México SIN PREPARACIÓN para enfrentar CATÁSTROFES; SISMOS dejan (+)16 MLLNS de Víctimas

De acuerdo con geólogos de la UNAM, tras el sismo que se registró el lunes, una de las recomendaciones a la población es que se tenga conciencia de que vivimos en una zona sísmica.

Sismo del 19 de septiembre de 2017

México no está preparado para enfrentar un escenario catastrófico como el que se produjo en 1985 y el 2017 —tras un par de terremoto que sacudieron a la Ciudad de México y otros estados y que dejó miles de fallecidos y desaparecidos— al menos en materia de prevención de riesgos, coincidieron expertos en protección civil.

  • Julio Alejandro Velázquez Rodríguez, coordinador de la Unidad Canina de Búsqueda y Rescate de Personas, la cual pertenece a la Dirección General de Análisis, Protección y Seguridad Universitaria, de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), opinó que los mexicanos ahora conocen más y mejores formas de prevención y protección contra desastres naturales.

No obstante, dijo que si bien se avanzó en dicha materia, existe una diferencia entre los habitantes del Valle de México contra los de zonas rurales, quienes poseen un menor acceso a la información.

Necesario, plan ante contingencias

Velázquez Rodríguez agregó que existen al menos tres rubros importantes en materia de prevención, como lo son los simulacros, la revisión constante de la situación de la estructura de las viviendas y un plan familiar.

  • Respecto al primer punto dijo que las personas deberían tomar más en serio los protocolos que se realizan en los simulacros, así como seguir las reglas de qué hacer y qué no en caso de un siniestro.
  • En el tema de la revisión de los inmuebles, el experto comentó que la inspección de las viviendas y edificios no sólo debe realizarse tras un sismo, sino que se debe ser con cierta periodicidad para detectar a tiempo alguna falla.
  • Agregó que desde el inicio de la construcción se debe implementar el mejor material posible así como seguir las reglas de construcción que se manejan en diferentes localidades del país.

“A veces el problema es que las personas construyen a su manera y eso provoca que cuando existen eventos catastróficos la vivienda sufra daños graves y afecte a sus habitantes”, dijo el especialista.

Por último, Velázquez Rodríguez comentó que el plan familiar es de suma importancia para que los miembros de una familia sepan cómo actuar ante un desastre natural.

Explicó que los integrantes de las familias deben compartir el conocimiento que adquieren en sus centros de trabajo, escuelas u otros medios para salvaguardar la vida de sus seres queridos.

Participación de la ciudadanía

Por su parte, Fernando Álvarez Bravo, integrante la Brigada de Rescate Topos Tlatelolco, señaló que la ciudadanía es parte de la solución y de la prevención de desastres. Argumentó que no se debe estar “atenido” a la participación de las autoridades de gobierno ya que en la mayoría de ocasiones el gobierno no puede resguardar y rescatar a todas las personas.

“Las personas deben ser más conscientes y deben entender que tienen que cuidarse y prevenirse, en cualquier momento puede temblar y hay que saber cómo actuar”, dijo Álvarez Bravo.

  • Añadió que no sólo la sociedad de la Ciudad de México debe prepararse, sino todo el territorio mexicano porque no se sabe de dónde puede venir el siguiente movimiento telúrico.
  • De acuerdo con geólogos de la UNAM, tras el sismo que se registró el lunes, una de las recomendaciones a la población es que se tenga conciencia de que vivimos en una zona sísmica.

“La población ya debe de estar preparada y lo mejor que puede hacer es obedecer los simulacros y estar conscientes de que se tiene que tener mejores construcciones de las viviendas, además de saber las indicaciones generales en caso de un sismo”, comentó el geólogo Rodolfo Ruíz Quintanar.

En 36 años, sismos han afectado a más de 16 millones de personas

Los sismos que han ocurrido en México entre 1985 y 2021 han propiciado 6,651 defunciones y afectado a 16 millones 863,855 personas, informó este lunes Laura Velázquez, coordinadora nacional de Protección Civil.

