LatinoAMÉRICA con desafíos para implementar REDUCCIÓN de la Jornada LABORAL x SubEMPLEO

"El plan México tiene el objetivo de inversión del PIB de 28 por ciento para 2030. Lo que estamos viendo es que necesitamos más inversión para que las empresas y los trabajadores seamos más productivos. Necesitamos que el sector privado participe con 4 puntos porcentuales más de inversión. Mantengamos en mente que necesitamos mayor inversión para ser más productivos"

Mientras países como Islandia, España y Japón implementan modelos de jornadas reducidas con éxito, América Latina enfrenta un desafío doble: adaptar estas tendencias a realidades marcadas por la informalidad laboral, la brecha tecnológica y culturas empresariales arraigadas en el presentismo.​

  • En Colombia, la Ley 2154 de 2023, que reduce gradualmente la jornada laboral de 48 a 42 horas semanales para 2026, ha reavivado la discusión.

¿Está la región preparada para este cambio?

  • Los resultados de experimentos globales ofrecen un panorama alentador. Entre 2022 y 2023, el piloto más grande del mundo, coordinado por 4 Day Week Global en Reino Unido, demostró que el 92% de las empresas participantes mantuvieron la modalidad de cuatro días tras observar mejoras del 35% en ingresos y una caída del 71% en niveles de estrés laboral.

Una reforma adversa al sector productivo como generador de empleo Islandia, pionera desde 2015, redujo su jornada a 35-36 horas semanales sin afectar la producción, según el centro de investigación Autonomy.

  • «Estos modelos no son una moda, sino una respuesta al agotamiento crónico y a la necesidad de humanizar el trabajo», explica Alejandro Arévalo, cofundador de T-Mapp, una empresa colombiana especializada en reclutamiento y selección de talento ejecutivo y gerencial, fundada en 2020 por Alejandro Arévalo, Andrés Díaz-Granados y Pablo de Sagarminaga.

En América Latina, el avance es desigual pero prometedor

Chile aprobó en 2023 reducir su jornada de 45 a 40 horas, México debate una propuesta similar, y Colombia avanza hacia las 42 horas. Sin embargo, el reto trasciende lo legislativo.

  • Según la Organización Internacional del Trabajo (OIT), la región tiene la mayor tasa de informalidad laboral del mundo (56.3% en 2024), un obstáculo para replicar modelos europeos.
  • «En países como Colombia, donde el 57.6% del empleo es informal, reducir horas sin garantizar salarios justos podría profundizar desigualdades», advierte el cofundador de T-Mapp.
  • Los beneficios potenciales son significativos. Latinoamérica lidera los índices globales de estrés laboral, según Gallup, y en Colombia, el 68% de los trabajadores urbanos reportó fatiga crónica en 2024.

Jornadas más cortas no solo mejorarían la salud mental, sino que podrían redistribuir el trabajo no remunerado (las mujeres dedican 4.1 horas diarias más que los hombres al cuidado del hogar, según la CEPAL) y combatir el «presentismo», un lastre que el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) vincula con la baja productividad regional.

«Un colombiano trabaja 1.200 horas anuales más que un alemán, pero produce tres veces menos», agrega Arévalo. Pero las barreras persisten.

El 52% de las pymes en Colombia considera viable la reducción horaria, según la Andi, pero sectores como manufactura y retail dependen de horas físicas, y solo el 34% de las empresas cuenta con herramientas digitales para gestionar teletrabajo, según el Ministerio de las TIC.

  • «Sin inversión en automatización y formación, muchas compañías no podrán adaptarse», insiste el cofundador de T-Mapp. El camino hacia una jornada más corta requiere más que leyes.
  • Chile, por ejemplo, diseñó subsidios estatales para mitigar costos empresariales, mientras en Colombia, el Ministerio de Trabajo promueve diálogos tripartitos para ajustar salarios y capacitar en gestión por objetivos.

Para las nuevas generaciones, la flexibilidad ya no es negociable: el 78% de los jóvenes colombianos prefiere horarios adaptables sobre salarios altos, según Randstad.

  • «Las empresas que no escuchen este llamado quedarán vacías. En T-Mapp, por ejemplo, el 60% de nuestro talento es menor de 35 años, y priorizamos resultados sobre horarios», concluye Arévalo.

La pregunta ya no es si América Latina debe reducir su jornada laboral, sino cómo hacerlo sin dejar a nadie atrás, plantea la firma.

