Para garantizar el abasto de gasolina en el país, el gobierno federal compró 500 pipas y lanzó una convocatoria para contratar a dos mil conductores que se encargarán de operar los vehículos cisterna. Con ello, informó el presidente López Obrador, esperan aumentar 25 por ciento el abastecimiento del combustible en la Ciudad de México, Querétaro, Guanajuato, Jalisco y Michoacán, entidades que más afectadas se han visto por el desabasto. Acompañado por la secretaria del Trabajo, Luisa María Alcalde, el mandatario reconoció que aún se encuentran “en camino” de normalizar el abasto del combustible, pues han encontrado resistencias del crimen organizado./ El Heraldo de México
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