GLACIARES del PLANETA están DESAPARECIENDO drásticamente ante el AUMENTO de la TEMPERATURA

El cambio climático no sólo ha llevado al derretimiento de los polos, donde incluso han llegado a reproducirse plantas autóctotonas a un ritmo acelerado para la región, pues sus efectos han perjudicado a los glaciares mexicanos, de los cuales ya sólo quedan cinco, repartidos en el Iztaccíhuatl y el Pico de Orizaba.

Los glaciares del mundo se están reduciendo y desapareciendo drásticamente, y dos tercios de ellos desaparecerán a finales de siglo si se mantienen las tendencias actuales del calentamiento global, sugirió un nuevo estudio.

  • Sin embargo, si la humanidad puede limitar el calentamiento global futuro a sólo unas décimas de grado más y cumplir los objetivos internacionales (algo técnicamente posible pero improbable según muchos científicos), entonces desaparecerán algo menos de la mitad de los glaciares del planeta, señala el mismo estudio.
  • Y si bien la mayoría de los glaciares, pequeños pero bien conocidos, marchan hacia la extinción, el peor de los escenarios (también improbable), de un aumento de varios grados de calentamiento global, el 83% de los glaciares del mundo podría desaparecerían para el año 2100, según los autores del estudio.

El estudio, publicado esta semana en la revista Science, examinó los 215 mil glaciares terrestres del planeta (sin contar los de las capas de hielo de Groenlandia y la Antártida) de una forma más exhaustiva que en estudios anteriores. Los científicos utilizaron simulaciones por ordenador para calcular, con distintos niveles de calentamiento, cuántos glaciares desaparecerían, cuántos billones de toneladas de hielo se derretirían y cuánto contribuirían a la subida del nivel del mar.

En la actualidad, el mundo se encamina hacia un aumento de la temperatura de 2,7 grados Celsius desde la época preindustrial, lo que para el año 2100 supondría la pérdida del 32% de la masa glaciar mundial, lo que se traduce en 48,5 billones de toneladas métricas de hielo, así como la desaparición del 68% de los glaciares. Según David Rounce, autor principal del estudio, esto aumentaría el nivel del mar en 115 milímetros, además de los mares que ya están creciendo por el deshielo de las capas de hielo y el calentamiento del agua.

«Pase lo que pase, vamos a perder muchos glaciares», afirma Rounce, glaciólogo y profesor de ingeniería de la Universidad Carnegie Mellon. «Pero tenemos la capacidad de marcar la diferencia limitando cuántos glaciares perdemos».

«Para muchos glaciares pequeños es demasiado tarde», dijo la coautora del estudio Regine Hock, glacióloga de la Universidad de Alaska Fairbanks y de la Universidad de Oslo en Noruega. «Sin embargo, a nivel global nuestros resultados muestran claramente que cada grado de temperatura global importa para mantener la mayor cantidad posible de hielo encerrado en los glaciares».

  • Según el estudio, la pérdida de hielo prevista para 2100 oscila entre 38,7 billones de toneladas métricas y 64,4 billones de toneladas, dependiendo de cuánto se caliente el planeta y cuánto carbón, petróleo y gas se queme.
  • El estudio calcula que todo ese hielo derretido aumentará el nivel del mar entre 90 milímetros (3,5 pulgadas) en el mejor de los casos y 166 milímetros (6,5 pulgadas) en el peor, entre un 4% y un 14% más que las proyecciones anteriores.

Ese aumento del nivel del mar por los glaciares significarían que más de 10 millones de personas en todo el mundo vivirían por debajo de la línea de pleamar (en México, 38 ciudades podrían desaparecer a causa del calentamiento global), que de otro modo estarían por encima, dijo el investigador del aumento del nivel del mar Ben Strauss, director general de Climate Central.

Los científicos afirman que la futura subida del nivel del mar se deberá más al deshielo de las capas de hielo que al de los glaciares.

Pero la pérdida de glaciares supone algo más que la subida del nivel del mar. Supone la reducción del suministro de agua para una gran parte de la población mundial, un mayor riesgo de inundaciones por el deshielo de los glaciares y la pérdida de zonas históricas cubiertas de hielo, desde Alaska hasta los Alpes e incluso cerca del campamento base del Everest, según explicaron varios científicos a The Associated Press.

«Para lugares como los Alpes o Islandia… los glaciares son parte de lo que hace que estos paisajes sean tan especiales», dijo el director del Centro Nacional de Datos de Nieve y Hielo, Mark Serreze, que no formó parte del estudio pero lo elogió. «A medida que pierden su hielo, en cierto sentido también pierden su alma».