  • La respuesta a ese cuestionamiento es que «con innovación, políticas inclusivas y una mirada audaz, la región podría convertir este debate en una oportunidad histórica: trabajar mejor, vivir mejor».

Estos son los países que tienen la mayor cantidad de horas laborales

A partir del próximo 15 de julio de 2025, la jornada de trabajo en Colombia pasará de 46 a 44 horas a la semana, en línea con la implementación de la Ley 2101 de 2021. La normativa busca una reducción gradual de las horas laboradas cada semana hasta alcanzar las 42 durante el próximo año.

  • En la región hay nueve países que comparten 48 horas laborales a la semana por ley: se trata de las jornadas más altas de América Latina. Las economías son Argentina, Bolivia, Costa Rica, México, Nicaragua, Panamá, Paraguay, Perú y Uruguay.
  • Colombia sigue en la lista con 46 horas en la actualidad, aunque ocupará un lugar más abajo en el ranking a partir de julio. Guatemala tiene 45 horas por ley a la semana para trabajar.

A continuación siguen las economías de la región con 44 horas de trabajo: Brasil, Chile, Cuba, República Dominicana, El Salvador, Honduras, Venezuela y Ecuador.

  • Alejandro Espitia, docente de Macroeconomía de la Universidad Javeriana, asegura que reducir la jornada laboral en un país como Colombia es aumentar los costos y “enviar empleados que están en la formalidad a la informalidad o al desempleo”.

El experto considera que se mejorarían las condiciones laborales para unos pocos, pero empeora para otros que no conseguirán un trabajo formal.

“Estas reducciones son controles de precios sobre el salario. Es impedirle a alguien que está dispuesto a trabajar por x horas que no lo haga e imponer unos costos adicionales”, dijo.

  • La reducción de la jornada en Colombia inició en 2023 y partió de 47 horas semanales; en 2024, siguió a 46; este año llegará a 44 y el próximo finalizará 42. Se trata de una norma que aplica para los trabajadores regidos por el Código Sustantivo del Trabajo y excluye a los servidores públicos y empleados que tienen contratación especial.
  • Espitia asegura que la reducción resulta inviable pero no por los grandes empresarios. “Ellos pueden cubrir los costos, con automatización o elevando los costos a los consumidores. Los pequeños empresarios podrían tener problemas para cubrir los precios y, sobre todo, para las personas sin empleo”, dijo.

Camilo Cuervo, socio de la unidad laboral de Holland & Knight, aseguró que Colombia tendrá una de las jornadas laborales más bajas de América Latina, sumado a los 18 festivos, dos días de la familia y unas de las tarifas de recargo más altas de Latinoamérica.

“Comparado con otros países, nosotros estamos sustancialmente mejor, así el discurso diga lo contrario”, dijo el experto.

Venezuela la redujo

  • Venezuela anunció a inicios de mayo que extendería la reducción de la jornada laboral para entes públicos. Delcy Rodríguez, vicepresidente ejecutiva, aseguró que extenderá hasta por dos semanas la medida mientras se mitigan los efectos de la crisis climática.
  • Es importante recordar que la reducción de la jornada anunciada por el gobierno de Nicolás Maduro fue decretada el pasado 23 de marzo por un lapso de seis semanas, a causa de la sequía que estaba afectando el nivel de los embalses en el país.

La oposición manifestó su rechazo ante la medida y aseguró que la solución no estaba en trabajar menos, sino en reconocer las dudosas elecciones del pasado 28 de julio en las que resultó ganador Nicolás Maduro. Se espera que solo sea una decisión transitoria.

  • Cuervo asegura que la productividad de los países es relativa en las jornadas laborales de la región. Explicó que la producción no es un “término objetivo”, sino que tiene diferentes formas de medición en términos de cada industria y actividad.
  • “La productividad es un concepto que, en principio, es hacer las cosas en el menor tiempo posible. Sin embargo, los estudios muestran que Colombia es un país que trabaja mucho en términos de tiempo, pero no necesariamente es eficiente en producción”, dijo.

Cifras de Statista arrojan cuáles son las economías de América Latina que trabajan menos horas. Panamá, Argentina y Uruguay son las naciones con menos horas laboradas, con un promedio de 36,2, 37 y 37, respectivamente. Se debe tener presente que este indicador es diferente al de las horas establecidas por ley.

La productividad es mayor en latitudes como Bolivia, Ecuador y Venezuela, donde el indicador de trabajo semanal real está en 38, 38,4 y 38,7, respectivamente. Guatemala, Colombia y México son las naciones en las que más horas se destinan al desempeño de sus labores, con 45,3, 44,2 y 43,7.

