrar.
Las tendencias clave en 2026 más elecciones, menos consensos, democracia vs. gobernabilidad como dilema central, migración, IA y seguridad dominan agendas públicas, la economía política del nearshoring redefine relaciones Norte–Sur. La sociedad civil y jóvenes en movilización intermitente, especialmente en contextos autoritarios.
Recuerdo que en el año 2000, cuando viví bajo el régimen de Hugo Chávez en Venezuela, empecé a escribir mi primer libro “Democracia vs. Totalitarismo” (2003), con la idea de advertir que venía un cambio de régimen en Venezuela: de una democracia a una autocracia marxista-leninista-fidelista al estilo cubano. Por supuesto, muy pocos creían que este fenómeno ocurriera porque no éramos como Cuba, el final de la historia ya lo conocemos: estamos bajo una dictadura de ultraizquierda que va más allá; está comprobado que es narcotraficante y terrorista.
El año 2026 huele a libertad, definitivamente la dictadura de Maduro caerá, volverán millones de venezolanos al país para reconstruirlo, mejorará la economía aunque con el reto de mantener a raya a los grupos extremistas que apoyan a Maduro. Creo que tendremos que hacer justicia, pero también perdonar y ceder espacios para que los violentos se conviertan a la vía democrática. Esto dará un duro golpe a la dictadura cubana y a la de Nicaragua. Debemos eliminar el culto al caudillo en Latinoamérica, que tanto daño le ha hecho a la institucionalidad de nuestros países. Tenemos que poner por encima de la figura presidencial a la ley y a las instituciones, que tan fácil son destruidas por estos personajes cuando llegan a tener el poder. Esto se logrará solo con educación.
¡Felices fiestas a los hermanos de todas las religiones y un próspero año 2026 para todos!























