Agencias de EU participaron en recaptura de Ovidio GUZMÁN, uno de los herederos de “EL CHAPO”

Andrés Manuel López Obrador, presidente de México, negó la intervención de las agencias de los Estados Unidos en la recaptura del líder del Cártel de Sinaloa, Ovidio Guzmán López, este jueves en Culiacán.

imagen de internet

Autoridades mexicanas detuvieron este jueves a Ovidio Guzmán, el hijo de Joaquín ‘El Chapo’ Guzmán, durante un enorme operativo en la ciudad de Culiacán, en el noroeste de México. La acción desató en el estado de Sinaloa una ola de violencia con tiroteos, saqueos y quema de vehículos en la que murió un coronel y sus cuatro escoltas, además de que hubo 28 heridos.

  • Guzmán, de 32 años, fue capturado por el Ejército y la Guardia Nacional y trasladado en un avión de la Fuerza Aérea a una base militar cercana a la capital mexicana. Por la noche, fue llevado al penal del Altiplano, del que se fugó su padre en 2015.
  • El hijo de ‘El Chapo’ ha sido identificado como el líder de la facción de Los Menores del Cartel del Pacífico, considerado por la agencia antidrogas de Estados Unidos (DEA) como el principal responsable del tráfico de fentanilo, una droga 50 veces más potente que la heroína y que ha causado numerosas muertes por sobredosis en ese país.

Guzmán ya había sido detenido en otro polémico operativo conocido como ‘Culiacanazo’ el 17 de octubre de 2019, pero fue liberado por orden del presidente Andrés Manuel López Obrador en medio de una asonada de la organización criminal.

El mandatario izquierdista defendió entonces su decisión, alegando que se evitó «un baño de sangre», cuando contingentes militares quedaron rodeados por civiles con armas largas.

La de este jueves es la detención más importante de un capo mexicano desde que el pasado 15 de julio fuera aprehendido Rafael Caro Quintero (el «Narco de Narcos»), quien lideró el extinto cártel de Guadalajara y es reclamado por Estados Unidos.

Esto es lo que sabemos hasta ahora sobre la captura del narcotraficante.

La captura

Guzmán, también apodado ‘Ratón’, fue capturado a las 06:20 a. m. del jueves durante un operativo en Culiacán en el que participaron elementos del Ejército y la Guardia Nacional, confirmó Luis Cresencio Sandoval, secretario de la Defensa Nacional de México, en una rueda de prensa.

Un reporte del diario Milenio detalla que la detención del capo fue posible porque las fuerzas especiales superaban en número a los escoltas de Guzmán. Aparentemente, durante seis meses elementos de inteligencia estudiaron los movimientos del narcotraficante, así como su círculo de protección, para evitar que se repitiera una situación bochornosa como la del ‘Culiacanazo’.

Los escoltas de Guzmán, denominados ‘Los ninis’, son jóvenes entre 20 y 35 años, con perfiles de alta peligrosidad, especialistas en solucionar las diferencias a tiros, según el reporte periodístico. Cuentan con un arsenal de armas ligeras, ametralladoras, granadas y rifles de precisión.

  • Una vez detenido, funcionarios de la Fiscalía Especializada en Materia de Delincuencia Organizada tomaron sus declaraciones y de ahí lo trasladaron vía aérea a Ciudad de México.
  • La detención desató una ola de intensos tiroteos entre criminales y fuerzas de seguridad en varias localidades. También hubo quema de vehículos en varios puntos de la ciudad. Las autoridades refieren que hubo 19 bloqueos y varios ataques armados.

En las redes sociales circularon videos en los que se veían caravanas de hombres armados a bordo de camionetas y todoterrenos circulando por las avenidas. Al menos una incluía un camión abierto con un arma montada en la parte trasera, el mismo tipo de vehículo que causó caos y destrucción en los disturbios de 2019.

La violencia se extendió al aeropuerto internacional de Culiacán, donde un avión de pasajeros recibió un impacto de bala momentos antes de despegar, al igual que una aeronave de la Fuerza Aérea, informaron la empresa Aeroméxico y el gobierno.