¿En qué países se aplica y cómo sigue la situación en México?

Dado que los índices de empleo y las leyes que rigen esta actividad impactan directamente en la economía, son pocos los países en América Latina que cuentan con el derecho de una jornada laboral de 40 horas garantizado por la ley.

  • En contraste con lo que sucede en Europa o el norte de Asia, donde la tendencia en muchos países es reducir la jornada a 40 horas, en la región latinoamericana son apenas dos los países que ya cuentan con una legislación al respecto.
  • En la mayoría de los países de América Latina, la jornada laboral es de 48 horas a la semana, pero en economías como Ecuador, Chile y algunas islas del Caribe ya se cuenta con límites de 40 horas semanales, algo a lo que México aspira.

Recientemente Chile se sumó a Ecuador, y otras ínsulas, como los países con la jornada semanal más corta en América Latina y el Caribe, ambos con un límite de 40 horas por semana.

El único territorio en la región con una jornada inferior a las 40 horas es Guyana Francesa, pero esto se debe a que, de facto, es una región francesa de ultramar.

En suma, éstos son los países en la región que tienen una jornada de trabajo legal menor a 48 horas a la semana:

  • Belice: 45 horas
  • Guatemala: 44 horas
  • El Salvador: 44 horas
  • Honduras: 44 horas
  • Cuba: 44 horas
  • República Dominicana: 44 horas
  • Brasil: 44 horas
  • Venezuela: 44 horas
  • Colombia: 42 horas
  • Chile: 40 horas
  • Ecuador: 40 horas
  • Trinidad y Tobago: 40 horas
  • Bahamas: 40 horas

¿Cómo va la jornada de 40 horas en México?

México continua en el camino de la reducción de la jornada laboral, aunque las últimas propuestas han venido acompañadas de un elemento importante: la gradualidad en la disminución de las horas de trabajo. Esto significa que, año por año, la jornada se irá reduciendo hasta llegar a las 40 horas.

  • En la Cámara de Diputados se suman cinco proyectos de reforma constitucional que buscan establecer dos días de descanso por cada cinco de trabajo; en términos prácticos, una disminución de 48 a 40 horas en la semana laboral.
  • Este jueves 19 de junio, en punto de las 9:45 de la mañana, el Museo de la Ciudad de México abrió sus puertas al primero de los seis foros regionales organizados por la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS) como parte del proceso participativo para implementar la reforma laboral que reduciría la jornada semanal de 48 a 40 horas.
  • La iniciativa forma parte de un plan de implementación gradual anunciado por el gobierno federal, que se llevará a cabo del 19 de junio al 7 de julio, y que busca recabar opiniones y propuestas de diversos sectores para definir la medida en todo el país.

¿Qué estados ya están en discusión?

  • Aunque actualmente la capital del país es la primera demarcación en discutir dicho tema, el siguiente foro se llevará a cabo el 23 de junio en Monterrey, Nuevo León, una de las zonas industriales más importantes del norte del país.
  • Posteriormente, el 26 de junio, la discusión llegará al occidente, con una sede en Guadalajara, Jalisco, donde se espera una amplia participación del sector tecnológico y académico.

El 30 de junio, el turno será para el noroeste, con un foro en Tijuana, Baja California, una ciudad fronteriza clave en el panorama laboral y comercial.

  • Ya en el mes de julio, el 3 de julio se realizará un foro en Querétaro. Finalmente, el ciclo cerrará el 7 de julio en Cancún, Quintana Roo, donde se incorporarán perspectivas del sector turístico.

¿Cómo se originó la propuesta?

La propuesta de reducir la jornada laboral en México surgió en 2023, cuando la diputada Susana Prieto Terrazas presentó ante la Cámara de Diputados una iniciativa para establecer una semana laboral de 40 horas con dos días de descanso obligatorio, sin embargo, no fue votada entonces.

  • En 2024, Movimiento Ciudadano presentó una alternativa de aplicación gradual y, para 2025, ya se habían registrado al menos seis iniciativas diferentes en el Congreso, lo cual reflejó la necesidad de ajustar la legislación laboral a los estándares internacionales.
  • El anuncio definitivo llegó en mayo de 2025, cuando el gobierno federal, en el marco del Día del Trabajo, presentó formalmente el plan de reforma para reducir progresivamente la jornada laboral hasta llegar a las 40 horas en el año 2030.

