CRISIS pone en RIESGO 600 mil EMPRESAS; Empleados de menos ingreso quienes más perdieron

Nueve de cada 10 empleos perdidos por la crisis, de marzo a mayo pasados, fueron de trabajadores que no ganaban más de dos salarios mínimos

En el país hay cerca de 600 mil empleadores del sector formal e informal que están en suspensión temporal y sin recibir ingresos, con una elevada incertidumbre de poder reactivar sus actividades debido a la pandemia por coronavirus, indicó BBVA.

“Dado este volumen de empresas paradas por inactividad es muy probable que el cierre de empresas se incremente y sus empleados engrosen el empleo informal, el desempleo y los niveles de pobreza laboral”, indicó el área de investigación del grupo financiero en un reporte.

  • Indicó que con base en la Encuesta Telefónica de Ocupación y Empleo (ETOE) del Inegi, hay 311 mil empleadores del sector formal en suspensión temporal sin recibir ingresos y 313 mil informales. En el primer caso el 81 por ciento son microempresas, y 98 por ciento en el segundo. Estima que alrededor de 20 mil empresas formales e informales han cerrado sus operaciones.
  • Destacó que en tres meses se perdieron un millón de empleos y estimó que la recuperación del mercado laboral podría extenderse hasta 2024, debido a la paralización de la economía por la pandemia, la incertidumbre de la reapertura y la falta de estímulos por parte del Gobierno federal.

Así, pese a que en mayo se desaceleró la pérdida de empleos, prevé que en los próximos meses se seguirán viendo variaciones negativas, además de un ajuste importante en diciembre de este año.

Para los analistas de BBVA, además del turismo, el empleo en el sector de la construcción ha sido el que más ha resentido el impacto de la pandemia, con una contracción de 17.3 por ciento en mayo y con lo que acumula 16 meses consecutivos con caídas.

Nueve de cada 10 no ganaban más de dos mínimos

Nueve de cada 10 empleos perdidos por la crisis, de marzo a mayo pasados, fueron de trabajadores que no ganaban más de dos salarios mínimos, es decir, 7 mil 400 pesos al mes, revelan datos oficiales. Se trata de una afectación mayor a la ocurrida en recesiones anteriores, como las de 1994-1995 y 2008-2009.

  • Los programas de apoyo al empleo no han logrado evitar la afectación de los trabajadores más vulnerables, comentó David Cervantes Arenillas, analista de BBVA Research.
  • De marzo pasado, cuando fueron anunciadas las medidas de confinamiento para enfrentar la pandemia de Covid 19, a mayo anterior, dato disponible más reciente, se han perdido un millón 30 mil plazas formales, de acuerdo con registros del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).
  • Adicionalmente, 600 mil firmas están paralizadas y sin ingresos, según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) citados por el analista de BBVA.
  • De los más de un millón 30 mil empleos perdidos, 92.4 por ciento fueron de trabajadores con ingresos equivalentes hasta dos salarios mínimos, lo cual, de manera directa, incrementó el nivel de sueldo promedio real, apunta un estudio de BBVA elaborado por Cervantes Arenillas con base en información del IMSS y el Inegi.

La actual es una recesión o crisis económica diferente de otras experimentadas por México en el pasado reciente, expuso.

Esto es notorio simplemente al observar la intensidad y velocidad de su impacto en el mercado de trabajo, añadió.

  • En sólo tres meses, de marzo a mayo, se perdieron más de un millón de empleos, destrucción absoluta mes a mes que supera las crisis de 1994-1995 y 2008-2009, cuando los máximos en variación mensual no superaron 193 mil y 327 mil, de manera respectiva.

Hasta el momento la reducción de empleos durante la crisis de 1994 sigue siendo mayor en relación con el tamaño del mercado de trabajo.

Sin embargo, agregó, dado el grado de afectación de la economía, la incertidumbre sobre la reapertura económica, aunada a la falta de estímulos suficientes o bien focalizados para reactivar la economía, se prevé que la afectación del mercado de trabajo en el mediano y largo plazos puede ser mucho mayor y la recuperación extenderse hasta comienzos de 2024 o más, en la medida en que se profundice la caída.

Sostuvo que la baja de empleos no significa que se ha superado lo peor, pues según las cifras oficiales el saldo de la pérdida de trabajos formales en lo que va del año es de 838 mil, lo que borra prácticamente la creación de 2.5 años y coloca al país 29 meses atrás respecto de los niveles de principios de 2018.