Los pasajeros aparecen acurrucados para protegerse de las balas en videos publicados en redes sociales. Lo mismo tuvieron que hacer trabajadores aeroportuarios, resguardándose en los mostradores. Nadie resultó herido, pero el avión tuvo que regresar a la terminal.

Las operaciones en el aeropuerto fueron detenidas, provocando suspensiones de vuelos en varios destinos, en tanto se reportaron saqueos en algunos barrios de Culiacán.

A raíz de la escalada violenta, las autoridades suspendieron las clases en instituciones educativas, un partido de la liga profesional de fútbol y otro de béisbol.

El arresto se produjo tres días antes de la llegada a México del presidente estadounidense, Joe Biden, cuyo país ofrecía cinco millones de dólares por la captura de Ovidio Guzmán.

  • Medios mexicanos reportaron el fallecimiento de un coronel, identificado como Juan José Moreno Urzua, y sus cuatro escoltas, cuyas identidades no fueron inicialmente publicada.
  • Además, 28 heridos tuvieron que recibir atención en hospitales, informó el gobernador del estado de Sinaloa, Rubén Rocha. Entre los heridos por arma de fuego hay tres civiles.
  • Rocha aseguró que ya están «levantando los escombros» que quedaron tras 12 horas de bloqueos y enfrentamientos.

Ovidio Guzmán es considerado uno de los principales productores y distribuidores de fentanilo.

Fue acusado de narcotráfico por Estados Unidos en 2018. Según los gobiernos de México y EEUU, había asumido un papel cada vez más importante entre sus hermanos en la gestión de los negocios de su padre junto con el que fuera jefe de la organización durante mucho tiempo, Ismael ‘El Mayo’ Zambada.

Juan Carlos Ayala, profesor de la Universidad de Sinaloa que reside en Culiacán y estudia la sociología del narcotráfico, apuntó que Ovidio Guzmán era un objetivo obvio desde al menos 2019.

“A Ovidio se la tenían sentenciada. Además era ubicado como el mayor traficante de fentanilo y era el operador más visible de ‘Los Chapitos’», dijo Ayala, citado por la AP, haciendo referencia al nombre de la facción del cartel que dirigía junto a sus hermanos, Iván Archivaldo y Alfredo.

  • Imágenes difundidas por medios locales muestran a Guzmán, con barba y chaleco anaranjado, abordando un helicóptero de la Fuerza Aérea Mexicana que lo trasladó a la Ciudad de México para presentarlo ante la justicia.
  • Por la noche, en medio de un fuerte operativo, fue llevado al penal del Altiplano, el mismo de donde escapó su padre en 2015.
  • El canciller mexicano, Marcelo Ebrard, descartó una extradición ‘express’ y negó que la captura sea un gesto del gobierno para congraciarse con Biden, quien se reunirá el lunes con su homólogo Andrés Manuel López Obrador en Ciudad de México.

Guzmán «tiene un proceso abierto en México que es lo que da origen a la orden (de captura)», declaró Ebrad a la prensa.

«Entonces, yo supondría que lo que vamos a ver es un proceso en México conforme a la ley», agregó, aunque aclarando que el proceso de extradición seguirá su marcha.

EU y su participación en la captura de Ovidio

Al menos cuatro meses atrás, agentes al servicio de las agencias estadounidenses llevaron a cabo operaciones encubiertas en Sinaloa. La información que recabaron durante semanas les permitió identificar movimientos y métodos de seguridad precisos, con las que se manejaba Ovidio Guzmán López El Ratón. Así comenzó la operación para recapturar a uno de los herederos de Joaquín Guzmán El Chapo.