El secretario del Trabajo y Previsión Social, Marath Bolaños López, subrayó que la reforma busca más que una simple modificación legal, pues “reducir la jornada laboral es reconocer que el bienestar no puede depender únicamente del ingreso, sino también del tiempo disponible para la vida, la familia, el descanso, la salud y la participación comunitaria”.

Beneficios y desafíos de la reforma

Bolaños López destacó que México está en condiciones para avanzar en este cambio estructural, “gracias a su estabilidad económica, un mercado laboral en crecimiento y un renovado marco de derechos laborales”, por lo que la participación ciudadana en los foros mencionados será clave para definir los mecanismos de implementación que mejor se adapten a las condiciones de cada región y sector productivo.

  • Al respecto, un estudio del centro de investigación, opinión y divulgación del Grupo Adecco recuperó datos de la encuesta Termómetro Laboral de OCC, en la que se reveló que el 68% de los trabajadores mexicanos espera beneficios directos de una jornada más corta, entre los que destacan mejor salud mental, reducción del estrés y más tiempo para el ocio y la vida familiar.
  • Sin embargo, el Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP) advierte sobre posibles impactos en el corto plazo, especialmente para las micro, pequeñas y medianas empresas (MiPyMEs), que representan el 96% del aparato productivo nacional.

De acuerdo con su análisis, estas podrían enfrentar un aumento de hasta el 36% en sus costos laborales si optan por pagar horas extras, o del 22% si contratan nuevo personal para cubrir las mismas tareas.

  • Desde el gobierno federal, esta reforma laboral se presenta como un intento de justicia social bajo la administración de la presidenta Claudia Sheinbaum. “Es apostar por una economía que valore el tiempo de las personas, sus familias y su salud. Es, en última instancia, avanzar hacia un país más democrático, donde el desarrollo no sea privilegio, sino un derecho compartido”, afirmó.

Informalidad y reducción laboral, un reto para los negocios en México

La Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio, Servicios y Turismo (CONCANACO SERVYTUR) y Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (CANACINTRA), impulsan la transición hacia un modelo laboral más humano y sostenible, como plantea el Gobierno de México dentro del Plan México. Este proceso debe considerar la realidad operativa de las micro, pequeñas y medianas empresas familiares del país, asegurando que su funcionamiento y competitividad no se vean comprometidos.

  • El comercio, los servicios y el turismo, representados por CONCANACO SERVYTUR, generan 65 de cada 100 empleos formales, mientras que la industria manufacturera, impulsada por CANACINTRA, tiene el 29% de su sector, que se traduce en un 5% del empleo formal en el país.
  • Juntos, representamos el 70% del empleo formal en México, y somos el motor de la economía nacional, sosteniendo el desarrollo de millones de familias a través de empleadores de todos los tamaños.
  • La reducción de la jornada laboral puede representar un avance, pero si se aplica de manera uniforme y sin considerar la diversidad de los sectores —primario, secundario y terciario— el tamaño de los negocios y empresas, podría comprometer la estabilidad de los negocios y el sustento de quienes dependen de ellos.

Por unanimidad, los Consejeros Nacionales de CONCANACO SERVYTUR presentes en la reunión de Consejo Nacional, celebrada el 21 de mayo de 2025, y el Consejo Directivo de CANACINTRA, de acuerdo con la Ley de Cámaras Empresariales y sus Confederaciones, evaluaron las expresiones que integran las voces de personas empresarias, dueñas de negocios familiares e industriales de todo el país que participaron en la Encuesta Jornada Laboral 2025.

La encuesta aplicada por CONCANACO SERVYTUR y CANACINTRA a través de las Cámaras Confederadas en todo el Territorio nacional revela datos clave:

  • 64% de personas dueñas de negocios y empresas, considera inviable una reducción inmediata de 48 a 40 horas sin afectar su operación.
  • 71.4% señala que tendrá aumento en los costos operativos aun cuando fuera paulatina.
  • 58.85% tendrá dificultades para cubrir turnos o mantener el mismo nivel de servicio.
  • Las principales preocupaciones son el aumento de costos laborales incluyendo los impuestos, la afectación a la atención al cliente y la posible pérdida de empleos.

Desde nuestra organización cúpula, enfatizamos que no todas las actividades pueden adoptar el mismo esquema laboral; no es lo mismo una planta manufacturera con turnos, que un restaurante con 50 personas trabajadoras, una tienda de barrio o un pequeño hotel, con atención extendida al público que emplea de 1 a 10 personas.

