MARGINACIÓN y POBREZA LABORAL complica oportunidades de las MAMÁS en el PAÍS

De acuerdo al Coneval, la inserción de las madres en el mercado de trabajo cae 5 puntos porcentuales durante los primeros años de vida de los hijos.

La falta de educación escolar, la precariedad laboral y la desigualdad impiden una verdadera celebración del Día de las Madres este 10 de mayo en México.

Se mamá mexicana se ha complicado en los últimos años debido a la desaceleración económica, la alta inflación y a la pandemia del COVID, fenómenos que generan un deterioro en sus condiciones, de acuerdo a datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografia (Inegi) y del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval).

A continuación te presentamos algunas cifras de la realidad que viven las mamás en el país.

  • Al cierre de 2020, 35 millones de 221,314 mujeres mexicanas tenían hijos. Es decir que 7 de cada 10 mujeres de 15 años o más dijeron ser madres.
  • Tienen 2.2 hijos en promedio.
  • El 48% dice estar casada, el 23% vive en unión libre, 10% es viuda, 9% está separada, 7% soltera y 3% divorciada.
  • 57% de las madres contaba con educación básica, 19% con educación media superior, 17% con estudios de educación superior, y el 7% carecía de algún nivel escolar.
  • 4 de cada 10 madres estaban económicamente activas al cierre del 2020.
  • Colima, Baja California Sur, Baja California y la CDMX son los estados en donde las mamás tienen una mayor participación económica.
  • Chiapas, Zacatecas, Veracruz y Tabasco son las entidades donde las madres mexicanas tienen una menor participación económica.

Madres trabajadoras en el país

  • 63% es empleada u obrera.
  • 26% trabaja por cuenta propia.
  • 4% es ayudante con pago.
  • 3% es trabajadora sin pago.
  • 3% es patrona o empleadora.
  • 1% es jornalera o peona.

De acuerdo al Coneval, la inserción de las madres en el mercado de trabajo cae 5 puntos porcentuales durante los primeros años de vida de los hijos.

Tener hijos reduce la participación laboral de las mujeres, mientras que en los hombres la aumenta: el promedio de las tasas de ocupación de las madres de 21 a 55 años se ubicó en 55% entre los años 2016 a 2020, mientras que la de las mujeres sin hijos fue al menos 10 puntos porcentuales mayor.

Si se compara el periodo de agosto a noviembre de 2020 con el mismo periodo de 2018, la población ocupada con hijos menores de 5 años se redujo en 11.0% en los hombres y en 8.6% en las mujeres.

  • En 2020, a nivel nacional, las horas promedio semanales que las mujeres dedicaron a las tareas de cuidado de otras personas del hogar superaron en 11.5 las dedicadas por los hombres.
  • De 2018 a 2020, el incremento en el número total de horas que las mujeres destinaron a los quehaceres domésticos fue de 67 millones, mientras que para los hombres fue de 44 millones.

Las ocupaciones feminizadas presentaron las mayores pérdidas de empleo en el periodo de agosto a noviembre de 2020. La población ocupada de mujeres en este tipo de labores disminuyó en 948,300 personas, mientras que el descenso del empleo de los hombres en estas ocupaciones fue de 220,300 personas.

Desigualdad salarial y machismo, principales problemas

OCCMundial, el Centro de Carrera Profesional en línea, realizó su tradicional encuesta realizada en el marco del Día Internacional de la Mujer, que se conmemora este martes 8 de marzo, con el objetivo de conocer la opinión de los usuarios sobre los efectos del COVID-19 en las mujeres y qué impactos de género ha tenido la crisis causada por la pandemia en el mercado laboral.

  • El sondeo, que fue realizado en febrero y marzo de 2022 a 1,000 personas (88% mujeres y 12% hombres), reveló que del total de las mujeres encuestadas, el 61% no cuenta con un empleo actualmente, de las cuales, el 50% se quedó sin trabajo durante la pandemia (2020 y 2021), el 18% perdió su empleo al iniciar la emergencia sanitaria por COVID-19 hace dos años, otro 18% dejó de laborar en las últimas semanas y un 14% dijo que no contaba con trabajo previo a la pandemia.