  • Hock señaló el glaciar Vernagtferner, en los Alpes austriacos, que es uno de los mejor estudiados del mundo, pero dijo que «el glaciar desaparecerá».
  • El glaciar Columbia, en Alaska, tenía 216 mil millones de toneladas de hielo en 2015, pero con unas décimas de grado más de calentamiento, Rounce calculó que será la mitad. Si se produce un calentamiento de 4 grados Celsius desde la época preindustrial, un escenario poco probable en el peor de los casos, perderá dos tercios de su masa, dijo.

Los glaciares son cruciales para la vida de las personas en gran parte del mundo, afirmó la científica principal adjunta del Centro Nacional de Nieve y Hielo, Twila Moon, que no participó en el estudio.

«Los glaciares proporcionan agua potable, agua para la agricultura, energía hidroeléctrica y otros servicios que sirven de sustento a miles de millones de personas», declaró Moon.

«El estudio representa avances significativos en la proyección de cómo los glaciares del mundo pueden cambiar en los próximos 80 años debido al cambio climático creado por el hombre».

Esto se debe a que el estudio incluye factores en los cambios de los glaciares que los estudios anteriores no incluían y es más detallado, dijeron Ruth Mottram y Martin Stendel, científicos del clima del Instituto Meteorológico Danés que no formaron parte de la investigación.

  • Según Stendel y Mottram, este nuevo estudio tiene más en cuenta que el hielo de los glaciares se derrite no sólo por el aire más caliente, sino también por el agua que hay debajo y en los bordes de los glaciares, y cómo los escombros pueden ralentizar el deshielo. Los estudios anteriores se centraban en los grandes glaciares y realizaban estimaciones regionales en lugar de cálculos para cada glaciar individual.

En la mayoría de los casos, las cifras de pérdida estimadas por el equipo de Rounce son ligeramente más nefastas que las anteriores.

Si el mundo consigue limitar de algún modo el calentamiento al objetivo global de 1,5 grados Celsius de calentamiento desde la época preindustrial (el mundo ya está en 1,1 grados Celsius), la Tierra perderá probablemente el 26% de la masa glaciar total a finales de siglo, lo que supone 38,7 billones de toneladas métricas de hielo derretido. Según las mejores estimaciones anteriores, ese nivel de deshielo por calentamiento se traduciría en una pérdida de masa total de sólo el 18%. Sin duda, no muy alentadoras noticias.

Se derriten 6 de 11 glaciares en México

El cambio climático no sólo ha llevado al derretimiento de los polos, donde incluso han llegado a reproducirse plantas autóctotonas a un ritmo acelerado para la región, pues sus efectos han perjudicado a los glaciares mexicanos, de los cuales ya sólo quedan cinco, repartidos en el Iztaccíhuatl y el Pico de Orizaba.

“En las próximas décadas, los glaciares en México desaparecerán irremediablemente como síntoma del deshielo y del calentamiento global”, detalló Hugo Delgado, del Instituto de Geofísica de la UNAM.

  • De acuerdo con el especialista, esta no sólo es una muestra de lo rápido que avanza el calentamiento global, que de 2011 a 2021 trajo la década más calurosa que se haya registrado, sino que el derretimiento de los glaciares puede provocar un cambio en la temperatura de las zonas aledañas a donde se ubicaba, lo que representa más calor para la población.
  • El propio estudio de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) detalla que en 1958 había al menos 11 en el territorio y en 2018 se detectó la desaparición más actual de uno de los glaciares del país, el Ayoloco, ubicado en la cumbre del volcán Iztaccíhuatl, cuya ausencia impacta en la disponibilidad de agua y regulación del clima de la zona, algo que puede pasar en los otros puntos.

“Si desaparecen los glaciares en su totalidad se terminará el aporte de agua en estos sistemas en épocas de sequías. Además, podrían darse una serie de cambios de carácter climático en las cimas de las montañas”, señaló el experto de la UNAM.

Para las otras masas de hielo en el territorio nacional el panorama no es muy alentador pues se estima que en los próximos cinco años los tres del Iztaccíhuatl habrán desaparecido y se prevé un margen de dos décadas para los del Pico de Orizaba; sin embargo, el especialista asegura que para 2050 no habrá glaciares en México.

  • Estas formas de hielo se han convertido en uno de los sensores más evidentes del cambio climático, no sólo en el país, sino en todo el mundo, pues cuanto más aumenta la temperatura en el planeta, más rápido se extinguen. “Su continua desaparición es un espejo del mundo al que nos dirigimos. Más caliente, más seco, más agotado”, reveló.

Además del calentamiento global, los glaciares mexicanos han sobrevivido rodeados de las zonas industriales del Valle de México y de Puebla, donde no sólo las temperaturas aumentan, sino que la contingencia y contaminantes también fomentan el deshielo.

