Las renuncias recaudatorias, es decir, los impuestos que deja de cobrar el Gobierno para apoyar a distintos sectores sociales, suman 1.5 billones de pesos para 2025, lo que representa 4.4 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB), de acuerdo con datos de la Secretaría de Hacienda (SHCP).
- Para Carlos Ramírez, socio codirector de Integralia, en un entorno de debilidad económica y escasez de recursos, las renuncias recaudatorias representan un espacio del que puede echar mano el Gobierno para aumentar sus ingresos.
- «Estamos dejando de recaudar 4.4 por ciento del PIB; si el Gobierno decidiera recaudar, si decidiera cerrar esos huecos, tendría obviamente más dinero para gastar y 4.4 por ciento del PIB es mucho dinero», expuso en entrevista sobre el tema.
En 2024, las pérdidas recaudatorias representaron 1.4 billones de pesos, lo que significó 4.1 por ciento del PIB.
Las renuncias recaudatorias son los apoyos indirectos que el Gobierno otorga a sectores de la economía o a los contribuyentes mediante el sistema impositivo que permiten a los beneficiarios disminuir, evitar o diferir el pago de impuestos.
- Estas renuncian corresponden a recursos no recaudados por concepto de tasas diferenciadas, exenciones, subsidios y créditos fiscales, condonaciones, facilidades administrativas, estímulos fiscales, deducciones autorizadas, tratamientos y regímenes especiales, así como algunos impuestos.
- Entre los impuestos incluidos en las renuncias recaudatorias están el ISR, IVA, IEPS, el Impuesto sobre Automóviles Nuevos (ISAN), así como estímulos fiscales.
- En su informe anual Renuncias Recaudatorias 2025, la Secretaría de Hacienda explicó que el monto agregado de estos apoyos aumentó este año porque algunos tratamientos preferenciales se incrementaron.
Es el caso de la renuncia recaudatoria asociada a la exención de los ingresos por intereses que perciben las personas físicas por sus aportaciones a las Siefores el monto aumento por mayores recursos registrados y rendimientos reales de estos instrumentos.
- Otros ejemplos son el estímulo para la construcción o adquisición de Fibras, debido a más compras de inmuebles y un mayor rendimiento por cada activo aportado.
Para Ramírez, no es tan sencillo que el Gobierno pueda echar mano de estos recursos debido a la sensibilidad en casos de apoyos sociales. Tal es el caso de una posible eliminación a la deducción de IVA en alimentos y medicinas./Agencias-PUNTOporPUNTO