México rehuye a cumbre sobre drogas

Desde hace dos décadas México sobresale en el ámbito mundial por la producción y el tráfico de drogas. Lamentablemente las referencias internacionales ubican a nuestro país como un paraíso del narcotráfico y mucho gracias a su cercanía con los Estados Unidos, el mayor consumidor de enervantes.
Sin embargo, también destaca la indiferencia de nuestros gobernantes que no terminan de entender que la guerra contra las drogas se perdió hace mucho tiempo, y vivimos la cosecha de ineptitudes y corruptelas federales, estatales y municipales.
Hoy la cereza del pastel en este tema es la negativa del presidente Enrique Peña Nieto para participar en la Cumbre contra las Drogas en Nueva York en los próximos días, una actitud que denota el poco interés del gobierno para encontrar soluciones al tema. En el encuentro, los países miembros de la ONU definirán la política global de combate al narcotráfico.
Antes de la gira a Europa, la Presidencia de la República dio a conocer que el presidente canceló su asistencia a la cumbre que se llevará a cabo los días 16 y 17 de este mes, y fuentes de Los Pinos argumentaron razones de agenda.
El gobierno mexicano toma esta decisión equivocada, cuando fue el propio presidente Peña Nieto junto a los jefes de Estado de Colombia y Guatemala, quienes promovieron dicha cumbre. Es más, hasta pidieron que se adelantara por lo urgente del tema.
Aún no se ha explicado bien a bien este cambio de idea, pero seguramente el primer mandatario pretende rehuir a un escenario inminente que forma parte de la conclusión de los recientes foros en torno a la problemática de las drogas: la despenalización de la mariguana.
Fuentes de seguridad nacional nos dicen que la decisión de enviar a la canciller Claudia Ruiz Massieu a tan importante evento, obedece a que no lograron ponerse de acuerdo sobre qué conclusión exponer ante los líderes mundiales.
De estos encuentros podemos asegurar que hay consenso a favor de legalizar la mariguana médica o terapéutica, que hay voces mayoritarias a favor de un aumento del gramaje de 5 a 28 gramos de posesión para consumo personal, además de una generalizada excarcelación de aquellos arrestados por portación y hasta de la posible autorización de la producción del enervante para fines médicos.
Mexico no quiere ir con esta conclusión a ese importante foro, por lo que se espera que la exposición de la canciller mexicana sea intrascendente y que pase sin pena ni gloria, ya que es un secreto a voces que luego de que hablan en esa tribuna jefes de Estado, a los cancilleres nadie les hace caso.
¿A qué apuesta el gobierno de México con esta postura? A que pase el tiempo y el tema se diluya. Seguramente en el gobierno ya analizaron los costos políticos de impulsar una legalización de la mariguana en territorio mexicano, y no les favorece.
Ni hablar. El presidente Enrique Peña Nieto tuvo la oportunidad de pasar a la historia como el mandatario que tomó el toro por los cuernos para dar un duro golpe al tráfico de drogas, pero prefirió huir.
PARA EL REGISTRO Dice la Comisión Nacional de los Derechos Humanos que la fuga de Joaquín Guzmán Loera y la muerte de más de 40 reos en el penal de Topo Chico, en Nuevo León, exponen carencias en penales.. ¿en serio? ¿y apenas se dan cuenta? Por Dios. Gracias.
 
 
@betata75

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