“Nuestros hielos son heroicos, están resistiendo todo lo que pueden, pero con las condiciones actuales no hay forma en la que puedan sobrevivir por más tiempo”, indicó Hugo Delgado.

La única forma de que se regeneren los glaciares es que existan las condiciones necesarias para ello.

Temperatura en Groenlandia se dispara

Desde 1995, las temperaturas de Groenlandia se han disparado hasta situarse 1.5 grados Celsius (2.7 grados Fahrenheit) por encima de la media del siglo XX, la más cálida en más de mil años, según los nuevos datos de los núcleos de hielo.

  • Hasta ahora, los núcleos de hielo de Groenlandia —una mirada a las temperaturas a largo plazo anterior a los termómetros— no habían mostrado una señal muy clara de calentamiento global en la parte centro-norte más remota de la isla, al menos en comparación con el resto del mundo.

Pero los testigos de hielo tampoco se habían actualizado desde 1995. Los núcleos recién analizados, perforados en 2011, muestran un drástico aumento de la temperatura en los 15 años anteriores, según un estudio publicado este miércoles 18 de enero en la revista Nature.

“Seguimos observando un aumento de las temperaturas entre 1990 y 2011″, afirmó Maria Hoerhold, autora principal del estudio y glacióloga del Instituto Alfred Wegener de Alemania. “Ahora tenemos una firma clara del calentamiento global”.

  • Analizar los datos de los núcleos de hielo lleva años. Hoerhold tiene nuevos datos de 2019, pero aún no ha terminado de estudiarlos. Espera que el aumento de la temperatura continúe, ya que la capa de hielo y los glaciares de Groenlandia se han derretido más rápidamente en los últimos tiempos.

“Este es un hallazgo importante y corrobora la sospecha de que el ‘calentamiento ausente’ en los núcleos de hielo se debe al hecho de que los núcleos terminan antes de que se inicie el fuerte calentamiento”, dijo el científico del clima Martin Stendel, del Instituto Meteorológico Danés, que no formó parte de la investigación.

¿Hay tiempo de salvar los glaciares de Groenlandia?

Estudio afirma que desaparecerán a finales de siglo estudio que combina datos de satélite con modelos numéricos de alta precisión estima que la pérdida de hielo de los glaciares del noreste de Groenlandia será a finales de este siglo, seis veces mayor de lo que se estimaba hasta ahora.

El trabajo, que publica la revista Nature, calcula que ese deshielo elevará entre 13.5 y 15.5 milímetros adicionales el nivel de los océanos de aquí al año 2100, un incremento equivalente al que ha generado toda el agua derretida en la capa de hielo de Groenlandia en el último medio siglo.

Iceberg del tamaño de Londres se desprendió de la Antártida

Un iceberg de mi 500 kilómetros cuadrados, equivalente a 15 veces la superficie de París, se desprendió el domingo de la Antártida, informó un grupo de científicos británicos el lunes.

  • Aunque la región se encuentra amenazada por el calentamiento global, el desprendimiento no se debe al cambio climático, señaló el British Antarctic Survey (BAS), un organismo que investiga las regiones polares.
  • El bloque de hielo, de 1.550 km2, se desprendió de la banquisa entre las 19H00 y las 20H00 GMT del domingo, después de que una fuerte marea ensanchara una grieta que ya existía en la plataforma de hielo, detalló el BAS.

Ya se había desprendido otro iceberg de una talla similar hace dos años en la misma zona, bautizada plataforma de hielo Brunt y sobre la cual se sitúa la base británica de investigaciones Halley VI.

Desde hace una década han aumentado las grandes fisuras en las plataformas de hielo, observan los glaciólogos.

En 2016, el BAS decidió desplazar la base Halley VI a otro lugar situado a unos 20 kilómetros por temor a que quedara a la deriva sobre un iceberg.

  • Este desprendimiento era esperado y es parte del comportamiento natural de la plataforma de hielo Brunt. No está vinculado al cambio climático», explicó el glaciólogo Dominic Hodgson, citado en un comunicado.
  • El continente sufre sin embargo las consecuencias del calentamiento global. El año pasado se registraron temperaturas récord en la zona.
  • La extensión del hielo en esa parte alcanzó en febrero de 2022 el mínimo jamás registrado en 44 años de observaciones satelitales, indicó recientemente el informe anual del programa europeo sobre cambio climático Copernicus.

En 2021, el derretimiento de un iceberg, 4.000 km al norte del lugar de donde se desprendió en 2017, soltó más de 150.000 millones de toneladas de agua dulce mezclada con nutrientes, lo que preocupó a los científicos por su impacto en un ecosistema frágil./Agencias-PUNTOporPUNTO

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