Para lograr una implementación equilibrada y sostenible, proponemos tres ejes clave:

  1. Gradualidad sectorial hacia 2030, con criterios definidos según el sector, el tamaño de la empresa y la ubicación geográfica, para la cual definitivamente no está preparado el sector de comercio, servicios y turismo, que para salir adelante abre todos los días sus cortinas y atiende al público en general.
  2. Incentivos a la formalidad, fomentando la regularización de empresas familiares con esquemas de apoyo financiero, fiscal, tecnológico; hoy en día el 55% de la economía laboral se encuentra en la informalidad, lo que es preocupante porque esta condición de acuerdo con la OIT es sinónimo de pobreza.
  3. Creación de un Observatorio de Transición Laboral, con participación tripartita para evaluar y ajustar la implementación con base en evidencia real.

La prosperidad compartida no se logra con un calendario único, sino con políticas que entiendan las diferencias entre sectores y regiones. Plan México lo dice claro: nadie debe quedarse atrás. Por eso, necesitamos una transición que apoye a quienes ya operan al límite.

Para que la reducción de la jornada laboral sea viable, debe acompañarse de medidas complementarias que impulsen la competitividad y el crecimiento de las micro, pequeñas y medianas empresas familiares. Entre ellas destacan el acceso a financiamiento, subsidios al empleo, reducción de impuestos, capacitación, simplificación administrativa y fortalecimiento del comercio local.

Plan México propone empleos dignos, pero también sostenibles. Para lograrlo, la reducción de la jornada debe acompañarse de políticas que fortalezcan a los negocios familiares.

Reducción de la jornada laboral elevará la informalidad en México

Durante su participación en el Foro para la Implementación de la Semana Laboral de 40 Horas, Vicente Gutiérrez Camposeco, presidente de la Cámara Nacional de Comercio, Servicios y Turismo de la Ciudad de México (Canaco CDMX), lanzó una fuerte advertencia sobre los efectos que podría tener esta reforma a la jornada laboral a las pequeñas y medianas empresa Pymes.

  • El líder empresarial señaló que, de aprobarse la reforma tal como está planteada, la informalidad laboral podría dispararse del 55% al 65%, afectando directamente a la posibilidad de generar empleos dignos, que se ha establecido en el Plan México, de la presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo.
  • Gutiérrez Camposeco enumeró los retos que enfrentan las pequeñas y medianas empresas (pymes): pagos de múltiples contribuciones, escaso acceso al financiamiento, corrupción en verificaciones, pago por derecho de piso, ausencia de incentivos fiscales reales, falta de capacitación técnica y competencia desleal de productos chinos.

En este contexto, advirtió que la implementación de una jornada reducida, sin considerar el entorno real de las Pymes, podría provocar el cierre de negocios, aumento de la informalidad, debilitamiento sindical y repunte del comercio informal en vía pública.

  • Por otra parte, advirtió que la reforma laboral de 40 horas, lejos de ser una solución, esta podría incentivar a la informalidad, al no tomarse el entorno completo de las pequeñas y medianas empresas.
  • Además, enfatizó la distinción de las pymes respecto a las grande que se defienden solas, debido a que muchas son intensivas en capital y bajas en mano de obra, en ese sentido, muchas ellas ya operan bajo el esquema de las 40 horas.

Finalmente, el presidente de la Canaco CDMX, expresó que la mano de obra de las pymes, son la estructura fundamental dentro del mercado interno, “Las Pymes son la base de nuestra pirámide económica, muy lejos de las decisiones y aplausos de las cúpulas empresariales”, finalizó.

Pide IP disminuir informalidad previo a reducción de jornada

Sector privado advirtió que es necesario combatir la informalidad previo a reducción de jornada laboral.

  • Al participar en el primer foro sobre el tema, organizado por la Secretaría del Trabajo, Ana María Aguilar, directora ejecutiva del Consejo Mexicano de Negocios (CMN), consideró que se debe tomar en cuenta que las empresas necesitan invertir en el País para cumplir con objetivos del Plan México.
  • «El plan México tiene el objetivo de inversión del PIB de 28 por ciento para 2030. Lo que estamos viendo es que necesitamos más inversión para que las empresas y los trabajadores seamos más productivos. Necesitamos que el sector privado participe con 4 puntos porcentuales más de inversión. Mantengamos en mente que necesitamos mayor inversión para ser más productivos», subrayó.
  • Calificó el tema de informalidad como «una tragedia» y consideró que no se puede hablar de una reforma de reducción de jornada sin combatir el trabajo informal. «La informalidad es una tragedia, deja sin protección al trabajador y a su familia, sin acceso a una red social de salud, sin una pensión y lo deja fuera de los servicios financieros.

