Grave CRISIS de Agua en CDMX, pone en riesgo las Comunidades Vecinas al menguar su RESERVA

La falta de lluvias sigue reduciendo el almacenamiento del sistema hídrico Cutzamala, el cual se ubica en apenas 42.8%, de acuerdo con el último reporte de Comisión Nacional del Agua (Conagua).

NOTIMEX/FOTO/FRANCISCO ESTRADA/FEM/WEA

El nivel de caudal del sistema de Cutzamala que provee a parte de la capital continúa disminuyendo y esta semana el agua solo llenaba el 42,9% de la capacidad del conjunto de presas, 23 puntos menos que en el mismo mes del año pasado.

  • Ante la emergencia, la jefa de Gobierno de la ciudad, Claudia Sheinbaum, planea construir una nueva planta potabilizadora para suministrar a la capital desde otras fuentes de agua cercanas, como la presa Madín o la presa Guadalupe.
  • José Antonio Benjamín Ordóñez, investigador del Instituto Tecnológico de Monterrey, advierte de que esta estrategia no soluciona el problema a largo plazo y que contagiará a estas otras presas de la misma crisis de abastecimiento que sufre el Valle de México actualmente. Además, advierte de que, de continuar la crisis sin medidas de reforestación o gestión del uso del agua, el sistema Cutzamala podría colapsar en menos de un año y medio.

Ante el retraso de las lluvias y la falta de precipitaciones acumuladas que han agravado la sequía, la estrategia del Gobierno de la Ciudad de México se centra en una nueva planta potabilizadora y en abastecerse de presas cercanas que le dan servicio a otras comunidades.

“Se encuentran en estudio en este momento traer más agua de Presa Guadalupe, Valle de Xico y Nuevo Lerma, y estamos estudiando uno más”, aseguró Sheinbaum a finales de marzo. Sin embargo, Ordóñez advierte que pese a ser un “plan práctico” para el corto plazo, no soluciona el problema crónico de abastecimiento de la megápolis.

El agua que hay actualmente en las presas que conforman el sistema del que se alimenta la ciudad —El Bosque, Valle de Bravo y Villa Victoria— ha logrado acumularse tras 40 años de lluvias, pero el consumo que se hace de ella hace insostenible mantener el nivel. “Si sacas más agua de la que el sistema puede dar puede provocar una sobresedimentación y esto provocará falta de oxígeno y eutrofización”, señala.

En consecuencia, el agua se contamina y se llena de algas. El proceso para tratarla y hacerla apta para el consumo se encarece y aumenta el riesgo de sobreexplotar estas presas y trasladar la crisis del agua a las poblaciones cercanas, como Naucalpan y Atizapán.

Actualmente, el agua de las presas alternativas como Madín o Guadalupe tiene unos niveles muy altos de contaminación. En su composición hay metales pesados como el mercurio, hierro y aluminio, pero también residuos de diclofenaco, ibuprofeno y naproxeno, según Ordóñez.

  • El investigador explica que el agua de lluvia de la capital no es potable debido a los altos niveles de sustancias y partículas que atrapa. Para hacerla apta para el consumo, necesita tratamiento en plantas potabilizadoras y esto no soluciona el problema principal: el uso del recurso y su gestión.
  • Recurrir a otras presas situadas cerca de grandes urbes para satisfacer a la capital solo “agranda el problema”. “Nuestro consumo es muy alto. Se agotarían las otras presas y dejaríamos sin agua al resto de la zona”, sentencia.
  • Para abastecer a una población creciente y concentrada de casi 22 de millones de habitantes en la zona metropolitana del Valle de México, Ordóñez apunta a la necesidad de reciclar el agua del drenaje en vez de desperdiciarla.

En paralelo, es necesario tecnificar los riegos agrícolas para aprovechar mejor el recurso, así como reforestar los bosques para facilitar la retención e infiltración del agua en el subsuelo.

También señala la necesidad de crear esquemas de uso para la población. Esto se consigue creando consciencia del agua que se gasta en la rutina cotidiana del hogar, midiendo en recipientes cuánta agua se necesita para lavarse las manos o bañarse. “Si somos consientes del volumen de agua que gastamos podemos aprender a respetarlo”, asegura.

  • Actualmente, la Ciudad de México tiene una demanda de 480.000 millones de litros de agua anuales. El investigador estima que con un 42,9% de su capacidad, el sistema podría colapsar en menos de dos años si sigue lloviendo cada vez más tarde y menos, como indican las predicciones para este año. “Si no actuamos, se va a acabar el agua”, sentencia.

Sistema Cutzamala cumple 39 años con los niveles más bajos

El Sistema Cutzamala cumple 39 años de operación con los niveles de agua más bajos registrados en los últimos 25 años. La Comisión Nacional del Agua (Conagua) asegura que el Cutzamala se consolida como una de las cinco obras civiles más importantes del mundo en su tipo y como una infraestructura vital para la zona metropolitana del Valle de México, ya que permite abastecer de agua potable a más de cinco millones de habitantes del Valle de México.

Aunque, debido a la temporada de sequía, el almacenamiento de las tres principales presas del Sistema Cutzamala, continúa descendiendo, al mantener 335 millones de metros cúbicos, esto es 42.8 por ciento de su capacidad de almacenamiento, lo que representa 23.1 por ciento por debajo del promedio histórico a la fecha, que es de 516 millones de metros cúbicos.