Al preguntarles sobre las acciones o actividades que han realizado desde que se quedaron sin empleo, la mayoría (57%) comentó que siguen en la búsqueda de una oportunidad laboral, el 12% está cuidando a su familia, ya sea sus padres o sus hijos, el 8% trabaja de manera informal, el 7% está dedicada al hogar, el 6% decidió emprender, el 5% aprovechó para estudiar o capacitarse.

Del 39% de las mujeres que sí tiene trabajo, el 58% labora de manera presencial, el 23% continúa en home office y el 19% trabaja en un esquema híbrido.

Del total de mujeres que labora de manera presencial, al 55% les ha afectado regresar a sus centros de trabajo por las siguientes razones:

  • Les ha afectado en su salud física (20%)
  • Pierden tiempo por las distancias (18%)
  • Les ha afectado en su salud mental (13%)
  • Les falta tiempo para hacer ejercicio o capacitarse (13%)
  • Gastan más al salir a la calle (11%)
  • Son menos productivas (7%)

Al 34% de las mujeres que trabaja de manera presencial no les ha afectado ni beneficiado, mientras que al 11% les ha beneficiado, ya que dicen que pueden organizar mejor su tiempo (27%), pueden cumplir mejor con las responsabilidades laborales (18%), les da mayor bienestar emocional (14%), les da mayor bienestar físico (9%), mientras que el 32% mencionó, entre otras razones, la importancia del contacto con el equipo de trabajo, la disminución del estrés laboral o el incremento de ventas.

Para las mujeres que laboran en esquemas de home office o híbrido, lo más difícil de implementar el trabajo en casa ha sido dividir su tiempo entre trabajo, casa y familia (27%), dicen tener más trabajo al estar más tiempo conectadas (26%), contar con espacios inadecuados (8%), las distracciones del hogar (8%), experimentar falta de concentración (2%) y experimentar pérdida de su independencia (2%).

Al hablar del distanciamiento social ocasionado por las medidas de salud y seguridad por la pandemia, las mujeres encuestadas revelaron en qué les a afectado y/o beneficiado esta acción:

  • En su salud mental (33%)
  • Porque pasan más tiempo con su familia (32%)
  • Porque tienen que dividir el tiempo para el trabajo, la casa, la atención de los hijos (23%)
  • Porque gastan menos (19%)
  • Porque son menos productivas (22%)
  • Les da tiempo para hacer ejercicio o capacitarse (17%)
  • En la salud física (18%)
  • Por el ahorro de tiempo (12%)
  • Porque gastan más al estar en casa (17%)
  • Porque tienen más tiempo de calidad (11%)

De manera general, el 22% de los encuestados que sí cuenta con empleo (hombres y mujeres) aseguró que en la empresa en la que laboran sí impulsan la Norma 025 de Igualdad Laboral y No Discriminación, el 15% dijo que desconoce si lo hacen, el 12% afirmó que no, el 10% reveló que no conoce dicha norma.

Al preguntarles cuáles consideran que son los principales problemas a los que se enfrentan las mujeres en el mercado laboral, los participantes en el sondeo mencionaron los siguientes:

  • Falta de igualdad en salarios (48%)
  • Largas jornadas de trabajo (33%)
  • Machismo (31%)
  • Acoso sexual (28%)
  • Desempleo (27%)
  • Problemas relacionados a la maternidad (25%)
  • Misoginia (23%)

De manera adicional, la encuesta semanal del “Termómetro laboral”, en su semana 95 (del 25 de febrero al 3 de marzo), reveló que el 42% de los participantes afirma que menos del 10% de las mujeres ocupa puestos de alto mando en sus empresas, el 25% señaló que son entre el 11% y el 20%, otro 22% dijo que en su empresas los puestos directivos los ocupan entre el 21% y 49% de mujeres, mientras que 11% asegura que más del 50% de la alta dirección está a cargo de mujeres.

Por otra parte, se les preguntó cuántas mujeres en su centro de trabajo combinan su empleo formal con uno informal, es decir, venta por catálogos u otro negocio, para completar sus gastos, a lo que respondieron, lo siguiente:

  • De 1 a 5 (47%)
  • De 6 a 10 (14%)
  • Más de 10 (19%)
  • Ninguna (20%)/Agencias-PUNTOporPUNTO

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