  • Ovidio Guzmán no es uno de los principales operadores del cártel, pero sí es clave en las negociaciones con funcionarios, con algunos grupos proveedores de insumos y para atemperar las relaciones internas, por su personalidad tranquila y prudente. Pero adicionalmente se convirtió en el símbolo que permitiría recuperar la confianza de Estados Unidos en el gobierno de Andrés Manuel López Obrador y en el Ejército mexicano que hace casi 39 meses lo liberó.
  • Además de la información compartida por los agentes estadounidenses, revelaron fuentes consultadas, otro movimiento fue decisivo para lograr la detención: el cambio del comandante de la Novena Zona Militar con sede en Culiacán, Héctor Ávila Alcocer, por el general Alfredo Salgado Vargas. Sobre el equipo del primero, existen sospechas de colusión con los grupos criminales.

Se trató de una operación quirúrgica que mostró un giro en la estrategia de seguridad del gabinete federal, justo en un momento en que las presiones de Estados Unidos sobre el gobierno mexicano sobre la estrategia de seguridad.

Sobre la operación y el apoyo de inteligencia que habrían prestado los agentes estadounidenses para ubicar y detener a quien ellos ubican como uno de los principales responsables del tráfico del fentanilo, que ha generado una ‘pandemia’ de muertes por sobredosis, el gobierno de Estados Unidos optó por mantener el sigilo y vigilar la evolución de los hechos ocurridos desde la madrugada de este jueves.

“No puedo comentar nada sobre le tema. He visto los reportes, pero dejo a las autoridades mexicanas que den los detalles”, señaló Ned Price, portavoz del Departamento de Estado de ese país al señalar que el gobierno de Joe Biden mantiene el seguimiento a los “reportes de tiroteos y bloques” en la ciudad de Culiacán, los cuales implicaron la alerta para sus connacionales a través de su embajada en México.

Esta captura, de acuerdo a la información recabada por este periódico, no cambia la estructura del cártel, el más poderoso del mundo, porque los hermanos Iván y Alfredo Guzmán integran el verdadero eje de las decisiones y operaciones del grupo criminal. Su medio hermano Ovidio simplemente se hizo más visible para las autoridades.

Sin embargo, lo que sí cambió desde este jueves 5 de enero, consideraron las fuentes, es la forma de relacionarse con el gobierno, para algunos ocurrió la ruptura.

El trabajo de inteligencia dio resultados, y la información entregada por Estados Unidos había sido efectiva: Guzmán López había sido capturado.

  • La versión oficial tuvo algunos matices. Fueron “seis meses de trabajos de reconocimiento y vigilancia en el área de influencia de este grupo criminal (liderada por Ovidio Guzmán), donde se tenía conocimiento que llevaba a cabo sus actividades ilícitas”, informó el general Luis Cresencio Sandoval, secretario de la Defensa Nacional, al confirmar el despliegue por tierra y aire que por primera vez encabezó la Guardia Nacional con apoyo de efectivos del Ejército.

Sin embargo, de la información recabada por ejecentral en Culiacán se identificó que hace tres meses comenzó a reforzarse la presencia de fuerzas federales, y con ellos identificaron a agentes antinarcóticos estadounidenses (DEA, por sus siglas en inglés), que cuenta con recursos especiales para luchar contra el fentanilo, un producto que controla el Cártel de Sinaloa.

A escasos tres días de que México sea anfitrión de la Cumbre de Líderes de América del Norte en la que el presidente Andrés Manuel López Obrador recibirá a los mandatarios de Estados Unidos y Canadá, la recaptura de uno los capos emblema dentro de los objetivos conjuntos de la estrategia binacional del Entendimiento Bicentenario toma una relevancia particular para el gobierno estadounidense.

