Las remesas representan una fuente importante de ingresos para millones de familias en América Latina. Estos envíos desde Estados Unidos llegan sobre todo a hogares vulnerables donde cumplen diversas funciones, desde cubrir necesidades básicas, hasta pagar deudas, educación o comprar una vivienda. Pero ese flujo de dinero podría enfrentar una caída significativa a mediano y largo plazo ante el endurecimiento de la política inmigratoria impulsada por Donald of Trump, de acuerdo con expertos.
La importancia de las remesas, en datos
De acuerdo con el Banco Mundial, en 2024 los cinco países que más remesas recibieron fueron India, México, China, Filipinas y Paquistán. Ese mismo año, América Latina y el Caribe recibieron US$ 160.900 millones en remesas enviadas principalmente por migrantes desde Estados Unidos, estos flujos representaron el 2,3% del Producto Interno Bruto (PIB) regional, aunque en algunos países su impacto fue mucho mayor: en Honduras equivalieron al 25,9% del PIB y en Jamaica al 16,8%, según el Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
- Según el BID, las remesas representaron el 3,2% para la economía de México en 2024, pero su peso es comparable, por ejemplo, a la mitad de lo que representa el sector de la construcción en la economía nacional, explicó la economista Sofía Ramírez Aguilar, directora del colectivo de investigación México, ¿Cómo Vamos?
- Aunque no forman parte directa del PIB, “son una fuente muy importante de recursos, sobre todo para hogares encabezados por mujeres”, señaló Ramírez. Estos hogares, en su mayoría de menores ingresos y ubicados en zonas rurales o periféricas, dependen en buena medida de estos envíos para su subsistencia, detalló.
Sin embargo, el endurecimiento de la política inmigratoria en Estados Unidos, impulsado por Trump, afectará ese flujo, agregó Ramírez.
El impacto de las restricciones inmigratorias en EE.UU.
Rodrigo Valdés, director del Departamento del Hemisferio Occidental del Fondo Monetario Internacional (FMI), advirtió a finales de abril desde Washington que habrá una baja en las remesas a largo plazo, aunque no señaló cuánto. Aunque indicó que “a corto plazo hemos visto lo contrario, están subiendo”, aseguró que esto es temporal.
- También señaló que los países de la región deberán prepararse para enfrentar los efectos de este cambio en la migración y el envío de remesas. “Las economías van a tener que gestionar (este fenómeno), ya que se trata de un shock que perdurará en el tiempo” y que impactará directamente “sobre el consumo y la actividad económica”.
- Valdés explicó que la reducción de los flujos migratorios tendrá un impacto en la economía de Estados Unidos, pero también afectará gravemente a los países de origen. “Es particularmente importante para América Central y México, más América Central”, precisó.
- Según estimaciones del Centro de Estudios Monetarios Latinoamericanos (CEMLA), las remesas podrían disminuir entre 1,2% y 2,9% en 2025* para México, el principal receptor en la región.
- “Esto podría traducirse en una afectación de los ingresos de esas familias sin duda, aunque en el agregado de la economía no parece ser particularmente grande”, apuntó a su vez Sofía Ramírez.
Entre los factores que podrían reducir el envío de remesas, según la economista, destacan el aumento en las deportaciones y la falta de liquidez entre los migrantes. “Si las personas indocumentadas no están yendo a trabajar, si hay persecución en centros de trabajo y escuelas, pues lo más probable es que no tengan tantos ingresos para enviar”.
Respecto a si podría repetirse un “efecto Trump” como en 2016, cuando los migrantes enviaron más dinero por temor a deportaciones, Ramírez se mostró escéptica. “Lo más probable es que ahora no veamos un incremento considerable en las remesas. A menos que hubiera un fenómeno de autodeportación masiva, cosa que no estamos viendo”, dijo.
Qué países serán los más afectados por el impuesto a las remesas
Según el análisis de ODI, en términos de ingresos, México será el más afectado por el impuesto a las remesas, al perder ingresos por alrededor de 1,500 millones de dólares anualmente.
- Pero también serán impactadas negativamente India, Filipinas, China y países de América Latina y el Caribe como Guatemala, República Dominicana y El Salvador.
“El costo de las remesas ha sido desde hace tiempo un tema de interés político global debido a su significativo impacto en las familias”, sostuvo el organismo.
- Además, investigaciones de ODI indican que las remesas familiares tienden a tener un mayor impacto en la reducción de la pobreza que otros flujos de efectivo, como las transferencias de efectivo.
- Sin embargo, en términos de la proporción de las remesas con el Producto Interno Bruto (PIB), El Salvador sería el más afectado, dijo el Centro para el Desarrollo Global en un análisis reciente.