  • En el marco de la conmemoración de los sismos del 19 de septiembre de 1985 y de 2017, Velázquez detalló que los movimientos telúricos también han generado daños y pérdidas de más de 356,000 millones de pesos, además de 434,851 viviendas dañadas, 15,763 escuelas afectadas, y 768 hospitales con daños.

Por su ubicación geográfica, México es un país vulnerable a sufrir sismos, por lo que –dijo– es fundamental para su población saber cómo reaccionar ante estos evento.

“Un sismo no se puede predecir, pero nosotros debemos actuar de manera preventiva, siempre realizando acciones que nos pongan en alerta de ocurrir un sismo”, afirmó la funcionaria.

A las 12:19 horas de este lunes, se realizó un simulacro nacional para que la población sepa cómo actuar ante un posible movimiento telúrico.

La coordinadora nacional de Protección Civil explicó que México cuenta con un Atlas Nacional de Riesgos para identificar en qué zonas sí se puede y en cuáles no otorgar permisos de construcción, además –abundó– se han capacitado a más de 200,000 funcionarios para saber cómo responder.

  • Laura Velázquez explicó que en México se ha avanzando en la prevención y hoy las alertas sísmicas dan un tiempo de preparación de segundos; las alertas de tsunamis de minutos, y las de lluvias incluso de horas.

“Un sismo no se puede producir, pero nosotros podemos actuar de manera preventiva, siempre preparándonos, realizando acciones que nos pongan en alerta de ocurrir un sismo. La red de monitoreo en la República mexicana ha crecido, nosotros realizamos simulacros y en cada entidad federativa realizan simulacros de manera permanente”, añadió.

Sismo de 7.7 hace temblar otra vez a México

El terremoto de magnitud 7,7 que hizo temblar a México este lunes ya cobra la vida de dos personas. La coordinadora nacional de Protección Civil, Laura Velázquez, confirmó este martes que las muertes se registraron en Manzanillo, estado de Colima.

  • Horas antes, en la noche del lunes, Protección Civil de Colima había reportado el fallecimiento de una segunda persona, atrapada en Plaza Punto Bahía.

En conferencia de prensa junto al presidente Andrés Manuel López Obrador, Velázquez explicó que la mayor afectación del terremoto se registró en Colima y Michoacán. En el primero, además de las muertes, se confirmaron 9 heridos.

También, 153 viviendas afectadas por daños estructurales y en fachadas, 5 puentes dañados y 8 derrumbes en carretera, entre otros. Mientras, en Michoacán se registró una persona herida, un colapso en una vivienda y 30 escuelas con daños.

Las tragedias del 19 de septiembre

Con más de 692 réplicas hasta este martes, la trágica fecha del 19 de septiembre en México volvió a repetirse. El sismo, que según el gobierno sintieron 48 millones de personas, ocurrió el mismo día de los devastadores terremotos de 1985 y 2017.

Cada 19 de septiembre, México conmemora el Día Nacional de la Protección Civil, que incluye un megasimulacro de terremoto para mejorar la preparación de la sociedad frente a un evento de estas características.

Fue el terremoto de 1985 el que desembocó en la creación del Sistema Nacional de Protección Civil.

  • Ese sismo de magnitud 8,1 dejó aproximadamente 10.000 muertos. Afectó el centro, sur y occidente del país, según un reporte de la Universidad Nacional Autónoma de México, que recuerda que «el temblor provocó daños severos en cientos de edificios de la capital y cambió por completo la imagen de la Ciudad de México». Las pérdidas económicas se calcularon en más de US$ 4.000 millones.
  • Y en 2017, México volvería a revivirla. Poco después de que se realizara el simulacro habitual, Morelos, Puebla, Ciudad de México, el Estado de México, Guerrero y Oaxaca sintieron un sismo de magnitud 7,1. Ocurrió después de que se registrara otro sismo de gran intensidad, el 7 de septiembre, con una magnitud de 8,1.

El total de muertos del 19 de septiembre de 2017 se contó por cientos (la cifra oficial es 369), mientras que unas 250.000 personas quedaron damnificadas, más de 180.000 viviendas sufrieron daños con los dos terremotos y de esas, 50.610 tuvieron daños totales.

