COMPLOT para descarrilar a AMLO se llamó OPERACIÓN BERLÍN

Testimonios y documentos señalan a Agustín Coppel, Alejandro Ramírez y Germán Larrea como los que financiaron la campaña de desprestigio

“¡Pauten sin miedo, carajo!”, se escuchó en la oficina la voz de un hombre joven, una exclamación profusa e impaciente que retumbó por toda la casa. La queja provenía de Ricardo Rojo, coordinador de un grupo de jóvenes a quienes les encargó producir a destajo memes, videos y mensajes para intentar desvirtuar la imagen del entonces candidato a la Presidencia de la República, Andrés Manuel López Obrador.

  • “¡El dinero no es de ustedes, así que métanle!”, gritó nuevamente Rojo, acompañando ahora la instrucción con un furioso puñetazo en la mesa, relató uno de los presentes.
  • Rojo se había irritado al saber que su brigada de trolls —quienes hasta ese momento habían pagado seis mil pesos, a lo más, por cada posteo que deseaban viralizar en las redes para debilitar la campaña del tabasqueño, que ya aparecía como puntero en la mayoría de las encuestas— no prosperaba.
  • “Recuerden —dijo Rojo a los jóvenes antes de marcharse—: Tenemos presupuesto ilimitado”, recordó la fuente.
  • A partir de ese momento, el equipo de Rojo llegó a pagar hasta 50 mil pesos por cada mensaje en Facebook, Twitter e Instagram que resaltara una mala mueca de López Obrador, un arranque contra algún adversario, un exabrupto de alguno de sus colaboradores o una liga de una noticia falsa, describió el informante.
  • En ese paquete entraron, por ejemplo, las millonarias propiedades que le achacaban, sus supuestos nexos con Nicolás Maduro o sus presumibles vínculos con el narcotráfico. Todos, temas construidos por ellos mismos.
  • Uno de los integrantes de ese equipo —a quien llamaremos Miguel Ángel para conservar su anonimato— además de su testimonio mostró a este semanario recibos de nómina, fotografías, correos electrónicos y mensajes que permiten reconstruir distintos momentos de los 18 meses que trabajó este grupo, el cual tenía el objetivo de mostrar la peor cara de López Obrador y así incidir en la elección presidencial.

ejecentral hizo contacto con las personas mencionadas en la trama antiAMLO para conocer su punto de vista y ejercer su derecho de réplica. Los que respondieron fueron las empresas Coppel y Grupo México, cuyos representantes dijeron que se abstendrían de opinar.

  • Los intelectuales Enrique Krauze y Fernando García Ramírez también contestaron a este medio y rechazaron haber participado en el plan.
  • Lo mismo pasó con el empresario Ricardo Rojo, la exaspirante presidencial por la vía independiente, Margarita Zavala, el empresario Alejandro Ramírez Magaña, de Cinépolis, quienes negaron estar implicados. Al cierre de esta edición no había contestado el exdiputado panista Jesús Ramón Rojo Mancillas.
  • Aunque el nombre Germán Martínez aparece como parte de la confabulación, el ahora director del IMSS asegura que no tuvo nada qué ver.

Autores intelectuales

  • Miguel Ángel contó que a mediados de 2016, dos años antes de las elecciones presidenciales, un grupo de empresarios e intelectuales se pusieron de acuerdo para lanzar una campaña negativa contra Andrés Manuel López Obrador, quien era entonces presidente del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) y figuraba como el único candidato que, con seguridad, aparecería en la boleta electoral.
  • Francisco Agustín Coppel Luken, presidente y director general de Grupo Coppel; Alejandro Ramírez Magaña, director general de Cinépolis y entonces presidente del Consejo Mexicano de Negocios, y Germán Larrea Mota-Velasco, presidente del Consejo de Administración de Grupo México, proveyeron los recursos para financiar la campaña contra el tabasqueño, informó Miguel Ángel, quien tuvo acceso cotidiano a las reuniones de planeación y elaboró contenidos que él mismo califica como perniciosos contra López Obrador y sus colaboradores.
  • La fuente mostró a este periódico conversaciones por chat donde recibía las instrucciones de los adversarios del aspirante morenista, además de documentos, entre ellos los recibos que la empresa Coppel le expidió por el pago de sus servicios, los cuales contienen todos los datos fiscales de la empresa.
  • Miguel Ángel reveló que los encargados de concebir sitios de internet y perfiles de Facebook como Populismo Autoritario, Napoleopez y Prensa México —todos ellos con tratamientos adversos al hoy Presidente de la República—, así como de reclutar al personal que elaboraría los materiales, fueron el historiador Enrique Krauze, director de la revista Letras Libres y de Editorial Clío, y el crítico literario Fernando García Ramírez, brazo derecho de Krauze, cercano al empresario Coppel y actual columnista del diario El Financiero.
  • Para echar a andar la estrategia que buscaba descarrilar las aspiraciones de López Obrador se habilitó como centro de operaciones la casa ubicada en la calle de Berlín, número 245, en la colonia Del Carmen, alcaldía de Coyoacán, en la Ciudad de México, aunque también había células trabajando en Guadalajara, Jalisco.
  • Miguel Ángel dijo a ejecentral que los empresarios que patrocinaban el plan y Enrique Krauze jamás pisaron la sede de Berlín, pero sostenían reuniones mensuales en unas oficinas localizadas en Santa Fe, al poniente de la Ciudad de México.
  • Los nombres aportados por Miguel Ángel coinciden con los consignados por Tatiana Clouthier en su libro Juntos Hicimos Historia, en el que revela los resultados de sus propias investigaciones sobre el origen de la página PejeLeaks.org y la campaña cibernética contra López Obrador.