Justo fue 2022 cuando se emitieron la mayor cantidad de informes, más de 10, sobre la peligrosidad de los cárteles mexicanos, específicamente Sinaloa y Jalisco Nueva Generación. Y también se publicó la Estrategia Nacional de Control de Drogas de la administración Biden, que en sus objetivos internacionales de reducción de la oferta incluyeron priorizar el compromiso bilateral con fuentes y tránsito de drogas clave de países, como México, y de manera directa desarticular los tráficos ilícitos y las estructuras financieras de los cárteles mexicanos considerados como organizaciones criminales trasnacionales, señalando primordialmente a ambos grupos criminales mexicanos

  • Desde julio pasado, el Congreso de Estados Unidos elevó, aún más, la presión hacia el gobierno del presidente Joe Biden para que exigiera a México mejores resultados en el combate a las bandas del crimen organizado, el control de las drogas (principalmente el
    fentanilo) y el mejoramiento del clima de inversión.
  • El pasado 13 de julio, en el contexto de las campañas rumbo a las elecciones intermedias de noviembre, la Cámara Alta de aquel país emitió una inusitada resolución condenando la política de seguridad del presidente Andrés Manuel López Obrador.

“El Senado está profundamente preocupado por la creciente sofisticación y el control territorial de las organizaciones criminales transnacionales en México, y reafirma la necesidad urgente de priorizar un plan detallado y dotado de recursos para reducir la producción y el tráfico de narcóticos ilícitos en México, incluido el tráfico ilícito de precursores químicos importados de la República Popular China para la fabricación de opioides sintéticos, como el fentanilo”, señala la resolución

Días antes, el 7 de junio de 2022, el Congressional Research Service emitió el documento “México: crimen organizado y bandas traficantes de drogas”, que ofrece duras críticas a la estrategia de “abrazos, no balazos”.

López Obrador “dijo que no emprendería una guerra contra las organizaciones criminales,
pero que apuntaría a las condiciones sociales que permiten que los grupos criminales prosperen, una estrategia que resumió como ‘abrazos, no balazos’. Luego de más de tres años en el cargo, López Obrador ha evitado acciones policiales a gran escala contra los cárteles y la cooperación legal entre Estados Unidos y México está en su mínima expresión”, subraya el texto.

  • Para las oficinas de seguridad y el Congreso de Estados Unidos, el Cártel de Sinaloa ha sido un objetivo prioritario, cuando menos desde comienzos de este siglo. Tanto los hijos de El Chapo (Jesús Alfredo y Ovidio) como Ismael El Mayo Zambada figuran en la lista de los fugitivos más buscados por la Agencia Antidrogas (DEA).
  • De hecho, el año pasado el Congressional Research Service produjo una decena de documentos de análisis, que sirven a los congresistas estadounidenses para guiar sus posiciones y hasta sus votos, sobre el crimen organizado en México y los riesgos de seguridad para su país, y que cuestionaban la estrategia de seguridad de López Obrador.

En 2020, la DEA estimó que el Cártel de Sinaloa mostró tener la mayor capacidad de fabricación de fentanilo en laboratorios clandestinos, y en lo que va del siglo es una de las principales organizaciones responsables del comercio de drogas en Estados Unidos.

Analistas del Congreso estadounidense, que tienen acceso a información pública y de las agencias de seguridad de ese país, “desde el encarcelamiento más reciente de El Chapo, el Cártel de Sinaloa se ha dividido en cuatro facciones clave.

  • Una de ellas está actualmente dirigida por Ismael Zambada García “El Mayo; otra por el hermano de “El Chapo”, Aurelio “El Guano” Guzmán Loera; una tercera por células afines a Rafael Caro Quintero, cofundador del extinto Cártel de Guadalajara; y una cuarta fracción a cargo de los cuatro hijos Joaquín Guzmán, conocidos colectivamente como Los Chapitos o Los Menores, como se refirió a ellos el titular de la Sedena.

El informe elaborado por el Servicio de Investigación del Congreso estadounidense añade: “El Cártel de Sinaloa pareció enfrentar muchos desafíos en 2020 y 2021. Los rivales de Sinaloa dentro y fuera del grupo vieron un formidable imperio de drogas construido sobre las ganancias del tráfico de cocaína sudamericana y el contrabando de metanfetamina, mariguana, fentanilo y heroína a los Estados Unidos, y podría decirse que buscaron reemplazar al sindicato criminal que alguna vez fue hegemónico”.