“Se proyecta que los países centroamericanos sufrirán la mayor pérdida en relación con su Producto Interno Bruto (PIB), y que El Salvador, un aliado cercano de la administración Trump, perderá el equivalente al 0.6 por ciento del PIB”, advirtió el organismo.
Deportaciones masivas, el mayor temor
En los primeros 100 días de gobierno de Trump, han sido deportados más de 142,000 migrantes indocumentados, de acuerdo con cifras del Departamento de Seguridad Nacional.
El peor escenario para el envío de remesas sería una situación de deportaciones masivas desde Estados Unidos. Para Ramírez, “si se mantiene la tasa de deportar 17.000 personas al mes, pues sí es una tasa considerable”, aunque por ahora el impacto se considera moderado porque “los que se quedan seguramente podrían enviar un poquito más”.
“La tragedia vendría si se mantiene este tono de persecución”, advirtió Ramírez, no solo para los mexicanos, sino para toda la comunidad latinoamericana en EE.UU.
- El problema no sería que dejaran de llegar migrantes —porque “Estados Unidos necesita la mano de obra de personas jóvenes”—, sino que quienes logren quedarse enfrentarían condiciones cada vez peores, dice la directora de México, ¿Cómo Vamos?. “Van a aceptar peores pagas, en peores condiciones laborales”, con afectaciones directas a sus ingresos y, en consecuencia, a su capacidad de enviar remesas.
Esta precarización podría traducirse en una disminución del envío de dinero: “Aunque manden el 20% de lo que ganan, si ganan cada vez menos porque tienen peores condiciones, entonces pues eso sí lo veríamos acá”, indica Ramírez.
Para qué se usan las remesas
El uso que hacen los receptores varía según el tiempo que tienen los migrantes en el extranjero, de acuerdo con el informe “Las remesas a América Latina y el Caribe en 2024”, del Banco Interamericano de Desarrollo.
- Cuando el migrante llega y comienza a enviar remesas, éstas se destinan principalmente a la manutención familiar y, tras un par de años, van al pago de deudas. A partir del noveno año en el extranjero, se utilizan para la educación, y después de 16 años se suman el ahorro y la inversión en negocios. Para migrantes con más de 22 años fuera, las remesas se utilizan sobre todo para cubrir gastos médicos, ahorrar y adquirir bienes inmuebles.
- Si los beneficiarios son padres o abuelos, las remesas se destinan a gastos médicos, el pago de inmuebles o deudas, pero si van para los hermanos, las remesas se utilizan para el pago de deudas o a negocios. Para los cónyuges o hijos, se destinan mayormente a educación, manutención, salud y vivienda.
Ramírez también dijo que si bien las remesas ayudan al consumo de los hogares más vulnerables, no tienen un impacto directo en el crecimiento económico de un país, a diferencia de otros ingresos de dólares, como las exportaciones no petroleras, pero pero igualmente advirtió que una caída en el flujo de remesas representaría “una tragedia para esas familias”.
Viven en pobreza 16% de migrantes mexicanos en EU
Al menos 16 de cada 100 personas de origen mexicano que viven en Estados Unidos lo hace en condiciones de pobreza, de acuerdo con un nuevo estudio publicado esta semana.
La información está contenida en el Anuario de migración y remesas, documento elaborado desde hace 13 años por el Consejo Nacional de Población (Conapo) y BBVA México, el intermediario financiero de mayor presencia entre los que operan en el país.
- De acuerdo con las más recientes cifras presentadas en el estudio, establecidas al cierre de 2024, en el país vecino radican alrededor de 40 millones 600 mil personas de origen mexicano, divididos entre primera, segunda y tercera generaciones. De ese universo, 6.6 millones, que equivalen al 16.25 por ciento –uno de cada seis– enfrenta condición de pobreza, agrega.
Se debe considerar como persona de primera generación a quienes nacen en México, llegan a Estados Unidos y conservan su cultura original; como segunda generación, aquellos nacidos en Estados Unidos de al menos un padre originario de nuestro país, y como tercera generación, a los nacidos en el país vecino de padres también nacidos ahí, pero que se identifican como mexicanos.
En 2024, 6 millones 600 mil personas de origen mexicano vivían en condición de pobreza, señala el anuario, que representa 16 por ciento de la población total de origen mexicano que radica en Estados Unidos.
Según los datos, de los 6.6 millones que viven en esta situación, 2 millones 199 mil 266 pertenecen a la primera generación; 2 millones 383 mil 449, a la segunda, y un millón 995 mil 16, a la tercera./Agencias-PUNTOporPUNTO