CRECEN TEMORES GLOBALES por CORONAVIRUS

Hay una oportunidad para que México desarrolle una estrategia que aligere el impacto que tendrá el coronavirus en su economía. Podría cambiar su postura económica e incentivar a la inversión, sugirió el director de Investigación para América Latina en el Instituto de Finanzas Internacionales (IIF, por su sigla en inglés), Martín Castellano.

  • Explicó que “México debe enviar señales consistentes, uniformes y en una sola dirección desde todos los sectores de la administración para atraer inversiones y diferenciarse de otros emergentes. Ahí es donde deberían moverse en contextos de mucha incertidumbre y choques externos”.
  • Al término de su visita anual para recoger la información con la que actualizará su expectativa para México, dijo a El Economista que la inversión fue un determinante para el estancamiento del PIB en 2019. De ahí la relevancia de generar un ambiente de confianza para renovar el atractivo, y más en el contexto mundial de incertidumbre.
  • “Podrían reorientar la política económica en general para acomodarse al shock y evitar un impacto más importante en la actividad económica”, comentó.
  • El analista de la mayor agrupación de instituciones financieras, que incluye a fondos de inversión, corredurías, bancos y aseguradoras de operación mundial, resaltó que “aún no sabemos la magnitud ni la duración que tendrá el choque por el Covid-19”.

Así que sugirió tomar este impasse como “una oportunidad para que México arme una sintonía fina en el manejo de los instrumentos de política pública para enfrentar el choque. Y eso puede implicar un cambio en la postura económica”.

Recortar tasas, un buen inicio

Tras entrevistarse con funcionarios del sector público, Banco de México e instituciones financieras, reconoció que “el gobierno esta buscando crear condiciones para mejorar los incentivos para la inversión privada”.

Por ello es más relevante tomar medidas lo más pronto posible.

Algo que debemos entender es que el choque (por coronavirus) llega en un momento donde la economía está estancada y la inflación bajo control. Y a partir de ahí se pueden formular las estrategias para enfrentar al choque, resaltó.

El mismo día que el IIF envió desde sus oficinas centrales de Washington su análisis sobre El impacto del coronavirus en el PIB mundial, Castellano subrayó la relevancia de mantener la relajación de la política monetaria.

México tiene espacio, es de los pocos países que tienen amplio espacio para recortar la tasa, y claramente hay un tema de relación de tasas con otros países. Todo mundo está bajando los márgenes y es totalmente distinto el contexto actual del que teníamos a fines del 2019, explicó.

Y por otro lado, al reorientar la política económica en general para acomodarla el shock se puede evitar un impacto más importante en la actividad económica.

Ciclo vigente entre México y EU

El analista del IIF refirió que su expectativa de crecimiento para México se encuentra en 1%, pero en el contexto de incertidumbre mundial por la magnitud y duración del coronavirus, se revisará a la baja.

Básicamente habrá un menor impulso de parte de Estados Unidos a quien recientemente rebajamos el pronóstico de 2% a 1.3 por ciento, aseveró.

Y argumentó que la industria manufacturera de Estados Unidos podría volver a desacelerar este año, en claro reflejo del deterioro de las cadenas de valor que tiene con China, afectada por el coronavirus.

“Siendo las manufacturas el nexo que mantiene unido al ciclo económico con México, es de esperarse una desaceleración que también afectará al PIB mexicano este año”, esgrimió.

Pero será hasta abril cuando tendrán un nuevo número en su previsión para el PIB mexicano./EL ECONOMISTA-PUNTOporPUNTO

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