El Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) es más que una banda dedicada al negocio de las drogas. Es una “máquina de guerra” que desde hace una década inició una batalla despiadada por el control del territorio nacional y los mercados internacionales, por lo que hoy ejerce una especie de “monopolio” de los homicidios en México.
- En estos instantes, la organización criminal que dirige Nemesio Oseguera Cervantes, alias “El Mencho”, tiene al menos una decena de frentes abiertos de manera simultánea, por lo que de cada 100 homicidios que cometen los grupos del crimen organizado en México, 77 tienen el sello del Cártel Jalisco.
Datos del Departamento de Investigación sobre Paz y Conflictos de la Universidad de Uppsala, en Suecia, muestran que entre 2017 y 2023 los cárteles mexicanos de la droga cometieron 94 mil 021 asesinatos, de los cuales 72 mil 639 están vinculados al CJNG, lo que equivale al 77.2 por ciento del total.
- El 2017 es un parteaguas en el historial de violencia en México. Antes de ese año, los homicidios asociados a la delincuencia organizada no superaban los seis mil casos anuales. Pero en 2017 los asesinatos con la marca del narco se dispararon a 9 mil 723, y de ahí escalaron hasta el pico máximo de 16 mil casos 934 registrados en 2021.
- Respecto a los homicidios vinculados al Cártel de Jalisco, estos pasaron de mil 403 en 2016 a 5 mil 528 en 2017. Y desde ahí crecieron de manera exponencial hasta el récord de 13 mil 307 en 2020. Posteriormente, la virulencia ha disminuido de manera lenta pero constante: 12 mil 832 casos en 2021, 10 mil 631 en 2022 y 9 mil 844 en 2023.
No es fortuito que 2017 haya detonado la violencia homicida. Ese año, uno de los principales líderes del Cártel de Sinaloa, Joaquín El Chapo Guzmán, fue extraditado a Estados Unidos, lo que dio la pauta para que el CJNG emprendiera su sangrienta política expansionista.
“Desde 2017, el CJNG tomó la decisión de expandirse. Invadieron Zacatecas, Aguascalientes, Guanajuato y Michoacán. Posteriormente saltaron a otras entidades como Tabasco, Chiapas, Baja California y Chihuahua. Eso convirtió al Cártel Jalisco en una máquina de guerra”, expone David Saucedo, experto en seguridad nacional y delincuencia organizada.
- El analista remarcó que el CJNG se encuentra en una campaña para “devorar municipios en una estrategia de sangre y fuego”. Por eso, dijo, el Cártel Jalisco es la fuerza más importante, militarmente hablando.
- “En estos momentos, el cártel de El Mencho pelea en Tabasco contra La Barredora, en Chiapas contra el Cártel de Sinaloa, en Guanajuato contra el Cártel de Santa Rosa de Lima, en Michoacán contra Cárteles Unidos, en Zacatecas contra el Cártel de Sinaloa y en ciudades fronterizas con otros cárteles de esa zona. El Cártel Jalisco tiene varios frentes abiertos y eso explica por qué la mayoría de los asesinatos están relacionados con sus actividades”, destacó.
El Programa de Datos sobre Conflictos de la Universidad de Uppsala (UCDP) es uno de los principales proveedores de información sobre violencia organizada a escala global y es el proyecto de recopilación de datos más antiguo sobre guerras civiles, con más de 40 años de historia.
Según el UCDP, la mayoría de las muertes violencias con el sello del CJNG han ocurrido en la zona centro-occidente del país, principalmente en Guanajuato y Jalisco, con 60 mil 583 homicidios; le sigue la zona norte, con 15 mil 082 asesinatos, 90% de ellos en la ciudad de Tijuana; y la zona sur, con dos mil 118 casos.
El Cártel Jalisco es uno de los seis grupos que, en enero pasado, fueron catalogados como organizaciones terroristas por el gobierno del presidente estadounidense Donald Trump, clasificación que da a Washington el marco legal para emprender acciones de carácter militar.
- En su más reciente Evaluación Nacional sobre las Amenazas de las Drogas 2025, la Administración para el Control de las Drogas de Estados Unidos (DEA) describe al CJNG como “una de las organizaciones criminales transnacionales más poderosas, influyentes y despiadadas de México, además de ser un proveedor clave de fentanilo ilícito a Estados Unidos”.
El documento apunta que el cártel de El Mencho ha expandido sus operaciones más allá de las fronteras mexicanas, con presencia en más de 40 países.
“El cártel utiliza sus vastos recursos financieros, su singular estructura de mando basada en franquicias, su propensión a la violencia y su acceso a funcionarios corruptos para mantener y expandir su influencia sobre el narcotráfico en México”, continúa.
- Sobre a posibilidad de que el CJNG haga una alianza con la facción de Los Chapitos —enfrentando así a Los Mayos, el otro bando que disputa el control del Cártel de Sinaloa en estos momentos—, el reporte de la DEA alerta que “podría alterar significativamente el equilibrio existente de poder criminal en México y podría servir para aumentar el flujo de drogas hacia el norte y el tráfico de armas hacia el sur en la frontera entre Estados Unidos y México”.
Interrogado sobre la posibilidad de que la política de “abrazos, no balazos” aplicada por el presidente Andrés Manuel López Obrador haya contribuido a la campaña de exterminio emprendida por el CJNG, Saucedo responde:
“No. Yo creo que corrieron en paralelo, sin que necesariamente tuvieran alguna conexión. De hecho, la política de ‘abrazos, no balazos’ sólo se aplicó en la primera mitad del sexenio de Andrés Manuel López Obrador. Los norteamericanos terminaron por presionar al gobierno de México para que se reactivarán las extradiciones, los decomisos, las capturas de narcotraficantes de alto perfil. A regañadientes, si tú quieres, pero tuvieron que hacerlo”./Agencias-PUNTOporPUNTO