En México, siete de cada 10 estudiantes padecen acoso escolar, también conocido como bullying, lo que representa pérdidas debido a gastos en salud por casi siete mil millones de pesos anuales.
- Este es un impacto económico directo en jóvenes mexicanos de entre 14 y 25 años; y es que en el 8.4% de los casos, el bullying deja secuelas como ansiedad, depresión, trastornos alimentarios, aislamiento social y riesgo de suicidio.
- De acuerdo con Óscar David Hernández, presidente del Consejo de Protocolo Antibullying, estos trastornos mentales los padecen cerca de 24 millones de personas en México, y “se agravan en un porcentaje interesante de casi 20%, por ser víctimas de bullying o ciberbullying. Esto representa casi siete mil millones de pesos adicionales al presupuesto o al gasto que se ejerce en nuestro país en temas de salud”.
Dichas cifras se encuentran en el estudio “El Costo Económico del Bullying en Niños y Adolescentes”, presentado por Hernández.
Por ello, hizo un llamado a las autoridades del Gobierno de México a sumarse a la actualización de la norma internacional para combatir el bullying en México.
Mayor protección
Explicó que las circunstancias de la violencia no son las mismas que hace 10 años, porque ahora existe un auge en las redes sociales, que han contribuido a incrementar las consecuencias de la violencia, física, verbal o psicológica.
- Al respecto, Mexicanos Primero advirtió que a pesar de las buenas intenciones y que sí existen protocolos de actuación, falta un verdadero trabajo para concientizar a las infancias sobre este problema y refirió que un número alto de deserción escolar se debe al acoso.
- Laura Ramírez, directora de Fortalecimiento de Comunidades Educativas en Mexicanos Primero, destacó que uno de los problemas más graves del acoso es la deserción escolar, y señaló que si bien no existe una cifra definitiva, los mismos estudiantes han reportado que una de las consecuencias del bullying es el abandono de las aulas.
Búsqueda de conciencia
Refirió que, si bien existen protocolos y lineamientos para abordar el acoso escolar por parte de las autoridades educativas, estos materiales falta que los alumnos concienticen el daño que pueden causar con el acoso.
“Falta todavía que el proceso educativo llegue a que las niñas y los niños valoren a sus compañeros, lo respeten en sus gustos, en su forma de ser”, dijo que el trabajo que hacen los gobiernos, los docentes y los padres de familia todavía son insuficientes.
- Consideró que las condiciones de violencia y de inseguridad que se viven en el país, también ha influido en la violencia en las escuelas; “la intención de las autoridades es muy buena, al decir que no van a tolerar este problema, tienen que intervenir, tienen que tomar acción para que ninguna niña o ningún niño sea violentado en los entornos escolares”.
Señaló que lo deseable es que haya “mucha más concientización sobre el tema y que ya se ponga foco en este problema, porque ha ido aumentando, no solamente en México, en toda América Latina. Y obviamente en México tiene también pues está rodeado de un problema social mucho más grande, no es solamente un tema escolar”, advirtió.
Aplicación de políticas antibullying avanza a paso lento
Mientras las estrategias en materia educativa implementadas por el Gobierno de México para impulsar una vida saludable y prevenir el consumo de drogas en entornos escolares avanzan, los protocolos para atender el acoso escolar, también conocido como bullying, parecen ir por caminos sin cauce.
- La Secretaría de Educación Pública (SEP), en palabras de su titular, Mario Delgado Carrillo, trabaja en la implementación de lineamientos al interior de las escuelas de educación básica para frenar y atender este problema; no obstante, las agresiones persisten y las denuncias por violencia alcanzan a las autoridades educativas.
- Así lo reflejan casos como el de la Academia Militarizada Ollin Cuauhtémoc, de la Ciudad de México, cuyo director, Juan Carlos “N”, y la instructora Angélica “N” se encuentran vinculados a proceso por el delito de homicidio calificado en contra de Erick Leonardo Torbellín, de 13 años de edad. El deceso se debió presuntamente a maltratos cometidos por el personal imputado durante un campamento organizado por la institución.
Aunque la presidenta Claudia Sheinbaum aseguró en la “mañanera del pueblo” del 28 de abril que a partir de estos hechos podría comenzar la regularización federal de colegios que operan bajo modelos de enseñanza militar; a más de un mes de la declaración, el Poder Ejecutivo federal no ha anunciado el desarrollo o ejecución de alguna disposición al respecto.
El 17 de febrero pasado, en el marco de la investigación por las agresiones a Fátima Zavala, también de 13 años y quien fue agredida al interior de la secundaria Diurna número 236 en la capital del país, Delgado Carrillo dijo a Reporte Indigo, al salir de Palacio Nacional, que la menor fue diagnosticada con depresión como resultado del acoso del que era víctima y se confirmó que, previo al ataque que derivó en su hospitalización, la estudiante alertó a los directivos de la escuela la situación que enfrentaba, sin embargo, el hostigamiento continuó.
