SALINAS PLIEGO en el ojo del huracán EMPRESARIADO-GOBIERNO

En la nueva relación del gobierno con los empresarios algo está cambiando

Se entiende el entusiasmo de Brenda Jaet, colaboradora de El Heraldo y de ADN 40, empresa esta última de TV Azteca, —y también se comprenden ciertas licencias casi poéticas que se da a sí misma— al hablar de uno de sus jefes, Benjamín Salinas, director de esa televisora e hijo del propietario, Ricardo Salinas Pliego.

Entusiasmo, licencias casi poéticas, ¡sin duda!, ¿o puede calificarse de otro modo lo que Brenda dice en El Heraldo de México: que Benjamín “no es junior ni heredero”? ¿No lo es? Respetable, y creo que es la verdad, que se dijera que este joven director de TV Azteca es muy serio y trabajador, a pesar de haber llegado a su cargo precisamente por ser heredero y hasta un junior. Pero, ¿negar su situación personal?

  • En fin, en su texto/entrevista, Brenda Jaet le ha preguntado a Benjamín Salinas por el torneo de golf de primer mundo que sus empresas “patrocinan” en México desde hace tres años. Dice la reportera: “Hubo un incremento en la bolsa del premio, es una de las más atractivas del PGA, ¿de cuánto estamos hablando?”.
  • Responde el joven empresario: “Sí, así es. Si no me equivoco estamos hablando de más de 10 mil dólares. Es un mundo de dinero, sobre todo si lo comparamos con las bolsas de otros torneos, que son de cuatro, cinco o seis”.
  • En realidad, hay un errata en la edición de la respuesta en El Heraldo. Los premios del WGC-Mexico Championship 2019 no fueron de más de 10 mil dólares, sino ¡de más de 10 millones de dólares! Sin duda, “un mundo de dinero”, como expresó el propio Benjamín.
  • Si los 10 millones de dólares —más el resto de los gastos del torneo— salieran íntegramente de los bolsillos de la familia Salinas o de las tesorerías de sus empresas, TV Azteca y Grupo Salinas, estaríamos hablando de una admirable, por desinteresada, promoción del golf en nuestro país de parte de empresarios a quienes apasiona este deporte.
  • Pero, en realidad, en TV Azteca, como en muchas otras empresas mexicanas, sus propietarios y directivos son expertos en promover proyectos de beneficio social de todo tipo, pero ¡financiados por el gobierno federal!
  • Se dice entre enterados que en las dos ediciones anteriores del PGA Tour mexicano, celebradas en los últimos años del sexenio de Enrique Peña Nieto, el gobierno apoyó el campeonato ¡con varios millones de dólares en cada edición! Hay quien asegura que la cifra llega a 15 millones de unidades de esa moneda. Sí, “un mundo de dinero”.
  • Este año, por lo que me cuentan, el gobierno mexicano ya no aportó absolutamente nada al torneo de golf de la familia Salinas Pliego, lo que seguramente pone en riesgo el campeonato de 2020. Como no había contrato que obligara al gobierno, la 4T simplemente no aportó el patrocinio. La Fórmula 1 y el juego de futbol americano en México tienen uno o dos años más de vida —hay contratos vigentes—, pero ya la administración de AMLO anunció que tales eventos tendrán que ser financiados íntegramente por la IP, algo que no ocurrirá.
  • Según Proceso, Ricardo Salinas podría ser el empresario favorito del presidente López Obrador porque su institución financiera, Banco Azteca, será utilizada para llevar al pueblo los programas sociales. (Al respecto, en su edición de esta semana, la revista publica una carta de réplica de Salinas Pliego a dicho reportaje, señalando que nada a lo que Proceso habría aludido con respecto a su grupo empresarial ha tenido un carácter ilegal o poco ético).

En todo caso, ¡qué bueno, ese banco prestará un servicio más que necesario, como seguramente también lo harán otros bancos! Y, es un hecho, TV Azteca seguirá siendo contratada por el gobierno para difundir publicidad oficial. Pero de que hay un cambio en la relación empresas/gobierno, lo hay: antes Televisión Azteca vendía publicidad al gobierno y hacía otros negocios útiles para el Estado, pero adicionalmente saludaba con sombrero ajeno: organizaba campeontos de golf con dinero público y hasta patrocinaba orquestas juveniles con aportaciones del erario.

  • Eso se acabó. En una mañanera, específicamente le preguntaron a AMLO si el gobierno continuaría apoyando con recursos a la Fundación Azteca —que presidió el actual secretario de Educación, Esteban Moctezuma—, y la respuesta del presidente de México fue contundente: eso ya no.
  • sea que ni orquestas ni campeonatos mundiales de golf. Ni nada de pagar ese tipo de proyectos promovidos por otras empresas, esto es, ni carreras de coches ni partidos de americano en nuestro país financiados con dinero público. En la nueva relación del gobierno con los empresarios algo está cambiando para bien. Hay que celebrarlo. Pero también —por otras razones— algo ha cambiado para mal, hay que corregirlo.

En siguientes artículos continuaremos con el tema de la relación empresariado-gobierno. Se vienen tiempos difíciles; una tormenta de considerable magnitud./SDP-PUNTOporPUNTO

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