Del beneficio de la duda a la desconfianza

Sin duda alguna que 30 millones de votos son suficientes para darle legitimidad a cualquier gobernante en el mundo y de ese tamaño es la confianza ciudadana en el presidente Andrés Manuel López Obrador.

Pero en estos largos seis meses, entre el triunfo electoral y la toma de protesta, el gobierno saliente de Enrique Peña Nieto no ha querido o no ha podido, moderar los ímpetus del presidente López Obrador, por anunciar sus proyectos económicos, que ha producido temor entre los poseedores del dinero.

El primer mensaje se dio con el anuncio de la cancelación de las obras del nuevo aeropuerto de la ciudad de México, en el que pese al avance de no más de 30% en sus obras, la nueva administración decidió poner a consulta bajo una metodología ajena a la Constitución y la norma.

El segundo mensaje si dio cuando el senador Ricardo Monreal Ávila anunció la presentación de una iniciativa para suprimir el cobro de comisiones en los servicios de la banca privada mexicana, en lo que parecería que no hubo consenso con las autoridades hacendarias de la administración del presidente López Obrador.

Por último, el lunes de esta semana la Bolsa Mexicana de Valores cayó un 4.17%, lo que constituye la segunda mayor caída del año.

Los pronósticos no son favorables, cuando el periódico estadounidense The Wall Street Journal se refiere al presidente electo como que «está espantando a los inversionistas extranjeros» (Periódico Reforma, noviembre 26, 2018 en http://tinyurl.com/ycmm42m7 ).

El economista en jefe de BCP Securities, Walter Molano, afirma que «Ni siquiera ha asumido el cargo de presidente y está mostrando una verdadera racha autoritaria». Esto comienza a preocupar y apenas este sábado tomará protesta al cargo.

No solo esto. En el plano político, el mensaje que dio el senador Félix Salgado Macedonio es preocupante, cuando afirmó que la Cámara de Senadores podría proceder a la desaparición de poderes en los Estados, en caso de que desatiendan el mandato constitucional de los superdelegados.

También en el plano político no coincide que la nueva administración del presidente López Obrador haya consentido la designación de Salgado Macedonio y de Saúl López Sollano, al cargo de presidente y secretario técnico de la comisión de Defensa Nacional del Senado, y que por otra parte se manden mensajes de apoyo a las Fuerzas Armadas.

Aunque en el social no ha bajado la confianza en el presidente electo, es muy posible que en el corto plazo se comiencen a sentir los efectos de la desconfianza a sus primeros actos de gobierno y de su partido.

*Es Maestro en Seguridad Nacional por la Armada de México
Correo electrónico: [email protected]
Twitter: @racevesj

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