“A los maestros los estamos preparando, justo esta guía y el Consejo Técnico habla de darles herramientas a los maestros para tratar este tipo de problemáticas y aquí en la ciudad hay un protocolo de qué hacer en estos casos y cómo canalizarlos a distintos hospitales para la atención cuando se requiere”, mencionó el funcionario al mostrar un cuadernillo con información dirigida al profesorado.
Violencia en las aulas, una realidad lastimosa
El informe “Acoso de niñas, niños y adolescentes en México”, publicado por la Red por los Derechos de la Infancia en México (Redim) en junio de 2024, indica que para el año 2023 alrededor de 10 mil 424 personas de entre uno y 17 años fueron atendidas por violencia psicológica en instituciones de salud pública, según los registros de lesiones de la Secretaría de Salud.
- También señala, con base en los datos de la Encuesta Nacional sobre Discriminación 2022 del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), que de las 11.7 millones de personas de 12 a 17 años que asistían a la escuela en México durante ese año, 28 por ciento comunicaron haber sido víctimas de acoso escolar en los últimos 12 meses; ese porcentaje apunta a que 3.3 millones de estudiantes adolescentes a nivel nacional fueron víctimas de esa forma de violencia.
En el mismo documento, la Redim alerta que las autoridades educativas y de salud no cuentan con un censo público enfocado en conocer cuántas denuncias por acoso existen en el país y cuáles son sus características, aunque las denuncias persisten.
Sufre humillaciones y agresiones físicas
Un ejemplo de esto es lo sucedido a Isabella Renée Cisneros Acosta, una menor de 12 años que tuvo que ausentarse del Colegio Teresiano Enrique de Ossó en Guadalajara debido al bullying que sufrió durante más de dos años por parte de cinco compañeros, sin que los directivos intervinieran. Las agresiones incluyeron insultos, humillaciones y agresiones físicas, lo que ocasionó daños a su salud emocional y mental que resultó en un diagnóstico de depresión grave, entre otras consecuencias.
- Carolina Acosta Sánchez, mamá de Isabella, comparte a Reporte Indigo las dificultades que ha enfrentado para que el colegio garantice a la alumna de sexto año de primaria poder concluir sus estudios sin ser asediada; se repare el daño; y se tomen acciones para sancionar a los agresores, pues se tiene conocimiento de al menos otros tres niños violentados.
- En el recorrido que inició en marzo de 2025 para obtener justicia, Acosta Sánchez ha padecido revictimización por parte de las autoridades judiciales, nulo seguimiento de la SEP al caso, a pesar de denunciarlo a través de la plataforma Educatel, y cerrazón de los directivos escolares para atender sus demandas.
“Necesito el reconocimiento de lo que sucedió en su escuela. En su escuela sucedió maltrato escolar para Isabella, físico, psicológico, emocional, de todo tipo y necesito una disculpa por escrito (…) Como les dije, yo no necesito ningún tipo de compensación, a mí no me interesa que me ahorren colegiaturas, no me interesa que me regresen ni un peso, no quiero nada de ellos.
“Todo lo que le dedico, el esfuerzo, la salud le ha costado a mi hija, la salud mental, y eso no lo recupero con nada. Lo que sí quiero es que la gente sepa que no tiene que meter ahí a sus chiquitos, porque ningún niño va a la escuela a ser maltratado, ningún niño va a la escuela a que lo hagan sufrir, a que lo torturen; los niños van a ser felices, a estudiar”, expresa.
Respecto a las medidas de prevención de acoso escolar interinstitucional referidas por el secretario de Educación, la denunciante detalla que fue hasta que acudió al plantel para solicitar información y respuestas del colegio sobre el daño causado a Isabella que un profesor le mostró una libreta como prueba de los protocolos que se ejecutan, pero desconoce la manera en la que estos se aplican.
Pero ¿dónde están activados estos protocolos? En una libreta no sirven de nada, de nada absolutamente (…) La culpa, fuertemente lo digo, la tienen las instituciones porque no saben ni cómo reconocer a niños con bullying”, enfatiza.
Lineamientos oficiales no tienen plan de continuidad
En 2023, cuando la Secretaría de Educación Pública era encabezada por la actual coordinadora General de Asuntos Intergubernamentales y Participación Social de Presidencia, Leticia Ramírez Amaya, se publicaron en el Diario Oficial de la Federación los “Lineamientos para el protocolo de erradicación del acoso escolar en educación básica”, esto considera los grados académicos de preescolar, primaria y secundaria.
- El artículo 1 del marco normativo precisa que su emisión responde al objetivo de establecer acciones para la prevención, atención (detección, notificación, intervención y seguimiento) y medidas de no repetición que permitan la erradicación del acoso escolar en los planteles educativos.