Inteligencia artificial prevé sismo fuerte en México entre 2024 y 2028

Entre 2024 y 2028 ocurrirá por lo menos un sismo fuerte en el sur y centro del país, Ciudad de México incluida. Su magnitud será igual o mayor de 7, según el estudio realizado por Víctor Velasco Herrera, investigador del Instituto de Geofísica de la Universidad Nacional Autónoma de México. La predicción ha sido puesta sobre la mesa.

  • A semejanza del oráculo de Delfos que, según lo relata Platón en sus Diálogos, conocía anticipadamente el destino de los seres humanos, Velasco hace pronósticos sobre la liberación de energía de las placas tectónicas, causa subyacente de los terremotos.

Sin embargo, la tarea de este científico nada tiene que ver con los dones adivinatorios descritos en la antigüedad, sino con el cálculo frío basado en millones de datos interpretados por inteligencia artificial respaldada en modelos matemáticos.

  • La matemática le ha ofrecido herramientas abstractas con las que ha dilucidado patrones de comportamiento en la naturaleza. Durante más de 20 años se ha dedicado al análisis de explosiones solares, huracanes y últimamente sismos, fenómenos conocidos como “abruptos” y “heterogéneos”, según el argot de la geofísica.
  • “Los sismos fuertes van a empezar en 2024 y se podrían prolongar hasta 2028. El pronóstico arroja también que muy probablemente en éste y el próximo año no se presentarán sismos fuertes, esto es, con una magnitud igual o mayor de 7”, afirma Velasco Herrera.

Y si alguien vive en un edificio o una casa afectados por los sismos fuertes de 2017 o 2021, es recomendable que emplee el actual lapso de gracia para hacer las reparaciones pertinentes.

“Así se podrá evitar que otro movimiento ocasione desafortunadamente pérdidas humanas o económicas. Hay que realizar acciones en este periodo de actividad sísmica nula, porque después sigue la temporada alta”, aconseja Velasco.

Falla de San Andrés preocupa a los sismólogos

Con la presencia de un sismo de magnitud 7.7, por la tarde de este lunes 19 de septiembre, surgen distintas preocupaciones entre los ciudadanos; sin embargo, la comunidad científica se centra en la conocida falla de San Andrés y el fenómeno del “Big One” o el gran terremoto.

  • La presencia de la falla de San Andrés atrajo la atención mundial el 18 de abril de 1906, cuando el desplazamiento repentino a lo largo de la falla produjo un gran terremoto e incendio en San Francisco; sin embargo, fue solo uno de los muchos sismos que han resultado del desplazamiento episódico de la falla, a lo largo de su vida, de aproximadamente 15 a 20 millones de años.
  • Los científicos han descubierto que la corteza terrestre está fracturada en una serie de placas que se han estado moviendo muy lentamente sobre la superficie terrestre durante millones de años. Dos de estas placas en movimiento se encuentran en el oeste de California; el límite entre ellos es la falla de San Andrés. La Placa del Pacífico (en el oeste) se mueve hacia el noroeste en relación con la Placa de América del Norte (en el este), provocando terremotos a lo largo de la falla.

San Andrés es uno de los muchos sistemas de fallas que marcan aproximadamente la frontera entre el Pacífico y el Norte. Placas tectónicas americanas. Ambas se mueven aproximadamente en dirección norte, pero la placa del Pacífico se mueve más rápido que su contraparte, lo que significa que las tensiones entre ellas se acumulan constantemente.

  • Cada que se suscita un temblor en esta región, los sismólogos de todo el mundo se preguntan si se tratará del “Big One”, que es un fenómeno que ocurre cada 150 años y consiste en un sismo de gran magnitud. No obstante, desde hace 300 años no ha sucedido de nuevo, por lo que los científicos prevén que podría ocurrir en cualquier momento y desencadenar efectos catastróficos.
  • De hecho, en un intento por comprender los efectos de un gran terremoto en el sur de San Andrés, el Servicio Geológico de EE. UU. modeló un evento de magnitud 7.8 , con un deslizamiento de 2 a 7 metros, para representar las tensiones que se han acumulado en el área desde el último gran evento.

A partir de este modelo, se encontró que el daño sería más severo en las construcciones que se encuentran a ambos lados de la falla./PUNTOporPUNTO

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