Regiones CENTRO y SUR-SURESTE agrupan 74.5% de las PÉRDIDAS LABORALES en la República

El Covid-19 mermó las fuentes de empleos formales durante el año pasado en todo el país, registrándose 647,710 despidos

Tan solo dos entidades del país concentraron el 54.6 por ciento del total de la pérdida de empleos formales durante el 2020 originada por las medidas para contener los contagios de la pandemia del coronavirus.

  • De acuerdo con los datos del IMSS, la Ciudad de México representó el 39.6 por ciento de las pérdidas de plazas, es decir, 256 mil 145 mil puestos. Lo anterior representó su primer retroceso desde el 2009, cuando en esa ocasión se destruyeron 91 mil 868 empleos.
  • Para el caso de Quintana Roo significó el 15.03 por ciento del total, sumando una pérdida de 97 mil 381 puestos de trabajos, su primera caída después de 11 años de incrementos.

“Para la CDMX y Quintana Roo la caída en el empleo equivale a la generación que se había logrado en los últimos 3 años”, destacó Alejandro Saldaña, subdirector de análisis económico de Ve por Más.

  • Explicó que gran parte del desempleo del país tuvo que ver con la pandemia, y otro elemento importante en la pérdida del empleo fue la dependencia a los sectores como el de servicios, comercio, turismo, preparación de alimentos y bebidas, que frenaron sus actividades en los primeros meses del 2020.

Agregó que hubo una divergencia muy importante entre entidades asociado a los efectos del virus, que fueron asimétricos entre sectores y estados; “posiblemente iniciemos el 2021 con la misma tendencia debido al recrudecimiento de la pandemia, y a pesar del despliegue de la vacuna esperamos que sea hasta la segunda mitad del año para notar una mejoría”.

  • Otras entidades con mayor pérdida de empleos fueron Puebla (39 mil 172 plazas), Guanajuato (34 mil 366), Jalisco (32 mil 332) y Nuevo León (22 mil 568).

BC, Chihuahua y Tabasco, únicos estados que generaron empleos

El Covid-19 mermó las fuentes de empleos formales durante el año pasado en todo el país, registrándose 647,710 despidos; sin embargo, en este panorama de incertidumbre laboral, tres estados lograron mostrar saldos positivos: Baja California, Chihuahua y Tabasco.

De acuerdo con datos de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social, Baja California fue primer lugar en generación de empleos formales, con 27,952 trabajadores asegurados en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).

  • La principal fortaleza del estado fronterizo, que es su vocación económica, fue el conjunto de industrias de transformación, con 29,023 altas; le siguieron agricultura, ganadería, silvicultura, pesca y caza con 3,099; transportes y comunicaciones con 902; comercio con 541; industrias extractivas con 108, e industria eléctrica y captación y suministro de agua con 66.
  • No obstante, tres sectores económicos presentaron despidos: servicios sociales y comunales (728 bajas), construcción (2,440) y servicios para empresas, personas y el hogar (2,619).
  • Por tipo de empleo, de los 27,952 trabajos creados en Baja California, 25,986 correspondió a permanentes y 2,407 a eventuales del campo, mientras en eventuales urbanos se perdieron 441.

Esta entidad resaltó en el mercado laboral mexicano por incentivar, mediante esquemas de apoyos fiscales, ayudas sociales e inversión productiva, su principal sector: la manufactura. Además, todos sus municipios están, desde el 2019, en el programa federal de zona libre (aumento al doble del salario mínimo, IVA a 8%, ISR a 20% y homologación de los precios de los combustibles con los de Estados Unidos).

  • La segunda posición fue para Chihuahua –tiene municipios en zona libre– al presentar 10,695 nuevos trabajos formales en el 2020. Al igual que Baja California, su motor fue la manufactura, con 26,711 plazas creadas; otros sectores importantes fueron transporte y comunicaciones (1,492), servicios sociales y comunales (679) e industria eléctrica y captación y suministro de agua (125).
  • En tanto, sus debilidades fueron actividades primarias (pérdida de 361 puestos), industrias extractivas (501), comercio (2,148), construcción (4,041) y servicios para empresas, personas y el hogar (11,261).
  • De sus 10,695 empleos nuevos, 6,097 se refieren a permanentes, 4,480 a eventuales urbanos y 118 a eventuales del campo.

Estos resultados demuestran que estos dos estados del norte aprovecharon su vocación manufacturera y los beneficios del programa fronterizo para recuperar las plazas perdidas por el confinamiento total y paro de actividades no esenciales en abril y mayo, así como la baja operatividad y aforo en los meses posteriores.

Tabasco, territorio petrolero, completó el podio de las únicas entidades que generaron trabajos formales el año pasado, con 2,993 altas en el IMSS. Llama la atención que fue su segundo año al hilo con saldo positivo, ya que a partir de mediados del 2014, por la disminución en los precios del crudo y en la producción petrolera, se sumergió en una crisis económica.

  • La apuesta del gobierno estatal para combatir los estragos del Covid-19 fue la obra pública, acción que se reflejó en la creación de trabajos de la industria de la construcción, con 7,435 puestos, la cifra más elevada. Otros sectores con contrataciones fueron actividades primarias con 519; servicios sociales y comunales con 188, e industria eléctrica y captación y suministro de agua potable con 18. La rama con mayor merma fue servicios para empresas, personas y el hogar (3,534).

Del total, 4,852 fueron eventuales urbanos y 502 del campo, mientras en permanentes se registraron 2,361 despidos.

Regional

De los 647,710 empleos perdidos el año pasado en el país, 48.4% correspondieron al centro y 26.0% al sur-sureste, es decir, del total de despidos, tres cuartas partes se concentraron en estas dos regiones./Agencias-PUNTOporPUNTO

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