En tanto, define a ese tipo de violencia como “toda conducta intencional, direccionada, frecuente y en desigualdad de poder (ya sea física, de edad, social, económica, entre otras) que se ejerce entre las o los educandos en el entorno escolar, generalmente en privado y lejos de los ojos de los adultos, con objeto de someter, explotar y causar daño”, y se distingue por tres características: intención, repetición y duración. Distingue como tipos de acoso escolar el socioemocional, el verbal y el ciberacoso.
Con la finalidad de conocer cuál es el plan del nuevo sexenio para atender y prevenir el bullying a partir del protocolo existente y la estrategia Escuela Libre de Violencia, así como el seguimiento a la implementación de estas medidas, Reporte Indigo solicitó una entrevista vía telefónica y por correo electrónico con José Emilio Mejía Mateos, director General de Gestión Escolar y Enfoque Territorial de la Secretaría de Educación Pública, pero no hubo respuesta.
Combate al acoso, sin presupuesto
El Proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación para el Ejercicio Fiscal 2025 indicó que los recursos destinados para la atención de niñas, niños y adolescentes en este año fue de 248 mil 171 millones 76 mil 850 pesos.
- Esa cifra está repartida, entre otros rubros, para el apoyo a centros y organizaciones de educación, atención de planteles públicos de educación media superior con estudiantes con discapacidad, educación física por excelencia, producción y distribución de libros y materiales culturales, producción y transmisión de materiales educativos, programa para el desarrollo profesional docente, beca universal de educación básica Rita Cetina y beca universal de educación media superior Benito Juárez.
La estrategia medular para impulsar el bienestar de las niñas, niños y jóvenes de la administración actual es el programa Vida Saludable, mediante el cual se realizan jornadas de salud escolar en colaboración con la Secretaría de Salud y el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) para desarrollar actividades enfocadas en la prevención de obesidad y sobrepeso, revisar la salud visual y bucal de los estudiantes y promover estilos de vida saludable.
A esto se suma la continuidad y fortalecimiento de la campaña contra el consumo de drogas, especialmente del fentanilo, activaciones físicas y la elaboración de un registro nacional de las condiciones de salud de los menores de edad. Aun así, a ocho meses de iniciado el mandato de Claudia Sheinbaum no se han dado a conocer los pasos a seguir para atender la salud mental de la niñez y adolescencia mexicanas.
Un factor de cambio
Gabriel Santamaría, director de GSM Consultores y Servicios Educativos con máster en Gestión Directiva Educacional por la Universidad Anáhuac, destaca en entrevista con Reporte Indigo la importancia de dar seguimiento a la aplicación de los protocolos que establece la autoridad federal para obtener mejores resultados en el combate al acoso escolar, así como entablar vínculos con las fiscalías encargadas de proteger a las infancias.
Como parte de las posibilidades, subraya la importancia de que puedan conformarse comités autónomos al interior de las escuelas para vigilar la aplicación de normativas y, en caso de detectar alguna situación de violencia o acción irregular, se denuncie a las instituciones correspondientes en representación de la comunidad escolar.
“Hay mucho trabajo por hacer. Hay acompañamiento que se debe todavía de generar. El secreto está en la capacitación, en el seguimiento, porque tú como institución puedes poner todos los protocolos y reglas que gustes y mandes, (pero) si en las escuelas los directores no los implementan de manera adecuada y después no se le da un buen seguimiento a los maestros, de nada sirve.
También subraya la necesidad de que exista un mapeo a nivel nacional que facilite a los tres niveles de Gobierno detectar los “focos rojos” de violencia en las escuelas públicas y privadas.
Por lo anterior, apunta a que resolver esta problemática de raíz va más allá de generar un reporte disciplinar al alumno agresor, aunque esto ayude a focalizar en dónde se requiere reforzar la atención, y es necesario atender lo que establece la normativa de la Secretaría de Educación Pública.
“Si a un director no le interesan estos temas, frecuentemente va a estar teniendo problemas, va a tener dificultades tan lamentables donde se le sale por completo de control, y se le sale de control porque no empezaron a poner límite en las cosas menores. Cuando tú no cuidas los límites en lo pequeño ¿Cuándo vas a lograr poner límites en lo trascendente, en lo más grave?”, cuestiona.
- La Organización Mundial de la Salud precisa en el documento “Prevención de la violencia en la escuela: manual práctico” que la violencia durante la infancia repercute en la educación, la salud y el bienestar de las víctimas a lo largo de toda su vida, y puede ocasionar un bajo rendimiento debido a problemas cognitivos, emocionales y sociales.
“Las escuelas tienen un papel importante en la protección de los niños. Los adultos que se encargan de la supervisión de los contextos educativos y trabajan en estos tienen la obligación de ofrecer entornos que apoyen y promuevan la dignidad, el desarrollo y la protección infantil.
“El personal docente y de otro tipo es responsable de proteger a los niños a su cargo. Este deber se describe en el artículo 19 de la Convención sobre los Derechos del Niño, ratificada por la mayoría de los países”, indica el documento difundido en 2022./Agencias-PUNTOporPUNTO





