El diseño digital

La operación digital se preparó desde diciembre de 2016, pero vio la luz el 23 de marzo de 2017, cuando se lanzó el primer perfil antiAMLO en Facebook, “Napoleopez”, y a partir de entonces surgió el resto.

  • La fuente narró que Fernando García Ramírez tenía bajo sus órdenes a tres colaboradores que fueron cuidadosamente seleccionados. Sus labores esenciales eran monitorear diariamente y en todo momento las noticias sobre López Obrador, concebir informes que quebrantaran la reputación del tabasqueño y su equipo; así como elaborar guiones para que la granja de trolls los difundieran diariamente por plataformas digitales.
  • De manera paralela, relató Miguel Ángel, Agustín Coppel le encargó a Jesús Ramón Rojo Mancillas, exdiputado panista, coordinar los esfuerzos para integrar un equipo de expertos en internet que pudieran generar productos viralizables y, de esa manera, detonar una opinión desfavorable para el actual jefe del Ejecutivo federal.
  • “Si la estrategia requiere denostar sistemáticamente al líder de Morena —le ordenó Coppel a Rojo Mancillas— entonces eso haremos”, contó la fuente.
  • Para que la maniobra llegara a buen puerto, dijo Miguel Ángel, Rojo Mancillas convocó a Ricardo Rojo, quien puso al servicio del proyecto la experiencia y el personal de su empresa, Expertaria, la cual dice especializarse en “monitoreo, análisis y estrategias de comunicación en redes sociales”. Dicha agencia sería la encargada de pagar los sueldos a la rama cibernética del proyecto antiAMLO.

Todos, tanto los intelectuales reclutados por García Ramírez como los trolls de Ricardo Rojo, trabajaron cubriendo turnos matutinos y vespertinos en la casa de Berlín entre noviembre de 2016 y hasta marzo de 2018. “Hubo ocasiones en que se trabajó de noche”, detalló Miguel Ángel. Posteriormente, García Ramírez y sus tres subordinados salieron del domicilio para tener juntas itinerantes en cafés o, incluso, en la propia casa del crítico literario, ubicada también en la alcaldía de Coyoacán.

El motivo de que ya no se presentaran esos personajes clave en la casa de Coyoacán, fue la renuncia de Germán Martínez Cázares al PAN —ocurrida en marzo de 2018— y su posterior adhesión a la campaña de López Obrador. El temor de los conspiradores, dijo la fuente, era que Martínez Cázares delatara la operación contra AMLO.

  • Miguel Ángel aseguró que Germán Martínez y Margarita Zavala —quien al principio había manifestado su interés de competir por la candidatura del PAN rumbo a los comicios presidenciales de 2018— llegaron a reunirse con los empresarios e intelectuales, apoyando incluso la maniobra para minar la imagen del hoy mandatario.
  • “Si Germán abre la boca y nos delata, nosotros tenemos cómo demostrar que a él también le pagó Coppel por sus servicios”, dijo García Ramírez para tranquilizar a sus colaboradores, contó la fuente.
  • Germán Martínez sí reconoce que asistió a la casa de Berlín, pero por invitación de compañeros panistas, quienes preparaban la campaña contra Delfina Gómez, candidata de Morena al gobierno del estado de México y rival de la panista Josefina Vázquez Mota. Sin embargo, Germán Martínez aseguró que se enfrentó con  varios de sus correligionarios, se alejó, y nunca se enteró de una operación antiAMLO.

