Durante la apertura del periodo legislativo, el coordinador del Grupo Parlamentario del PAN, Ricardo Anaya, ofreció una intervención cargada de historia, crítica y advertencia. En un discurso que evocó la lucha democrática de figuras como Luis H. Álvarez y Eberto Castillo, Anaya afirmó que callar en este momento sería “profundamente cobarde” y que el deber de su bancada es decir lo que piensan, con firmeza y respeto.
- Recordando el fraude electoral de 1986 en Chihuahua, Anaya introdujo el concepto de “legitimidad de origen” frente a “legitimidad de ejercicio”, señalando que una autoridad nacida de un proceso viciado no puede considerarse legítima. Aseguró que la reciente reforma judicial promovida por Morena y sus aliados carece de legitimidad de origen, y enumeró cuatro irregularidades que, según él, la invalidan: la construcción de una mayoría calificada mediante presiones judiciales, la conformación de comités de evaluación con perfiles inexpertos y obedientes, la manipulación del proceso de selección mediante una tómbola amañada, y una jornada electoral con una participación ciudadana mínima.
- Anaya mostró un video como moción de ilustración para evidenciar la falta de preparación de quienes integraron los comités de evaluación, cuestionando su capacidad para decidir sobre los perfiles que ocuparían cargos en el Poder Judicial. Criticó que se violó el artículo 96 de la Constitución al incluir solo 19 nombres en la tómbola, en lugar de los 50 requeridos, lo que permitió asegurar la presencia de candidatos preseleccionados.
El coordinador panista rechazó la narrativa oficial que acusa a la oposición de defender privilegios. Afirmó que el PAN sí reconoce la necesidad de una reforma judicial, pero no para someter al Poder Judicial al control político, sino para hacerlo accesible, justo y centrado en el fondo de los casos. Expresó su esperanza de que desde el propio Poder Judicial surja una reforma que corrija los errores cometidos.
En un acto de congruencia, anunció que el PAN no estaría presente en la toma de protesta formal de los nuevos integrantes del Poder Judicial. Cerró su intervención citando a Luis H. Álvarez: “Ante la falta de legitimidad de origen, la prueba de fuego será adquirir legitimidad en el ejercicio. México estará observando sus sentencias. Por sus sentencias se les conocerá.”/CONGRESO-PUNTOporPUNTO