  • Este sistema está integrado por un conjunto de instalaciones hidráulicas de captación, almacenamiento, conducción, potabilización y entrega de agua, las cuales se extienden por Michoacán, Estado de México y Ciudad de México. Su operación permite llevar agua de las presas hasta uno de los puntos más altos del Valle de México y de ahí entregarla a los organismos operadores de la Ciudad de México y Estado de México, los cuales la hacen llegar a parte de su población por redes secundarias.
  • Está conformada por 10 presas, de las cuales Tuxpan, Ixtapan del Oro, Chilesdo, Colorines, Tilostoc, El Durazno y Barrage son derivadoras; mientras que El Bosque, Valle de Bravo y Villa Victoria son de almacenamiento.

Además, cuenta con seis plantas de bombeo que, en conjunto, emplean mil 384 millones de kilowatts-hora durante un año, el equivalente a la energía que consume la ciudad de Puebla en el mismo tiempo. Estas bombas llevan el agua en forma escalonada a su punto más alto, ubicado a 2 mil 702 metros sobre el nivel del mar, lo que equivale a 12 veces la altura de la Torre Mayor de la Ciudad de México. Sus redes de distribución principales tienen una longitud de más de 322 km, equivalentes a la distancia entre Acapulco y la Ciudad de México.

  • El punto central de operaciones se encuentra en la planta potabilizadora Los Berros, la cual tiene capacidad para potabilizar 20 metros cúbicos de agua cada segundo, es decir, 20 tinacos de mil litros por segundo. “Captar el agua, potabilizarla y transportarla hasta el Valle de México es un proceso complejo que requiere de una gran infraestructura y del esfuerzo del personal que la opera las 24 horas del día, los 365 días del año”, destaca la Conagua.

Al tiempo que destaca que su rehabilitación y mantenimiento permanente ha sido indispensable para garantizar la seguridad hídrica de la población, ya que la complejidad para traer el agua a las ciudades es cada día mayor. Por ello, es cada día más grande la necesidad de llevar a cabo acciones para el cuidado del agua que se utiliza diariamente en los hogares, oficinas, escuelas o empresas.

Cutzamala con niveles de almacenamiento para abastecer solo un año

La falta de lluvias sigue reduciendo el almacenamiento del sistema hídrico Cutzamala, el cual se ubica en apenas 42.8%, de acuerdo con el último reporte de Comisión Nacional del Agua (Conagua).

  • Tal es la preocupación de las autoridades que, con dicha cantidad, este sistema de presas sólo podrá abastecer de agua al Valle de México máximo durante un año y colapsar en año y medio.
  • Así lo advirtió este miércoles José Antonio Benjamín Ordóñez Díaz, profesor e investigador de la Escuela de Ingeniería y Ciencias del Tecnológico de Monterrey, durante una conferencia de prensa virtual.

“El Sistema Cutzamala puede colapsar en año y medio más o menos, por la sobresaturación de sedimentos del aporte de los cuerpos de agua, es decir, o trabajamos ya en serio para hacer las cosas bien o lo vamos a lamentar”
El experto señaló que el déficit del volumen de agua de las presas acarrearía otro problema: la formación excesiva de algas y otro tipo de vegetación que afectarían la calidad del agua, y esto a su vez impediría que la maquinaria del sistema funcione adecuadamente.

“Hay una restricción muy fuerte que está asociada a la disponibilidad del agua y mucha de la maquinaria no va a poder trabajar, si no tienen el volumen para el cual fue diseñada. Si baja el volumen, la concentración de sales y otros materiales van a generar un crecimiento atípico de algas y de otra vegetación acuática que no va a beneficiar (a las presas)”

  • Detalló que el sistema Cutzamala, con 39 años de operación, enviaría muy poca agua a las 11 alcaldías de la Ciudad de México y 13 municipios del Estado de México, donde habitan más de seis millones de personas.
  • Ante este oscuro panorama, remarcó que las autoridades deben trabajar en la reforestación de todas las montañas, bosques y tecnificar las áreas agrícolas que tienen un efecto directo en la recarga del acuífero del Sistema Cutzamala.

“Lo más importante ahorita es reciclar completamente toda el agua que sale del drenaje, una vez que la reciclemos, la purifiquemos y la reinsertemos en el sistema entonces posiblemente tengamos como dos o tres años de margen. Este año se predice que va a llover menos, si no actuamos todos, se va a acabar el agua”

Sobre el tema, la Jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum Pardo, ha declarado que actualmente se vive una situación de “casi emergencia” por la sequía, la más intensa de los 30 años recientes. La mandataria hizo un llamado a que es fundamental cuidar el agua, y agregó que la sequía también es la principal causa del incremento de los incendios forestales en la región.

  • Respecto a las lluvias, el Servicio Meteorológico Nacional, (SMN) reportó que del 1 de enero al 25 de abril del presente año, se ha registrado 32.6% menos lluvia que la habitual para este periodo. Lo anterior representa que del 1 de octubre de 2020 al 25 de abril, el déficit de lluvia fue de 17%, respecto a los datos históricos para ese lapso.

Por otro lado, el SMN dio a conocer que se reportaron temperaturas máximas arriba de 35 grados en regiones de Guerrero, Jalisco, Michoacán, Nayarit, Oaxaca y Sinaloa, así como en la Península de Yucatán. Sin embargo, en los municipios de Eduardo Neri, Guerrero, y La Huacana, Michoacán, se llegó a 45.3 y 44.5 grados, lo que representa la temperatura máxima histórica para un 25 y 23 de abril, respectivamente./Agencias-PUNTOporPUNTO

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