ENERGÍA RENOVABLE, clave para acabar con la POBREZA energética y limitar el CAMBIO CLIMÁTICO

La mitigación del cambio climático depende, sobre todo, de un cambio radical en la forma de producir y utilizar la energía.

António Guterres, secretario general de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) señaló que si no hay una descarbonización rápida y profunda en los sistemas de energía en los próximos 10 años, no se podrán alcanzar los acuerdos climáticos como el Acuerdo de París para limitar el aumento de temperatura.

  • Del mismo modo, durante el Diálogo de alto nivel sobre energía, Guterres indicó que la energía renovable, asequible y sostenible para todos será clave para acabar con la pobreza energética y limitar el Cambio Climático.
  • “Tenemos las herramientas que necesitamos. La energía solar fotovoltaica es ahora la fuente de energía más barata en la mayoría de los países. Y las energías renovables generan tres veces más puestos de trabajo que el sector de los combustibles fósiles. El sol y el viento son las estrellas de nuestro sistema energético”, apuntó.

Sin embargo, Guterres afirmó que la implementación de estas herramientas no ha sido rápida, pues aún se está lejos de proporcionar energía limpie y asequible para todos.

Asimismo, indicó que al menos nueve de cada 10 personas respiran aire contaminado, lo que ocasiona 8 millones de muerte prematuras cada año. Además, 760 millones de personas aún carecen de acceso a la electricidad y 2 mil 600 millones no tienen acceso a soluciones limpias para cocinar.

Los pobres no pueden permitirse la energía necesaria para la vida diaria

El prelado también habló de la importancia de que los precios de la energía sean razonables, pues el acceso a la energía también depende de la asequibilidad y el precio: “Los pobres, incluidos los que se encuentran en la periferia de la sociedad en los países desarrollados, a menudo no pueden permitirse la energía necesaria para la vida diaria. Por lo tanto, es esencial que los precios de la energía sean razonables, que las prácticas empresariales sean éticas y que se concedan subvenciones a los más pobres”.

Impacto negativo de la producción/consumo

Otro punto importante a tener en cuenta sobre la energía es “el impacto resultante en el medio ambiente” ha dicho Mons. Gallagher: “La extracción, la transformación, el transporte y el consumo de combustibles fósiles y de energía sucia dañan el aire, el agua, el suelo, los ecosistemas y el clima”.

  • De hecho – dijo – “su impacto desproporcionado en los pobres y en los que se encuentran en situación de vulnerabilidad, en algunas circunstancias provoca malestar social, impactos negativos en la salud, conflictos y numerosas violaciones de los derechos humanos”.

Además de que el cambio climático altera el sector agrícola, agrava la inseguridad y la escasez de agua y aumenta la exposición a fenómenos meteorológicos extremos, destruyendo los medios de subsistencia y obligando a muchos a abandonar sus hogares y emigrar.

Prioridades del futuro

En ese sentido, el secretario general de la ONU apuntó que existen cuatro prioridades para el futuro energético.

  • Cerrar la brecha de acceso a la energía para 2030
  • Cambiar rápidamente a sistemas de energía descarbonizados.
  • Alcanzar el acceso universal a la energía para 2030 y mantener una trayectoria neta cero para mediados de siglo.
  • Asegurarse que nadie se quede atrás en la carrera hacia un futuro neto cero.

El costo del cambio

En la reunión intervino también el presidente de la Asamblea General, quien tocó un punto medular de la transición hacia la energía limpia: el costo de dicho cambio.

“Es esencial un aumento sustancial al financiamiento de la energía limpia para todos los países, pero sobre todo para las naciones menos desarrolladas, sin litoral o los pequeños Estados insulares en desarrollo, donde la pobreza energética equivale a la pobreza general”, subrayó.

  • Abdulla Shahid detalló que el flujo de recursos para apoyar la energía renovable en los países desarrollados sumó 21.400 millones de dólares en 2017, un aumento del 100% con respecto a 2010. Sin embargo, los países menos desarrollados, sin litoral y pequeños Estados insulares en desarrollo recibieron apenas una pequeña tajada de esos fondos, lamentó.

Como ejemplo de la urgencia de recursos, también informó que de los 4400 millones de dólares que hacen falta para lograr el acceso universal a energía limpia para cocinar sólo se han reunido 32 millones de dólares.

Compromisos previos

Antes de la reunión de hoy, numerosos gobiernos y empresas habían firmado ya compromisos relacionados con el cambio hacia la generación de energía limpia.

  • En junio pasado, unos 50 ministros del medio ambiente trazaron planes para reducir las emisiones y garantizar que todas las personas, especialmente las de los países en desarrollo, tengan acceso a electricidad sostenible.
  • Además, Chile, Colombia y la República Dominicana firmaron con el Banco Interamericano de Desarrollo un Pacto de Energía que establece una meta regional del 70% de energía renovable para América Latina en 2030, un acuerdo abierto al que se han adherido Bolivia, Costa Rica, Ecuador, Guatemala, Haití, Honduras, Paraguay, Perú y Uruguay.

Por parte del sector privado, destacaron, entre otros, los compromisos de las Fundaciones IKEA y Rockefeller, que anunciaron un fondo de mil millones de dólares para impulsar el acceso a la energía renovable en los países en desarrollo. Asimismo, GOGLA, una asociación global para la industria de la energía solar, prometió brindar un mejor acceso a la electricidad para mil millones de personas para 2030./Agencias-PUNTOporPUNTO

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