En el cumplimiento de las directrices emitidas por el Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación (INEE) para fortalecer la educación de niños y adolescentes jornaleros agrícolas migrantes e indígenas, y la formación inicial de docentes, el esfuerzo realizado por las autoridades educativas “ha sido insuficiente para atender los rezagos y vacíos” que enfrentan los grupos de mayor vulnerabilidad social. Entre las deficiencias detectadas en un informe de seguimiento a su implementación tanto por la Secretaría de Educación Pública (SEP) como por las entidades, se destaca la falta de articulación de acciones entre autoridades federales y locales, nulo incremento de presupuesto y un mayor énfasis en cumplir determinados ejes de las directrices frente a otros que representan mayores desafíos./ LA JORNADA

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