Para el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos (ICE, por sus siglas en inglés), Ovidio junto con su hermano Joaquín Guzmán López, y el tío de ambos, Aureliano Guzmán Loera figuran dentro de la lista de los criminales más buscados al ser identificados como los herederos del cártel que están a cargo de la producción de decenas de laboratorios para producir metanfetamina fentanilo, cuya producción se estima entre las 3 mil y 5 mil libras al mes.

  • Tanto Joaquín como Ovidio fueron acusados formalmente por un gran jurado federal en
    el Distrito de Columbia desde abril de 2018, cuando las autoridades de ese país los señalaron de los delitos de conspiración para distribuir cocaína, metanfetamina y mariguana; además de los señalamientos que los responsabilizan de diversos asesinatos y hechos violentos.
  • En el caso particular de Sinaloa, las áreas de inteligencia de la Sedena ubican el liderazgo principal de Iván Archivaldo Guzmán Salazar, medio hermano de Joaquín y Ovidio, quien tras la captura de su padre es ubicado en el mismo nivel jerárquico dentro de la estructura del cártel en el que el Ejército ubica a “El Mayo” Zambada y a Rafael Caro Quintero, detenido en un operativo de la Marina el 15 de julio del año pasado.

“Yo ordené que se detuviera ese operativo y que se dejara en libertad a este presunto delincuente (Ovidio Guzmán), habló al día siguiente o a los dos días el presidente Trump para ofrecer apoyo”, reveló el presidente López Obrador, en su conferencia del 19 de junio del 2020, exactamente 246 días después del llamado “Culiacanazo”, al referir que la decisión la tomó para no poner en riesgo a la población, pues dijo, “iban a perder la vida
si no suspendíamos el operativo más de 200 personas inocentes en Culiacán, Sinaloa”.

No obstante, antes, el 18 de octubre de 2019, al día siguiente de los hechos violentos, cuando el propio presidente daba otra versión y aseguró que la decisión de liberar al capo había sido una decisión que “tomó el Gabinete de Seguridad de manera conjunta, colegiada, los secretarios, repito, de la Defensa, de Marina, de Seguridad Pública. Yo respaldé esa postura porque considero que lo más importante es la protección de las personas, lo más importante es que no haya muertos, lo más importante es la paz”, subrayó

  • A diferencia de hace tres años en los que los hechos violentos detonados en la capital de Sinaloa dejaron un saldo oficial de al menos ocho personas muertas, incluyendo un elemento de la Guardia Nacional, así como unas 19 más que resultaron heridas, según informó la Sedena; en esta ocasión la ejecución del operativo se llevó a cabo, según confirmaron fuentes consultadas con las condiciones y el despliegue de personal y recursos materiales suficientes para garantizar un efectivo control de daños a lo largo del operativo, que hasta el cierre de esta edición había dejado un saldo de al menos 18 elementos de seguridad heridos, así como un guardia nacional fallecido, y otros nueve civiles heridos.

“Esta detención representa un golpe contundente a la cúpula del poder del Cártel del Pacífico, acciones que refrendan el compromiso leal e institucional por parte del Ejército Mexicano, Guardia Nacional, CNI, CENFI, Fiscalía General de la República y Secretaría de Seguridad Pública del estado”, sostuvo el general secretario Luis Cresencio Sandoval alrededor de ocho horas después de que se había consumado la captura del capo.

Aunque la beligerante respuesta de las células al servicio de Ovidio Guzmán incluyó, como en 2019, el despliegue de sus bases no sólo en Culiacán sino prácticamente en todo el estado, con bloqueos e incendios en accesos carreteros de la capital del estado, así como en otras ciudades como Los Mochis y Guasave; se alertó sobre el llamado que habría hecho el cártel a fin de reforzar su despliegue con grupos y células afines en las entidades colindantes al estado como son Sonora y Chihuahua, así como la región al este de Durango y Nayarit.