Detalló que si bien, por el momento, la pérdida se ha dado entre los sectores más vulnerables y los trabajadores de menores ingresos, es previsible que en una segunda etapa la destrucción de empleos alcanzará a los trabajadores con mayor nivel de remuneración.

Advierten que salarios caerán un 20% por despidos

Alfredo González. Los despidos de personal que provocó el coronavirus generan una sobreoferta de mano de obra de 22 millones de plazas que provocará una caída de 20 por ciento en los niveles de salario, advirtió Armando Leñero Llaca, presidente del Centro de Estudios para el Empleo Formal (CEEF).

«Se va a seguir deteriorando el empleo formal, porque en los últimos tres meses llevamos un millón 30 mil empleos formales que se han perdido, así que los sueldos que se van a ofrecer van a ser mucho más bajos».

Por esa razón, calificó de urgente adoptar propuestas como el salario solidario, para así evitar un costo mayor del desempleo, pues ya llevó a niveles de retroceso de un 6 por ciento en el Producto Interno Bruto (PIB), pues podría alcanzar niveles de un 11 por ciento con riesgos de disparar más la inseguridad.

  • El salario solidario es una propuesta de organismos empresariales para que la mitad del sueldo de los trabajadores con ingresos hasta de tres mínimos lo pague el Gobierno y arriba de ese nivel haya aportación, incluso del trabajador.
  • Indicó que la sobreoferta de mano de obra provoca negociaciones entre patrones y trabajadores para aceptar una contracción salarial encaminada a mantener el empleo.
    «Esto va a continuar durante todo el año, nuestro estimado es de una caída de un 20 por ciento en los niveles salariales», sentenció.

«Mientras haya baja demanda y una sobreoferta de trabajo, debemos estar conscientes de que es una mercancía más, por lo que su precio tiende a la baja en todos sus niveles».

Leñero recordó que la pérdida de empleos de enero a mayo alcanzó las 874 mil plazas, pero la expectativa es que la cifra aumente en los meses de junio, julio y agosto.

Las empresas están despidiendo primeramente a la mano de obra no calificada y que es sustituible con facilidad y es fácil conseguirla en caso de volverla a necesitar en el mediano plazo.

«Lo que buscan es conservar a la llamada mente de obra, que es donde las empresas tienen su mayor capital humano y que después les sería más difícil encontrar un perfil para llenar la plaza».

Este fenómeno de despido concentrado en las plazas de menor salario, aclaró, provoca datos engañosos en las cifras del Seguro Social, porque reflejan salarios promedio más altos que en el mes de junio alcanzaron los 408 pesos diarios, unos 12 mil pesos mensuales, debido a que en los cálculos desaparecen los trabajadores con menos sueldo.

«El salario promedio a principios de año era de entre 8 mil y 9 mil pesos y ahora resulta que alcanza 12 mil».

Sector formal enfrenta la crisis con poco o nulo apoyo

A diferencia del sector informal, donde el gobierno federal ha facilitado un millón de microcréditos y prepara más, trabajadores y empresas formales enfrentan una de las mayores crisis económicas en la historia con pocos o nulos apoyos financieros.

Según datos oficiales, mientras el gobierno entregará un millón de créditos de 25 mil pesos a microempresarios informales sin solicitar ningún tipo de requisito, entre falta de demanda y reglas más estrictas, en el sector formal sólo colocará poco más de 200 mil de un millón anunciados.

  • Al respecto, Enrique Díaz-Infante, especialista en el sector financiero del Centro de Estudios Espinosa Yglesias, consideró que el sector formal ha quedado en el desamparo, dado que, además de que los montos de 25 mil pesos son insuficientes, los requisitos impuestos eran complicados.
  • En el caso de los créditos del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) dirigidos a empresas formales, éstas debían comprobar que no habían despedido a nadie en los primeros tres meses del año, pero de acuerdo con el especialista a esas alturas las microempresas ya se habían visto obligadas a hacer recortes de personal.

Subrayó que las microempresas, a las que podía servir un crédito de 25 mil pesos, ya había despedido trabajadores. Mientras, las pequeñas y medianas son un poco más fuertes y tal vez lograron conservar la plantilla; sin embargo, un financiamiento de ese tipo les es insuficiente para afrontar sus problemas financieros./Agencias.PUNTOporPUNTO

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