La cita con Krauze

Los intelectuales de “alto rendimiento” que se encargarían de investigar a López Obrador y confeccionar los temas que infundirían miedo entre los ciudadanos contaron con el visto bueno de Krauze.

  • El historiador —acompañado siempre por el crítico literario— ya había hecho un ejercicio similar en las elecciones de 2006, con el proyecto Lupa Ciudadana, que sometía al análisis de especialistas la viabilidad de las propuestas de los candidatos a la Presidencia de la República, entre ellos López Obrador. “En aquella época cometieron una imprudencia: trabajaban en las instalaciones de Letras Libres. Esta vez no sería así. No querían exponerse ni dejar rastros”, detalló la fuente.
  • La cita con Miguel Ángel ocurrió el jueves 3 de noviembre de 2016, a las 18:00 horas, en el restaurante Maison Kayser, ubicado en el Centro Comercial Oasis, en Coyoacán. Faltaba un año para el destape formal de los candidatos a la Presidencia de la República. Era buen tiempo para comenzar a preparar “la función”, como solían llamarle.
  • El director de Letras Libres vestía pantalón de gabardina, saco negro y una camisa de cuello alto. García Ramírez, quien no dejaba de mover las manos frenéticamente, portaba un suéter café, pantalón color caqui y llevaba en la mano un dispositivo Kindle.
  • El historiador habló sobre liberalismo político y económico. Intercambiaron puntos de vista sobre la novela El Zarco de Ignacio Manuel Altamirano; así como de las aportaciones intelectuales de Emilio Uranga como ideólogo del PRI. “Glosó profusamente a Daniel Cosío Villegas y a Gabriel Zaid”, describió el que sería uno de sus empleados en la operación contra López Obrador. Así pasaron algunos minutos, hasta que, finalmente, hablaron de política y la carrera hacia el 2018.
  • “¿A quiénes ves en el escenario?”, le preguntó a rajatabla el historiador al futuro recluta. “Le respondí que probablemente Miguel Ángel Osorio Chong, Aurelio Nuño, Margarita Zavala y, desde luego, López Obrador”, relató la fuente.
  • Al escuchar el nombre del político tabasqueño, Krauze inhaló profundamente. Sin ocultar su desencanto por el tabasqueño, con su voz gruesa, preguntó: “¿Qué piensas de López Obrador?” Para ese momento, Miguel Ángel ignoraba que se encontraba en medio de un examen, el cual definiría si tenía potencial para convertirse en una especie de mercenario de la propaganda política, sino que albergaba la falsa expectativa de formar parte de las filas de Letras Libres e incursionar en proyectos editoriales o de investigación.

Con tal de congraciarse con el empresario cultural, describió la fuente, retomó algunos juicios que Krauze había planteado en su famoso ensayo “El mesías tropical”, por lo que calificó a López Obrador de megalómano y obsesionado con el poder. “Sabía que el escritor había demonizado al personaje y que le gustaba el sensacionalismo biográfico”, explicó.

  • La empatía de Krauze surgió de inmediato. “No podemos permitir que López Obrador llegue a la Presidencia”, soltó. Agregó que “la democracia liberal estaba atravesando por una severa crisis” y que “un político intolerante y explosivo no podía colarse a la Presidencia de la República”. Y repitió varias veces su eslogan de batalla: “Andrés Manuel es un peligro para México”.
  • Antes de terminar la charla, Krauze le comentó al examinado que estaban buscando formar un grupo de intelectuales de “alto rendimiento” para un trabajo editorial que sería intenso durante los meses por venir. “Me preguntó que si deseaba incorporarme. Y yo, emocionado y pensando que me sumaría a sus huestes intelectuales, le respondí que sí”, detalló. Después se reuniría con García Ramírez, que sería su jefe durante los siguientes 18 meses.
  • Testimonios y documentos señalan a Agustín Coppel, Alejandro Ramírez y Germán Larrea como los que financiaron una campaña ideada y operada por un grupo que encabezaron Enrique Krauze y Fernando García Ramírez, para intentar descarrilar la candidatura de López Obrador/EJE CENTRAL-PUNTOporPUNTO

Reportaje Completo en el Enlace:

http://www.ejecentral.com.mx/operacion-berlin-conjura-antiamlo/

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