El riesgo no ha desaparecido, al final fue detenido uno de los miembros del clan Guzmán, así que todos los cuerpos de seguridad en la zona de influencia del Cártel de Sinaloa permanecerán en alerta ante otras posibles reacciones violentas y ataques a cuerpos de seguridad.

Niega AMLO intervención de agencias de EE.U.

Andrés Manuel López Obrador, presidente de México, negó la intervención de las agencias de los Estados Unidos en la recaptura del líder del Cártel de Sinaloa, Ovidio Guzmán López, este jueves en Culiacán.

  • No, no, no. Ya les explique que está es una decisión que se toma (en el Gabiente de Seguridad), y les diría que es de rutina”, declaró.
  • En la conferencia matutina de Palacio Nacional, López Obrador descartó que la detención de Guzmán López sea una entrega al Gobierno de Joe Biden, y dejó en claro que su Gobierno actúa con pena autonomía.

“Sobre las interpretaciones hay muchas, las respetamos pero no las compartimos, porque nosotros actuamos con autonomía”, argumentó.

  • Actuamos con autonomía e independencia, sí va a haber cooperación, pero las decisiones las tomamos como Gobierno soberano, independiente y estas decisiones las tomamos en el Gabinete de Seguridad”, agregó.

“Por eso pueden inventar lo que quieran, pero estamos actuando con rectitud, con integridad y lo vamos a seguir haciendo”, puntualizó.

El mandatario mexicano explicó que hay instrucciones a las Fuerzas Armadas “que no se tienen que estar repitiendo”, en el sentido de que no hay impunidad y tampoco asociación el crimen organizado.

“Ya sabe la Sedena, la Marina, la Guardia Nacional, que no se permite la impunidad, que no hay asociación delictuosa que se permita entre autoridades y la delincuencia, que está bien pintada la raya, que no es como antes de que no se sabía dónde terminaba la delincuencia y en dónde la autoridad porque no había línea divisoria, al grado que los encargados de la seguridad pública estaban prácticamente al servicio de la delincuencia”, explicó.

Guzmán López, junto a su hermano Joaquín Guzmán López, es acusado en Estados Unidos por cargos de asociación delictiva relacionados con drogas ilícitas.

De acuerdo con las autoridades estadounidenses, los hermanos se asociaron para distribuir cocaína, metanfetaminas y marihuana en Estados Unidos entre 2008 y 2018.

Suspende extradición de Ovidio Guzmán

Abogados de Ovidio Guzmán López “El Ratón”, uno de los líderes de la célula de Los Menores, del Cártel de Sinaloa, presentaron dos demandas de amparo en su nombre para evitar su extradición sin el debido procedimiento y en contra de actos de tortura.

  • Los dos escritos fueron radicados en un mismo juzgado de distrito de amparo en materia
    penal de la Ciudad de México, y en ambos casos, el juez concedió la suspensión de plano de los actos reclamados.
  • En la primera demanda de garantías, que señala como autoridad responsable al Secretario de Gobernación, entre otras, se reclama una posible “incomunicación, deportación, expulsión, extradición y su ejecución”.

El juez decretó la suspensión de oficio respecto de la incomunicación, así como cualquiera de los prohibidos por el artículo 22 constitucional, para el único efecto que de manera inmediata cese la ejecución de tales actos.

  • También concedió de plano la suspensión de oficio respecto de los actos consistentes en la extradición, para el efecto de que no se ejecute y “el quejoso quede en el lugar en el que se encuentre a disposición de este juzgado, solo con relación a su libertad personal y no sea entregado al Gobierno de los Estados Unidos de América, ni a ningún Estado diverso”.

En la segunda demanda de amparo interpuesta contra el Presidente de la Republica y otras autoridades, la defensa de Ovidio Guzmán expone como acto reclamado la tortura fisica o psicológica.

El mismo juzgador decretó la suspensión de oficio para que de manera inmediata cese la ejecución de tales actos “y bajo las disposiciones legales e institucionales se le permita al directo quejoso comunicarse con familiares o entrevistarse con los defensores que como tales designe”/Agencias-PUNTOporPUNTO

 

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