Deutsche Bank AG, Goldman Sachs Group y otros bancos de Wall Street pronostican que el dólar estadounidense reanudará su caída el próximo año a medida que la Reserva Federal baje las tasas de interés.
- La moneda se estabilizó en los últimos seis meses después de sufrir su mayor descenso desde principios de la década de 1970 durante la primera mitad del año, cuando la guerra comercial del presidente Donald Trump desató estragos en los mercados mundiales.
- Pero los estrategas prevén que el dólar se debilite en 2026, a medida que el banco central estadounidense continúa con una política monetaria más flexible, mientras otros países se mantienen estables o se acercan a subir los tipos.
Esta brecha incentivaría a los inversores a vender deuda estadounidense y transferir efectivo a países donde los pagos son mayores.
Dólar perdería terreno frente a otras divisas: ¿Cuánto podría caer en 2026?
Como resultado, analistas de más de media docena de importantes bancos de inversión pronostican, en general, que el dólar se depreciará frente a divisas como el yen, el euro y la libra esterlina. Según las estimaciones de consenso recopiladas por Bloomberg, un índice del dólar ampliamente seguido se debilitará aproximadamente un 3 por ciento para finales de 2026.
“Hay amplio margen para que los mercados incorporen en los precios un ciclo de recortes más profundo”, afirmó David Adams, director de estrategia cambiaria del G-10 en Morgan Stanley, quien prevé una caída del 5 por ciento del dólar en el primer semestre del año. “Eso deja amplio margen para una mayor debilidad del dólar”.
Se espera que la caída del dólar sea más moderada y no tan amplia como la de este año, cuando perdió terreno frente a todas las monedas principales, lo que dejó al Bloomberg Dollar Spot Index con un descenso de casi el 8 por ciento en su caída anual más profunda desde 2017. Y la perspectiva depende de la anticipación de que el mercado laboral estadounidense continúe debilitándose, lo que sigue en duda, dada la sorprendente resiliencia de la economía pospandémica.
- Las previsiones cambiarias también generan preocupación. Cuando el dólar se disparó a finales del año pasado, mientras los inversores apostaban por la llamada estrategia de Trump, convencidos de que sus políticas impulsarían el crecimiento, los estrategas esperaban un retroceso a mediados de 2025. Sin embargo, la magnitud de la caída durante el primer semestre los tomó por sorpresa.
Aun así, los estrategas consideran que las perspectivas generales de cara al nuevo año favorecen un dólar más débil. Los operadores prevén dos recortes de tasas de un cuarto de punto porcentual por parte de la Fed el próximo año, y es posible que quienquiera que Trump elija para reemplazar al presidente Jerome Powell ceda a la presión de la Casa Blanca para bajar aún más las tasas.
Mientras tanto, se espera que el Banco Central Europeo mantenga las tasas estables, mientras que el Banco de Japón impulsa ligeramente sus tipos.
“Vemos que los riesgos son mayores en contra del dólar que a favor del dólar”, dijo Luis Oganes, jefe de investigación macroeconómica global de JPMorgan en Londres, en una conferencia de prensa el martes.
¿Cuáles serían los efectos de un dólar débil?
Un dólar más débil tendría un efecto dominó en la economía, al encarecer las importaciones, incrementar el valor de las ganancias corporativas en el extranjero e impulsar las exportaciones, lo que probablemente recibiría el visto bueno de la administración Trump, que se ha quejado del déficit comercial estadounidense.
- También podría prolongar las subidas en mercados emergentes, ya que los inversores trasladan efectivo hacia esos destinos para aprovechar tasas más altas.
- Ese movimiento impulsó las operaciones de carry trade en mercados emergentes —que implican pedir prestado en países con tasas bajas e invertir donde los rendimientos son mayores— a los mayores retornos desde 2009.
- JPMorgan y Bank of America ven potencial para ganancias adicionales, lo que influye en monedas como el real brasileño y un grupo de divisas asiáticas, entre ellas el won surcoreano y el yuan chino.
- En Goldman Sachs, los analistas dirigidos por Kamakshya Trivedi señalaron este mes que el mercado empieza a descontar una perspectiva económica más optimista para otras monedas del G-10, como las de Canadá y Australia, después de datos más sólidos de lo previsto. El equipo apuntó la tendencia del dólar a depreciarse cuando el resto del mundo crece.
Los detractores que esperan que el dólar se aprecie frente a otras divisas importantes destacan la sólida economía estadounidense. Ese crecimiento, impulsado por el auge de la inteligencia artificial, atraerá flujos de inversión que reforzarán el valor del dólar, según analistas de Citigroup Inc. y Standard Chartered.
“Vemos un fuerte potencial para una recuperación del ciclo del dólar en 2026”, escribió el equipo de Citigroup dirigido por Daniel Tobon en su perspectiva anual.
La perspectiva de un crecimiento mayor al previsto se reforzó el miércoles, cuando las autoridades de la Fed ajustaron sus proyecciones para 2026.
Aun así, recortaron los tipos de interés en un cuarto de punto y mantuvieron el plan de una nueva medida similar para el próximo año. Powell también disipó cualquier preocupación de que la Fed pudiera optar por subir los tipos, al afirmar que el debate ahora es si continuar recortando o esperar, ya que la institución lidia con un mercado laboral debilitado y una inflación que aún supera el objetivo.
Sus comentarios generaron alivio en los mercados, donde algunos operadores temían un mensaje más agresivo. El índice del dólar Bloomberg cayó tras la reunión de la Fed y se encamina hacia su tercera semana consecutiva de descensos, la racha más larga desde agosto. Los operadores se posicionaron a la baja respecto al dólar por primera vez en más de dos meses.
- En una nota anual enviada a clientes a finales del mes pasado, George Saravelos, director global de investigación cambiaria en Londres, y Tim Baker, su colega neoyorquino, de Deutsche Bank, afirmaron que el dólar se benefició de una economía sorprendentemente resiliente y del alza en los precios de las acciones estadounidenses.
Sin embargo, señalaron que la divisa está sobrevaluada y predijeron que caerá frente a sus principales contrapartes el próximo año, a medida que el crecimiento y la rentabilidad de las acciones repunten en otras regiones.
“Si estos pronósticos se materializan, confirmarán que el ciclo alcista del dólar inusualmente largo de esta década terminó”, escribieron./Agencias-PUNTOporPUNTO