«Es una lucha que debemos de contemplar cuando estamos hablando de mejoras en el mercado laboral, no es posible hablar de ello sin pensar en cómo podemos disminuir la informalidad», afirmó.

  • En su oportunidad, Vicente Gutiérrez Camposeco, presidente de Canaco, auguró que la reforma elevará la informalidad hasta diez puntos porcentuales.

«De una vez les adelanto: si la reforma laboral se aprueba, tal y como ha sido planteada, en poco tiempo el personal ocupado en la informalidad podría pasar del 55 al 65 por ciento.

  • Por tanto, los empleos dignos de los que habla el Plan México, tampoco serán posibles», advirtió el titular de Canaco.
  • Gutiérrez Camposeco subrayó que entre los riesgos que implicaría una reducción en la jornada de trabajo está el cierre de negocios, aumento de la informalidad y un repunte del comercio en vía pública.

Informalidad laboral afecta a uno de cada dos trabajadores en AL

Una de cada dos personas que trabaja en América Latina y el Caribe lo hace en la informalidad, según informó este jueves la Organización Internacional del Trabajo (OIT). Esta situación supera el 70% en la mayoría de los países de la región, con Bolivia por encima del 80%.

  • Las menores tasas de informalidad se registran en Chile y Uruguay, donde alcanza el 24 %. La directora regional de la OIT, Ana Virginia Moreira, señaló que la «trampa de la informalidad» es uno de los mayores obstáculos para lograr el trabajo decente y la justicia social en la región.
  • La OIT detalla que tres de cada cuatro trabajadores informales en la región trabajan por cuenta propia y en microempresas (mypes). Además, dos de cada diez ocupados informales son asalariados en el sector no formal, y el resto trabaja en el sector hogares.
  • Existe una notable brecha entre la tasa de informalidad rural (75.4%) y urbana (44%). Las ramas de actividad con mayor informalidad son la agropecuaria y la construcción, con tasas del 80% y 70%, respectivamente.

La OIT alerta que los trabajadores informales tienen entre tres y cuatro veces más probabilidades de ser pobres que los trabajadores formales.

  • Este problema afecta principalmente a mujeres, jóvenes, personas de determinados grupos étnicos, migrantes y personas con menos educación.

Moreira enfatizó que se requiere la actuación urgente, renovada y decidida de los gobiernos y los interlocutores sociales para enfrentar la informalidad de manera efectiva.

  • Para abordar este desafío estructural, multidimensional y persistente, la OIT presentó la Estrategia de Formalización para América Latina y el Caribe 2024-2030 (FORLAC 2.0).

La iniciativa busca facilitar la transición de la economía informal a la formal y promueve políticas de reconocimiento y cumplimiento de derechos laborales, así como sanciones e incentivos para la formalización.

  • La FORLAC 2.0 se posiciona como el nuevo marco de referencia para el diseño de políticas y estrategias integradas e innovadoras que promuevan el trabajo decente y la justicia social en la región.
  • Esta estrategia aborda las causas estructurales de la informalidad, como la baja productividad y la desarticulación entre políticas de empleo y desarrollo de competencias y protección social.

Durante la presentación, Moreira destacó que la iniciativa busca transformar la realidad de la informalidad mediante un marco integrado de políticas que incluyan intervenciones innovadoras y enfoques de igualdad de género.

  • Estos aspectos deben implementarse de forma simultánea y conjunta para lograr resultados efectivos. La implementación y el plan operativo para el bienio 2024-2025 de la FORLAC 2.0 fueron discutidos en una presentación virtual por representantes de la OIT, gobiernos, empleadores, trabajadores e invitados especiales.

Entre los participantes estuvieron la ministra de Trabajo, Empleo y Seguridad Social de Paraguay, Mónica Recalde, el secretario ejecutivo de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), José Manuel Salazar-Xirinachs, y el director general adjunto de empleo, capacidades y políticas sociales de la Comisión Europea, Stefan Olsson.

La OIT reafirmó la necesidad de voluntad política al más alto nivel para enfrentar la informalidad y lograr un cambio significativo en la región. /Agencias-PUNTOporPUNTO

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